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“No se lo hicieron a ella, nos lo hicieron a todos”,claman justicia por Alin

La familia de la mujer trans pide a la Fiscalía del Edomex apresure las investigaciones y que se capture al responsable del homicidio

Escrito en METRÓPOLI el

TOLUCA.-El día que fue asesinada Alin, mujer trans originaria del municipio mexiquensese de Mexicaltzingo, su familia la esperaba para almorzar, como todos los días. En lugar de un día como cualquiera, encontraron su cuerpo envuelto en una cobija dentro de su departamento. “No se lo hicieron a ella, nos lo hicieron a todos”, reclamaron sus seres queridos al tiempo en que lamentaron que las investigaciones del caso no avanzan.

Para compañeras activistas de Alin así como para su familia, su homicidio debe ser precedente para que se dé a lugar a la no repetición, a que los crímenes de odio paren en el Estado de México.

“No es fácil, cuando es un enfermo lo vas asimilando pero, cuando es una persona sana con ganas de vivir… Es algo que no entiendes, no alcanzas a comprender”, comentó Ricardo Sánchez, hermano de Alin, al señalar que, para que terminen los crímenes de odio, las autoridades deben emprender proyectos en los que la visibilización de la comunidad LGBTTTI sea fundamental, pues desde las familias se viven turbulencias para la aceptación.

A dos días de que Alin fuera enterrada en el panteón municipal de Mexicaltzingo, su familia toma hoy la bandera trans más fuerte que nunca, hoy el clamor por justicia para su hermana, para su hija, se ha convertido en la lucha, en sus ganas de que la discriminación termine.

“Alin era siempre una persona que decía, su frase clásica: A lo grande. Alin o Juanito, como le quieran decir, siempre anduvo movido, la gente se unió en lágrimas en sufrimiento porque él sembró amor, los hechos marcan más que las palabras, dedicó su vida a ayudar a quien lo necesitara, nunca se negó, nos decía que iba a hacer algo grande y hoy lo está cumpliendo con su asesinato, desde su sepelio hasta la lucha contra la impunidad, que valga la pena su muerte, que salga algo bueno para la comunidad, porque el día de hoy te burlas de una persona que tiene un hijo gay, no lo comprendes, pero mañana que tengas el tuyo ¿qué vas a hacer? ¿También le vas a pegar? ¿También lo vas a humillar? ¿También lo van a matar? No se vale”.

LA LUCHA POR ALIN, APENAS COMIENZA

El hermano de Alin exigió a la Fiscalía General de Justicia del Estado de México a que apresure las investigaciones y que capturen al responsable del homicidio, pues reconoció, no han tenido acercamientos con las autoridades.

“Ahorita la Fiscalía no se ha acercado, queremos que se haga justicia, quiero que mi voz sea escuchada, que no quede impune, que no sea un carpetazo más como toda la vida; únicamente la Fiscalía fue a sacar una copia del disco (de las cámaras de videovigilancia) del negocio de a lado, ahorita no han checado las cámaras del C5 ni del C2, queremos que vaya la ley, no queremos entorpecer las investigaciones pero tampoco que lo dejen al tiempo”.

Ricardo, hermano de Alin

NO HABÍA AMENAZAS CONTRA LA ACTIVISTA TRANS

Ricardo, hermano de la víctima, recordó que desde hace dos años andaba con muletas ya que había perdido un pie a causa de la diabetes, dejó el alcohol y se había reinsertado en la sociedad como “una persona buena”, por lo que no comprenden el motivo de su asesinato.

“Además de tener su negocio donde vendía micheladas, se dedicó a ayudar, incluso se dedicó a arreglar matrimonios, a arropar a las personas de la comunidad LGBTTTIQ+; a través de su dolor, de su sufrimiento, ayudó a muchos alcohólicos y drogadictos para que salieran adelante. Lo que menos quería era pelear con la gente porque quería que mi hija, que era como su hija, viviera lejos de eso. Se descarta que haya sido un conocido, no sospechamos de nadie pero tememos por nuestra integridad”.

Alin fue encontrada sin vida en su departamento de la colonia La Estación del municipio de Mexicaltzingo con una herida en el cuello, horas antes de que se aprobara la Ley de Identidad de Género en el Estado de México, proyecto por el que luchó los últimos diez años de su vida.


(SAB)