VIOLENCIA DE GÉNERO

Alumna de UAM-X desaparece por 7 horas; aparece con fractura de cráneo y sin recordar nada

La Fiscalía capitalina, el Metro, Policía local y la propia UAM-Xochimilco se han comprometido a dar seguimiento al caso

El caso de la posible agresión que sufrió Ameyalli se enmarca en las muertes por presunto feminicidio de Ariadna y Lidia
La familia solicitó a la Fiscalía capitalina y a la jefa de Gobierno, Claudia Sheimbaun, investigar lo ocurrido.El caso de la posible agresión que sufrió Ameyalli se enmarca en las muertes por presunto feminicidio de Ariadna y LidiaCréditos: ESPECIAL
Escrito en METRÓPOLI el

Otro caso de violencia de género se presentó en la Ciudad de México el pasado jueves 3 de noviembre, cuando la alumna de la UAM- Xochimilco Ameyalli Arias desapareció por alrededor de 7 horas y al aparecer presento señales de violencia física: diversos golpes, un trauma craneoencefálico y una fractura craneal y sin recordar nada de lo que le pasó.

Al percatarse del estado de salud de Ameyalli, su familia solicitó a la Fiscalía capitalina y a la Jefa de Gobierno, Claudia Sheimbaun, investigar lo ocurrido ya que la vida de su familiar estuvo en peligro.

La historia fue compartida en Twitter por su hermana Fernanda mediante un hilo en dicha red social y estuvo acompañada de algunas fotografías en los que se denuncia la negativa de policías capitalinos a investigar, con el argumento de que la familia tenía que esperar 72 horas para poder iniciar una investigación.

Según la hermana de Ameyalli, esta última salió de la UAM-Xochimilco a las 5 de la tarde al terminar sus clases del día; se dirigía hacia su hogar e iba a bordo del trasporte público con dirección a Metro General Anaya; sin embargo, a decir de los familiares, a partir de ese momento perdieron todo contacto con la victima

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Asimismo, señala que el  teléfono celular  de Ameyalli estaba apagado y les fue imposible comunicarse con ella entre las 5 de la tarde y las 12 de la noche, fue entonces cuando decidieron solicitar apoyo a elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SCC), sin embargo estos dijeron que tenía que esperar un paso de 72h horas para poder levantar el acta de desaparición.

Sin poder hacer nada la familia tuvo que pasar algunas horas con la angustia de no saber la ubicación de Ameyalli, fue así cerca de la medianoche, narran los cercanos a la victima, que esta ultima llegó a casa sola pero totalmente desorientada y con la ropa ensangrentada; al preguntarle que había sucedida la fémina dijo que solamente recuerda haber cobrado conciencia en el Metro Cuatro Caminos y sin saber como llegó hasta esa estación del  Sistema de Transporte Colectivo (STC-Metro).

Asimismo, Fernanda (hermana de la afectada) declaró que antes de que su hermana apareciera le  solicitaron al STC-Metro que les diera  acceso a las cámaras de seguridad pero su petición fue rechazada.

“Al día de hoy mi familia está desconectada, mi hermana no recuerda que le ocurrió, le estamos practicando todos los estudios correspondientes, y actualmente la ingresamos a traumatología por lesiones en el cráneo y hemorragias internas. Les pido a todos su apoyo… Apoyo para que las autoridades correspondientes nos ayuden a brindarnos las cámaras y se agarre al o los culpables de todo esto, ya que estamos desesperados por la salud de mi hermana y porque se haga justicia. Mi hermana se encuentra indispuesta para ir a declarar….”, concluyen sus mensajes.

Si bien gracias a la presión de las redes sociales cuando el caso se volvió viral que tanto la Fiscalía capitalina, autoridades del Metro, Policía auxiliar y la propia UAM-Xochimilco se han comprometido a dar seguimiento al caso,

Por otra parte la familia de la victima declaró que cuando presentaron la denuncia formal, el responsable del Ministerio Público obligó a la familia a escribir la frase “ausencia voluntaria” a pesar de que el hecho no había sido así.

Cabe mencionar que el caso de las agresiones que sufrió Ameyalli se enmarca en el oscuro panorama de muertes por presunto feminicidio de Ariadna y Lidia, la primera de ellas tras acudir a una fiesta y la segunda, al intentar escapar de un taxista que cambió la ruta y se negó a dejarla descender.

AJA