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A un año del crimen, exigen justicia por Cristian, enfermero asesinado

Durante la búsqueda de Cristian su familia se enteró de unas fotografías en las que el joven aparece en los separos de la Comisaría de Toluca

Escrito en METRÓPOLI el

TOLUCA.-Frente a quien algún día tuvo en sus brazos cuando fue pequeño, la señora Rosalba llora y pide justicia para su hermano Cristian Marcelino Trinidad Francisco, de 21 años de edad, cuyos restos los halló en la morgue de Tlalnepantla hace casi ocho meses en avanzado estado de descomposición, “le pido todos los días que me perdone por no haberlo encontrado a tiempo”, expresó llorando.

Dentro de su vivienda en Toluca, Rosalba le tiene un pequeño altar a su penúltimo hermano de nueve que son y con decenas de fotografías de su difunto hermano expuestas sobre una pequeña mesa en la que desayunaban y platicaban de la pandemia, recuerda que el joven enfermero desapareció el 17 de julio del año pasado, luego de salir con unos amigos del hospital donde trabajaba. Esto se dio un día antes de que Cristian cumpliera 22 años de edad.

Comentó que de acuerdo a las investigaciones, Cristian se subió a un taxi Didi para dirigirse a su hogar localizado en la colonia Nueva Oxtotitlán, donde lo esperaba su pareja sentimental, sin embargo, la unidad lo dejó cuadras antes de su casa, por lo que en la búsqueda, su familia dedujo que el taxista fue quien lo desapareció, pero no fue así, aparentemente.

Siete días después de la desaparición de su hermano, ella comenzó a difundir el hecho en sus redes sociales, por lo que a su teléfono móvil le llegó un mensaje de una mujer, quien afirmó conocer el paradero del especialista de la salud.

“Ella me comenta que Cristian estuvo comiendo unos pambazos en la Nueva Oxtotitlán y que pagó con un billete de 100 pesos y que posteriormente llegaron unos vecinos a golpearlo diciendo que era un delincuente”, sostuvo.

Entre las investigaciones, que incluso parte de éstas ha hecho la familia del muchacho, se señala que al número de emergencia 911 se recibió la llamada de auxilio, pero que cuando llegó la policía al sitio de la denuncia, dijeron los oficiales que no hallaron a Cristian.

Luego, “23 días después, la Fiscalía Antisecuestros me dice, no, sí, hay unas fotos donde él está con los policías, si los policías hubieran dicho, sí, nosotros nos lo llevamos, nosotros de todos modos hubiéramos revisado esas cámaras de seguridad y hubiéramos visto, hubo cámaras del C-5, nunca me las enseñaron, hubo cámaras que la Fiscalía Antisecuestros sí tomó información y la Fiscalía de Matlazincas las tuvo desde el séptimo día, mis familiares escucharon que dijeron, ya llegó la cámara C-5 de la calle Gigantes y cuando yo hablo con la licenciada Silvia, me dijo, no tenemos nada, ese día no grabaron”, denunció.

Sin embargo, se tuvo conocimiento de que existen unas fotografías en las que el joven aparece en los separos de la Comisaría de Toluca, “en efecto, hay algunas fotos en que él está con los policías, tiene desviación de mandíbula, los policías lo habían golpeado muchísimo, la ropa toda rota, las agujetas ya amarradas en la parte de los pies, tenía golpes en todo el rostro”, ahondó.

Fue hasta el 26 de julio, cuando le notificaron a la familia de Cristian, que ya lo habían encontrado, pero sin vida, atrás de una casa y por donde pasa un río en el municipio de Huixquilucan.

“El cuerpo estaba ya en descomposición, me dijeron que tenía entre 38 a 40 horas de muerto, lo tiraron en condiciones muy desfavorables, recibimos una llamada y nos dijeron que ahí estaba el cuerpo después de una lluvia, no sabemos si ahí lo arrojaron o si la lluvia se lo trajo (lo arrastró por el río), estaba muy torturado, sufrió mucho, el cuerpo estaba muy maltratado, tenía lesiones de puñaladas, muchísimas, tuvo fracturas, le rompieron un brazo, fue torturado con agua, lo desnudaron, él me decía en sueños, pedía a gritos que lo ayudáramos y hasta la fecha, yo todos los días le pido a Cristian que me perdone por no haberlo encontrado a tiempo”, sollozo la señora.

Al llegar el 11 de noviembre le notificaron que ya había orden de aprehensión para uno de los que se presume estuvo involucrado en la desaparición y muerte del muchacho, sin embargo, el mandamiento judicial no se ha cumplimentado, luego, fue citada el 2 de febrero de este año, pero no consiguió nada relacionado con la carpeta de investigación y el 26 del mismo mes fue nuevamente llamada pero no se le atendió en la Fiscalía donde se lleva el asunto, “y a la fecha no tengo nada, quiero saber qué pasa con el proceso, quiero saber por qué lo mataron”, reclamó Rosalba Trinidad Francisco.



(Sharira Abundez)