CASO NEWS DIVINE

Del Patrick Miller al New's Divine: ¿Quién es Alfredo Maya?

La popular voz del Patrick Miller tenía un sueño: tener su propia discoteca. El sueño duró 3 años, en 2008 un operativo de la policía terminó con él

El 8 de septiembre, el único acusado como responsable de la tragedia ocurrida en 2008 quedó en libertad
New's Divine.El 8 de septiembre, el único acusado como responsable de la tragedia ocurrida en 2008 quedó en libertadCréditos: Cuartoscuro
Escrito en METRÓPOLI el

Alfredo Maya Ortiz, la única persona sentenciada por el caso New's Divine –disco donde a causa de un operativo policíaco el 20 de junio de 2008 murieron 12 personas– fue liberado este 8 de septiembre, a 14 años y dos meses y medio después de ocurridos los sucesos.

Maya Ortiz era el gerente del New's Divine, disco juvenil ubicada en Avenida Eduardo Molina, en la colonia Nueva Atzacoalco, en la Gustavo A. Madero. Apodado El Candy desde joven, es amante de la música High Energy y fue voz oficial del sonido Patrick Miller, donde hizo famoso el slogan “Patrick Miller es el número 1, pésele a quien le pese”.

Ello, precisamente por su voz grave, uniforme, clara y juvenil que transmitía entusiasmo. De ahí nació su sueño por tener su propio espacio para brindar entretenimiento a los amantes el género musical. Lo cumplió el 13 de mayo de 2005, cuando encabezó el Divine, bautizado así en homenaje al artista estadounidense Divine.

De voz en voz, el lugar comenzó a ser conocido, más en una zona que está ubicada en la frontera con el Estado de México y tenía escasas opciones de entretenimiento para los jóvenes.

Los mejores días para ir eran los viernes y según testimonios recogidos en la zona y plasmados en el libro La tragedia del News Divine, horas infaustas, en las tardeadas los jóvenes podían bailar reggaetón y consumir cervezas o micheladas, aun siendo menores de edad.

El lugar generó molestias entre los vecinos, y las autoridades de la entonces delegación Gustavo A. Madero, encabezada por Patricia Ruiz Anchondo, lo clausuraron.

Pero con la llegada de Francisco Chiguil como nuevo delegado en 2006, el lugar volvió a reabrir y por eso el Candy lo rebautizó como News Divine. La siguiente verificación se realizó precisamente el 20 de junio de 2008, día de la tragedia.

Esa tarde, todos recuerdan que después de que llegaron los verificadores y policías al lugar, Maya Ortiz les pidió a los jóvenes desalojar y que para la siguiente semana sería gratis la entrada, sin sospechar la tragedia que se avecinaba.

Así se veía por fuera el New's Divine el día de la tragedia

Debido a que los jóvenes, muchos de ellos menores de edad, fueron subidos en camiones y ya no cabían, los policías comenzaron a impedir su salida del lugar y cerraron la entrada principal que daba a la avenida y la salida de emergencia también estaba cerrada.

Eso provocó un embudo mortal, porque la pista de la disco estaba en el segundo piso y los jóvenes que intentaban salir, se atoraron entre las estrechas escaleras que daban directamente a la salida y la puerta que los policías bloqueaban.

Algunos dicen que fue Maya Ortiz el que desatoró la puerta, con una barreta. Otros dicen que el responsable del operativo, Guillermo Zayas –quien a su vez como coordinador de la Unipol respondía al titular de la entonces secretaría de Seguridad Pública, Joel Ortega, y al jefe de Gobierno de aquella época, Marcelo Ebrard– fue quien ordenó quitar el tapón que dejó 12 muertos y varias personas fallecidas, algunas aún con secuelas.

"El Candy" fue acusado de corrupción de menores por vender bebidas alcohólicas a menores de edad y algunos hasta filtraron que vendía drogas, pero no se encontraron sustancias de ese carácter en el lugar y un amigo suyo, Alejandro Valdés, reconoció que, si bien vender alcohol fue un error, las drogas no eran su estilo, y hasta metía las manos por él al respecto.

Familiares de las víctimas siempre señalaron entre las irregularidades de la investigación que el único sentenciado fuera Maya Ortiz y no policías que participaron, ni el responsable del operativo, Guillermo Zayas. Solo el Candy, cuyo hermano, Juan Carlos Maya luego de ir a verlo al reclusorio y mostrarle los periódicos de los siguientes días de la tragedia, no pudo contener las lágrimas “por mis chavos”.

Este 8 de septiembre ya salió bajo libertad condicional.