“Díganos si fue amenazado, usted y su familia, eso lo entenderíamos”, fue una de las preguntas más repetidas que los diputados opositores a Morena realizaron durante la comparecencia del jefe delegacional de Tláhuac, Rigoberto Salgado ante la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del DF por su presuntos vínculos con la delincuencia organizada
Durante casi cinco horas, el salón “Heberto Castillo” del recinto legislativo de Donceles se convirtió por momentos en una sala de interrogatorios o en una competencia de asesores para ver quien sacaba la cartulina lo más rápido posible, y en otros, en un concurso de juego de palabras relacionado con ‘Ojos’.
Al inicio de la reunión, el delegado expuso durante 20 minutos una serie de contraargumentos de los que ya se le habían señalado en los medios de comunicación. Con artículos en leyes, reglamentos y oficios refutó haber tenido conflictos de interés al contratar en la demarcación presuntamente sin tener conocimiento a familiares y cercanos de Felipe de Jesús Pérez Luna, alias ‘El Ojos’.
Rechazó que él haya solapado la fiesta patronal del pueblo de Zapotitlán en julio de 2015, en donde Pérez Luna estuvo presente, y negó que hubiera recibido dinero de dudosa procedencia durante su campaña, así como que mantiene nexos con cualquiera organización criminal.
"Con respecto sobre las presuntas vinculaciones entre el titular de esta demarcación y organizaciones delictivas, niego categóricamente cualquier vínculo consanguíneo, de amistad o negocios con cualquier organización delictiva como se ha querido hacer creer. Esto es mentira, por más que se repita, nunca será verdad, quienes sostienen una presunta vinculación criminalista faltan a la verdad”, aseguró Salgado.
Los temas de la comparecencia se centraron en que sí tenía o mantiene vínculos con el Cártel de Tláhuac, del por qué sí tenía conocimiento del narcomenudeo no lo reportó a las autoridades correspondientes, el aumento de inseguridad y secuestros en la demarcación, el presunto enriquecimiento ílicito del delegado a partir de la construcción de su casa y del restaurante “La Carreta del Pacífico”.
A esos señalamientos el delegado se centró a negar todo de manera “categórica” y a decir que debido a la ‘ventilación’ de dónde está su domicilio, ahora está expuesto, al igual que su familia. Incluso el lapso de sus participaciones se fueron recortando. Todo fue repetitivo: las acusaciones en su contra y su defensa.
Los diputados de Morena tuvieron poco la palabra y cuando participaban señalaron la ausencia del secretario de Seguridad Pública, Hiram Almeida y que los cuestionamientos, así como la comparecencia se debían a un tema político, debido a que ese partido va arriba en las encuestas capitalinas para el 2018.
“Ya el jefe de gobierno ha dicho que el asunto es de narcomenudeo, no acepta de alguna manera que hay un problema grave en el asunto de crimen organizado, cuando se dice esto, tenemos aquí al diputado plurinominal Raúl Flores, que por cierto no lo eligió el pueblo, no obstante es muy enjundioso en los temas de seguridad, por qué no plantear el asunto de que comparezca Hiram Almeida y por qué deliberadamente sesgar el asunto a una sola región. Es preocupante eso, para el asunto de la seguridad pública en la ciudad”, indicó el diputado de Morena, Felipe Felix de la Cruz Menez.
En cuanto avanzaba el tiempo, los cuestionamientos se convirtieron en ofensas y reclamos al ver los diputados del PRD, PRI, PAN, PVEM, MC y PT que el delegado de Tláhuac no respondía de manera puntual a sus preguntas.
Los diputados Mauricio Toledo del PRD y Adrián Rubalcava del PRI, ambos ex jefes delegacionales señalados por actos de corrupción cuando gobernaron Coyoacán y Cuajimalpa, respectivamente, fueron los que más señalamientos ‘mortíferos’ hicieron.
“Yo sé que usted hoy por dentro se reirá, porque la fuerza de muchos de nosotros es la palabra, no son las armas; para nosotros la palabra, el micrófono es nuestro mejor instrumento, no las pistolas, no las AK y mucho menos las amenazas”, dijo el legislador Toledo, quien cuando fue delegado de Coyoacán fue acusado por presuntas extorsiones a empresarios y amenazas de muerte a comerciantes.
El priista y ex delegado de Cuajimalpa refirió a que si el delegado no se siente seguro en su delegación, que sería de los habitantes de Tláhuac.
“Me preocupa cuando usted menciona que expone su casa el diputado Toledo al mencionarla, que si usted, ni siquiera usted se siente seguro en su delegación, pues entonces yo creo que sí es un tema que debe preocupar a los vecinos de Tláhuac, porque si el que representa a la autoridad máxima en esa demarcación no se siente seguro en su delegación y además señala a un diputado que por revelar su domicilio ahora hay un sentimiento de inseguridad, lo invito a vivir en Cuajimalpa, ahí sí lo cuidamos, no se preocupe, yo me visto de azul y lo cuido, no se preocupe”.
En repetidas ocasiones los legisladores opositores mencionaron que de acuerdo al artículo 108 del estatuto de gobierno de la CDMX por "sus acciones u omisiones" en la demarcación se podría remover al jefe delegacional.
Casi al final, el diputado del PRD, Iván Texta, quien de plano le dijo que no le creía nada al delegado, pidió la destitución de Salgado ante la falta de respuesta a todos los cuestionamientos que realizaron los legisladores, así como por las presuntas pruebas que Texta dijo tener sobre su enriquecimiento ilícito,
“Le solicito al Presidente de la Comisión de Gobierno de este Poder Legislativo, inicie el procedimiento de remoción del Jefe Delegacional de Tláhuac Rigoberto Salgado Vázquez, y a los diputados integrantes de la Comisión Jurisdiccional, al diputado Armando López Campa, al diputado José Manuel Delgadillo, al diputado Israel Betanzos, al 86
diputado Carlos Alfonso Candelaria y a la diputada Nora del Carmen Arias, así como al diputado Mauricio Toledo, realicen todas las acciones necesarias para este fin”.
La comparecencia inició a las 11:00 horas y un poco antes de las 16:00 finalizó con un agradecimiento al jefe delegacional del presidente de la Comisión de Gobierno, Leonel Luna por asistir a la Asamblea. De inmediato Salgado se levantó de su lugar y se retiró. Sin embargo una nube de cámaras lo esperaban afuera de la sala. Como pudo saltó todos los obstáculos y avanzó hacia su automóvil que ya lo esperaba. Se retiró, mientras que unos gritos ahogados de “estamos contigo” lo acompañaron.
El líder de la bancada de Morena, César Cravioto enfatizó que la comparecencia fue un show político encaminado al 2018 y reiteró que hasta el momento no pedirán la renuncia del delegado Salgado.
“Montaron un show los partidos a fines a Miguel Ángel Mancera para pedir la destitución del delegado y más allá de las respuestas. Ellos solo buscan llamar la atención mediática y no concretar acciones más jurídicas, porque saben que no tienen la razón”, dijo.
