CASO ABNER, COLEGIO WILLIAMS

"Era una emergencia, es inaudito que esperaran tanto la ambulancia"; exigen justicia para Abner

Padres de familia atribuyen la muerte del menor a la falta de vigilancia y de entrenadores en la alberca, así como a la tardanza para trasladarlo a un hospital

Padres exigen justicia
Abner murió ahogado en el colegio Williams.Padres exigen justiciaCréditos: Especial
Escrito en METRÓPOLI el

Abner, de 6 años de edad, murió en circunstancias no aclaradas hasta el momento, luego de desvanecerse el lunes durante su clase de natación en el Colegio Williams, donde una entrenadora lo sacó para trasladarlo a la enfermería de la escuela, en Mixcoac.

Ahí permaneció probablemente unos 50 minutos, sin que lo atendiera un médico especialista, a la espera de una ambulancia que lo llevara al hospital, en el que finalmente fue declarado muerto.

A tres minutos de uno de los accesos del Colegio Williams, ubicado sobre San Jerónimo, se encuentra un hospital, sobre Luis Cabrera y Presa Reventada, aunque directivos del plantel no optaron por llevarlo de urgencia a ese lugar, según se desprende de informes preliminares.

Las versiones de los responsables del plantel y de los familiares del niño contrastan: los primeros dijeron que la causa del deceso pudo ser una enfermedad del corazón de Abner, mientras que sus familiares aseguran que la muerte devino de una negligencia dentro de la escuela y de la falta de atención clínica inmediata.

Ante la falta de respuesta de la Fiscalía General de Justicia (FGJ) de Ciudad de México, sobre lo que realmente ocurrió con el chico, padres de familia, envueltos en dolor e indignación, protestaron la mañana de este martes e ingresaron por la fuerza al centro educativo, donde grafitearon la palabra “asesinos”, incluso en la fachada del inmueble.

Exigieron justicia y responsabilizaron a directivos del Colegio Williams de la muerte del alumno; hubo connatos de pelea y la irrupción causó temor entre estudiantes, particularmente los de nivel primaria, quienes fueron resguardados por profesores en el interior de los salones de clase.

Afuera del plantel, sobre la calle Empresa, se detonaron algunos cohetes, antes de que personas dieran “portazo” en la escuela, pues atribuyen la muerte del menor a la falta de vigilancia y de entrenadores en la alberca, así como a la tardanza para trasladarlo a un hospital.

“Se trataba de una emergencia, de la vida de un pequeño, si como dicen los directivos, no murió ahogado en la alberca, al menos debieron haberlo llevado a la clínica, es inaudito que hayan esperado tantos minutos a una ambulancia”, comentó la señora Paola, madre de un estudiante.

Juan y Marlen, padres de Abner, exigieron a la fiscal Ernestina Godoy que se investigue a fondo la probable responsabilidad de autoridades del Colegio Williams en este caso.

La mañana del lunes, dejaron a su hijo en la escuela; fue la última vez que vieron con vida al pequeño.

Después de las 9:00 horas recibieron una llamada de personal del Colegio Williams que les avisó que su hijo tuvo un “incidente” en la alberca y lo trasladaron a un hospital, donde médicos certificaron que murió ahogado, es decir por asfixia por sumersión.

Debido a que el centro escolar no ha asumido responsabilidad alguna por estos hechos, realizaron una manifestación y entraron hasta la dirección para pedir justicia.

Juan Leonardo Álvarez, papá de Abner, afirmó que su hijo nadaba perfectamente, ya que aprehendió a hacerlo desde hace mucho tiempo.

“Y aquí resulta que él iba nadando, se desmayó y se hundió, se aventó una profesora porque no había nadie de los ocho profesores que dicen que había, y ella lo sacó”, agregó.

Sostuvo que también está la posibilidad de que otro niño pudo estar implicado en esta tragedia, pero no abundó más.

Familiares de Abner admitieron que el niño tenía un padecimiento congénito, un bloqueo de tercer grado coronario, pero que esto no le impedía nadar y nunca le provocó problemas.

La fiscalía capitalina, por su parte, abrió una carpeta de investigación por el delito de homicidio culposo por otras causas.

Juan Williams, director del Colegio Williams, manifestó que el menor de edad fue sacado de la alberca por una profesora y que las autoridades del plantel actuaron con base en los protocolos establecidos.

“Lo único que puedo decir es que en el momento que sale el niño se avisa como dicta el protocolo al servicio médico del colegio, y de inmediato baja y tanto la enfermera como la doctora se hacen caro de la situación en ese momento.

“Hicimos todo lo posible, intentamos cumplir todos los protocolos, se habló a diferentes ambulancias y la primera que llegó fue la del ERUM y atendió al niño y en ese momento lo trasladaron al hospital”.

El papá de Abner indicó que la ambulancia tardó mucho tiempo en llegar, ya que la escuela carecer de paramédicos y de un servicio de traslado.

“Nos dicen que estaba delicado, que a qué hospital lo trasladaban, dijimos al nacional, nos comentaron que estaban esperando una ambulancia, que les diéramos el número de su doctor para poderlo contactar y que los pudiera auxiliar por videollamada.

“Total que a las 10:10 horas llegó la ambulancia y a las 10:16 ingresó al hospital que estaba a tres minutos de la escuela”, explicó.

Por lo pronto, no hay clases de natación en el Colegio Williams de Mixcoac, debido a que la alberca fue cerrada como parte de la investigación de la fiscalía.

Entrevistados por separado, niños de cuarto, quinto y sexto grado comentaron que las clases de natación eran impartidas por varios entrenadores, que nunca los dejaron solos.

Indicaron que estaban organizados en grupos con base en su nivel, desde principiantes hasta avanzados, siempre bajo vigilancia.

Comentaron que muchos se asustaron por los connatos de violencia registrados este martes, y comenzaron a llorar, pero nunca fueron objeto de ningún tipo de agresión. “Estaban enojados con la gente de la dirección, las misses, los profes”, señalaron.

Madres de familia. Quienes pidieron anonimato, lamentaron la muerte de Abner y se unieron a las voces que exigen el esclarecimiento de las circunstancias que rodearon el deceso para deslindar responsabilidades.

“Es lamentable y entiendo perfectamente el dolor de los padres, y yo me uno a su pesar, pero creo que lo que no estuvo bien es que vinieran a vandalizar la escuela sin antes tener el veredicto de las autoridades, no me consta, lo que comentan es que el niño ya tenía afectación previa del corazón, ya tenía una situación delicada, lamentablemente sucedió en la escuela y los docentes tienen que responder por ello.

“Pero sí no estuvo bien que vinieran a asustar a toda la comunidad, sobre todo los mas chicos que estuvieron llorando durante la mañana, las formas no son a través de la violencia, los niños no entienden lo que sucede y se van a dejar llevar por las primeras noticias que vean falsas en las redes, lanzaron cohetes aquí afuera, fue una situación de violencia innecesaria para los niños, no tenían que hacerlos partícipes de esta situación, sin saber la razón verdadera del fallecimiento”, puntualizó una de las madres que recogió a su hijo en el Colegio Williams antes de que terminaran las clases.

Afuera de plantel había una discreta presencia de cuatro policías del área de Seguridad Escolar de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).

Una oficial comentó que las protestas ocurrieron dentro del colegio y que se raizaron algunas pintas en la fachada, sin que se registraran incidentes mayores.

Sobre Avenida Revolución, en otrode los accesos al plantel, estaba la patrulla MX-664-C1 de la SSC, con sus tripulantes atentos a que no ocurrieran hechos de violencia, en tanto que decenas de padres y madres fueron por sus hijos antes de que concluyera el horario de clases, sin saber si éstas continuarán o no esta semana.

La FGJ está a la espera del resultado de la necropsia que se realizó al chico para determinar cómo ocurrió la tragedia. Abner, fue velado en una funeraria de la calle Doctor Jiménez, colonia Doctores, alcaldía Cuauhtémoc, mientras que familiares y amigos esperan justicia.

VGB