Delgado, cariñoso y futbolero, pero sobre todo joven, así se muestra Juan Pablo Irigoyen en sus redes sociales, quien, con 19 años, fue rescatado la mañana de este miércoles de entre los escombros de un edificio derrumbado en Gabriel Mancera y Escocia, en la colonia Del Valle, delegación Benito Juárez, al sur de la Ciudad de México, donde concluyeron las labores de rescate.
Irigoyen estaba en su departamento aquel fatídico 19 de septiembre, pasada la una de la tarde, el temblor azotó la ciudad, el país.
El edificio no resistió los embates de la tierra, por lo que en segundos se vino abajo, junto con él se llevó al joven entre las frías paredes de concreto. La alarma no sonó, la cercanía del epicentro le ganó.
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Juan Pablo, aseguraban sus familiares la semana pasada, se estuvo comunicando con ellos a través de su celular.
La mañana del martes fueron recuperados los cuerpos de Yadira Andrés González y Sandibel Caricio Higuera; la mañana del lunes, el de Anayeli Juárez Hernández de 17 años.
Un día antes fueron rescatados los cuerpos de Blanca Estela Montes de Oca, quien era cuidadora de Berthita, adulta mayor.
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Su familia fue sorprendida más de una vez por la noticia de que Juan Pablo está ya rescatado, en un hospital, pero al ver las fotos la decepción regresaba a ellos y hoy se ha confirmado su muerte.
Junto con el estudiante del Centro Universitario México, se encuentraban Anayeli Juárez Hernández y Vicente Medina Elizalde, quienes también murieron.