Adal, de 37 años de edad y médico, fue secuestrado ayer por segunda vez.
Quienes lo mantuvieron cautivo en una casa de seguridad, una semana antes, eran los mismos que ahora le exigían 100 mil pesos para no llevarlo allí de nuevo.
A punta de pistola lo obligaban a conseguir el dinero, mientras uno de sus captores conducía su Mini Cooper por calles de Iztapalapa.
Sin embargo, el GPS del teléfono celular de la víctima era rastreado por agentes antisecuestro de la Procuraduría capitalina.
De acuerdo con la carpeta FIZP/IZP-6/UI-2C/D/2843/05-201
El conductor del Mini Cooper aceleró para escapar, pero más adelante se estrelló contra la parte trasera de un tráiler.
Era aproximadamente la 1:00 de la madrugada cuando los secuestradores y los detectives se enfrascaron en un enfrentamiento a balazos.
Un agente de la PGJ, Mario Cortés Hernández, de 40 años de edad, fue asesinado, al tiempo que dos de sus compañeros resultaron heridos.
Dos secuestradores de igual modo salieron lesionados. Fuentes de la Procuraduría informaron que se identificaron como Jordan Fernando, de 26 años de edad y Alan René, de 36; ambos presuntos agentes de la Fiscalía General de la República (FGR), adscritos a la subdelegación de Morelos.
cmo