TEXCOCO.- Sin equipo, uniformes y carencias en instalaciones y atención médica es como jóvenes promesas del béisbol toman clases y entrenan en el Bachillerato Tecnológico de Educación y Promoción Deportiva (BETED), con sede en Texcoco.
TAMBIÉN LEE: AMLO AUTORIZA RECURSOS PARA CONSTRUIR ESTADIO DE BEISBOL EN NAYARIT
Se trata de un grupo de 70 estudiantes que forman parte de la primera generación del plantel, uno de los 5 creados en el país con la finalidad de desarrollar e impulsar el talento de los peloteros mexicanos.
La iniciativa fue presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador a través de la Secretaría de Educación Pública (SEP) para brindar estudios de bachillerato, hospedaje y becas a los jóvenes deportistas, sin embargo, el proyecto está lejos de esa realidad.
Diferencias entre los docentes, alimentos irregulares en los comedores y hasta falta de agua potable en las instalaciones ha dificultado la profesionalización de los alumnos en el Estado de México, algunos de los cuales planean regresar con sus familias al término del ciclo escolar.
DE COAHUILA AL EDOMEX
Uno de ellos es Ricardo René, de tan solo 15 años de edad, quien viajó más de mil kilómetros desde Monclova, su ciudad natal, hasta el municipio mexiquense de Texcoco para hacer realidad su sueño de llegar a las grandes ligas.
Aficionado a los Acereros de Monclova y con el talento de su abuelo en la sangre, quien jugó en la liga del norte, desde los tres años empezó a practicar su afición, destacó del resto de sus compañeros y hoy es uno de los 30 jóvenes foráneos que cursan sus estudios en el BETED de Texcoco.
“Tiene toda la vida jugando béisbol y el programa le pareció atractivo, él se apuntó, hizo todo y nosotros solamente lo apoyamos, lo llevamos a hacer las pruebas y se quedó, pero yo honestamente no quería algo tan lejos, pero él fue quien me pidió que lo apoyara”, cuenta su padre Ricardo Villarreal.
EL CAMINO A LA DECEPCIÓN
Hace un mes, durante una práctica, su hijo recibió un pelotazo en la cabeza que le cerró el párpado izquierdo por casi una semana. No tenía protección y, debido a que todos los jóvenes entrenaron en el mismo campo, una bola perdida por poco le daña el ojo de manera permanente.
{"quote":"Yo recibo la llamada de que mi hijo había recibido un pelotazo, pero la enfermera en turno me comentó que estaba batallando porque la escuela no quería atenderlo… me dijo que tenía inflamación y el ojo cerrado y que necesitaba atención rápida porque era un golpe en la cabeza"}
“Yo les autoricé sacar a mi hijo del plantel y atenderlo de manera urgente, rompiendo los protocolos que tenían ahí en la escuela y me hicieran el favor de llevarlo a la clínica particular”, contó para la Silla Rota desde Coahuila.
De acuerdo con los padres de Ricardo, los directivos del plantel no contaban con un protocolo de atención en caso de una emergencia, ni un médico certificado que pudiera canalizar al joven a un hospital, por lo que pidieron a los familiares trasladarse desde el norte del país hacia Texcoco, para brindar su autorización presencial.
“Querían mi firma o mi anuencia estando yo a 14 horas de distancia. Yo no podía estar ahí dentro de un día y medio, por la distancia de donde yo vivo, entonces ellos me hicieron el favor de llevarlo”
{"quote":"Como ellos no tomaban rápido las decisiones porque necesitaba atención, yo me trasladé en un camión, viajé toda la noche para llegar hasta el siguiente día y tuve que hacerme cargo de los gastos de la ambulancia y la atención médica porque mi preocupación era que ellos no podían tomar decisiones y no lo atendían"}
PAGAN PADRES GASTOS MÉDICOS
Debido al golpe y la inflamación que tenía a la altura del ojo izquierdo, Ricardo tuvo que ser trasladado al Hospital Futura S.A. de C.V., ubicado en la cabecera municipal de Texcoco, donde pasó la noche hasta su traslado a un hospital del Seguro Social.
{"quote":"En la clínica particular yo corrí con esos gastos. Posteriormente requería más atención, pero el costo era muy elevado –arriba de 90 mil pesos–, por lo que ya en la madrugada pedí que lo trasladan al Seguro Social"}
“Ahí fue donde estuvo toda la noche ya con atención en el área de urgencias y ya como al mediodía me hablaron y me dijeron que el niño ya lo habían dado de alta, que ya lo habían revisado varios especialistas y que ya le ven realizar varios estudios y descartar cualquier problema”
De acuerdo con los padres, el accidente se ocasionó debido a una aparente disputa que mantienen profesores de materias tradicionales con los instructores de béisbol, quienes no acuerdan horarios para las prácticas en campo y las clases en las aulas, lo que provocó la aglomeración de los jóvenes en un solo campo ese día.
“Ellos estaban practicando, les tocó hacer prácticas, pero uno de los problemas es que estaba practicando por problemas de los maestros de materias y de entrenamiento. Amontonaron a los niños en un solo campo y esto propició que fuera más peligroso”
“Tengo entendido que los profesores que dan las materias no estaban de acuerdo con los horarios de los entrenadores y movieron los horarios a conveniencia de los maestros de clase, perjudicando los horarios y la distribución de los entrenamientos”, agregó el padre de Ricardo.
Además de esas irregularidades, los padres de familia aseguran que los alumnos carecen de equipos de protección básicos como cascos, máscaras, pecheras y manoplas, indispensables para el desarrollo seguro de las actividades deportivas en las instalaciones del plantel.
{"quote":"En el caso de mi hijo, tenía la pura cachucha, estaba en el campo, en el área de los fielders y pasó porque él estaba haciendo una actividad y otros muchachos estaban haciendo otra, por accidente lanzan la pelota por donde estaba mi hijo y ahí fue donde lo golpearon"}
Tan solo para esta sede, el gobierno federal invirtió 78 millones de pesos en infraestructura que contempló la creación de aulas, gimnasio, comedor, dos canchas semiprofesionales, una infantil y así como un estadio.
Los alumnos aseguran que en lo que va del ciclo escolar solo les han permitido usar una sola vez el gimnasio, los alimentos son escasos y en los sanitarios de los complejos deportivos no cuentan con agua potable.
“No hay agua caliente en las regaderas, no hay papel, no les están atendiendo las necesidades básicas, además no hay médico ni fisioterapeuta que los atienda. No están entrenando y sencillamente la escuela no está funcionando con las autoridades que pusieron a cargo”, aseguró una de las madres de familia inconforme durante un recorrido que hizo este medio.
PROMESAS INCUMPLIDAS
Durante el arranque del programa, el presidente Andrés Manuel López Obrador prometió que al final de su sexenio en escuelas como la BETED de Texcoco cerca de 60 u 80 alumnos podrían jugar ya en grandes ligas.
Sin embargo, en los primeros 9 meses de operación en esta sede, se han lesionado al menos dos jóvenes, quienes no pudieron ser atendidos de inmediato por la falta de recursos y de personal en el área médica.
Los padres acusan que “también los engancharon” con becas al extranjero, equipo para entrenamientos, uniformes, alimentación, estancia para los foráneos e instalaciones de primer nivel para que tuvieran una preparación física adecuada; pero de esto, muy poco se ha cumplido.
Solo existen 5 sedes de BETED en Hermosillo y Cajeme, Sonora; en Campeche, Campeche; Boca del Río, Veracruz; San Francisco Tetlanohcan, Tlaxcala; Cuauhtémoc, Ciudad de México; y la de Texcoco, en el Estado de México.
Autoridades federales aseguraron que, durante los 3 años que duran la beca y los estudios, los estudiantes serían acreedores a la Beca Universal para Estudiantes de Educación Media Superior “Benito Juárez”, alimentación y la posibilidad de internamiento en los planteles.
Así como el alta en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), equipo, instalaciones óptimas y servicio de médico dentro de la escuela para garantizar la seguridad de los alumnos que se exponen en los entrenamientos y juegos.
ABANDONAN UN SUEÑO
“Lo dice el mismo presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, en los spots: que era convertirlos en atletas de alto rendimiento para que ellos tuvieran la oportunidad de ser vistos para una firma profesional, liga mexicana, liga del Pacífico o Grandes Ligas, y tener una beca universitaria u opciones de una carrera técnica para poder desempeñarse como maestro de educación física”.
{"quote":"Pero ahora que hemos visto a mi hijo –cuando ha regresado– más delgado y cansado, o sea ya no les dan atención igual (...) Él sí se siente muy decepcionado… me ha pedido que el siguiente año no regrese, que nada más quiere terminar este año y ya se mete acá en Monclova a otra preparatoria"}
“Y lo que me ha dicho es que muchos compañeros están en la misma situación, que probablemente ya no regresen para el siguiente año por el siguiente ciclo que es lo que estaba viendo porque el programa ya no es lo que le prometieron desde un inicio y porque ya no tiene una razón de ser estar allá tan lejos de sus casas”.
{"quote":"Yo quisiera que el presidente visitara el plantel y escuchara a los muchachos porque los compañeros de mi hijo y mi hijo tienen gran ilusión por lo que les gusta el béisbol y creo que se sienten una decepción enorme, tal vez con el mismo presidente, al no ser atendidos por todas las problemáticas que tienen"}
rst