CONCIERTO DE BAD BUNNY EN CDMX

"No vuelvo a comprar boletos de esta manera, pero tampoco en Ticketmaster"

Danya y sus amigas usaron todos sus ahorros para rentar un palco del Estadio Azteca para el concierto de Bad Bunny, pero tras pagar 50 mil pesos se dieron cuenta que fueron víctimas de una estafa

Créditos: Especial
Escrito en METRÓPOLI el

Danya Bernabé no es "fan" de Bad Bunny, pero se contagió de la euforia colectiva que causó el anuncio de sus conciertos en el Estadio Azteca. Con otras personas reunió 50 mil pesos que depositó como anticipo para rentar un palco y ver a la superestrella.

El monto total que les pidieron era de 100 mil pesos; sin embargo, finalmente no alcanzaron a cubrir todo el pago, porque acordaron que la otra mitad sería a contra entrega de los pases para ingresar . En realidad se trató de una estafa en la que cayeron a través de defraudadores que operan en redes sociales.

La joven es asistente de personal en una empresa privada y ahorró un mes para aportar los 10 mil pesos que le tocaban por el supuesto espacio que le ofrecieron en el coloso de Santa Úrsula. Danya, como cientos de personas, se quedó sin ver el concierto y sin dinero.

Narró su experiencia y señaló que al no encontrar boletos en Ticketmaster, una amiga, ella  y otras personas decidieron buscar entradas por otras vías. Entonces, su amiga contactó en Facebook  a una persona que se identificaba en su perfil como Sandy Sandy.

De alguna manera, esta mujer logró convencerla de que tenía entradas para 10 personas en un palco del Estadio Azteca, que ofreció  “rentarle” a cambio de 100 mil pesos, con estacionamiento incluído en la Zona D, Puerta 1.

Le envió fotos del palco, así como de las tarjetas de acceso, además de la captura de pantalla de una tarjeta con número de cuenta a nombre de Sandra Esparza, a fin que le hicieran un primer depósito de 50 mil pesos, para “amarrar el trato”.

Pero a unas horas del concierto de Bad Bunny, esta persona ya no les contestó el teléfono celular y las bloqueó en redes sociales, por lo que “desapareció” con los 50 mil pesos que le entregaron como anticipo.

“Todavía el sábado, el día del concierto, nos llamó la chava para decirnos que teníamos que liquidar para que nos entregara las tarjetas, pero como habíamos visto todo lo que pasó el viernes, le decíamos que liquidamos a contra entrega, nos dijo que sí, íbamos camino al estadio, le llamamos, le llamamos, y pues ya nunca contestó. Nos bloqueó y  apagó el teléfono”, indicó. 

“La convivencia con mis amigas me motivó a ir al concierto,  y no es como que Bad Bunny sea mi artista favorito, ni como que me fuera a morir por no verlo, tampoco, pero sí me gusta, me gustan sus canciones, me gusta bailarlas, y dije es un concierto, quién sabe cuando vaya a venir y pues en un mes me dije este dinero para allá”, señaló. 

Aunque el fraude del que fue víctima no se cometió a través de Ticketmaster, sino en Facebook, comentó que no piensa presentar una denuncia en la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Ciudad de México, ni en la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).

El motivo es que no tiene confianza en las autoridades, y considera que denunciar significa “horas perdidas”, sin la certeza de que en su caso haya justicia.

“Vamos a esperar, porque tarde o temprano esa persona (la defraudadora) va a volver a aparecer y va a querer hacer lo mismo, ya la publicamos en redes sociales, tal vez podemos estar pendientes de ello (para denunciar ante autoridades), eso sí, no vuelvo a comprar boletos de esa manera, pero tampoco en Ticketmaster”, enfatizó. 

MRV