La calle Manuel de la Peña y Peña se ha convertido en un escenario y frontera de la rivalidad entre las organizaciones criminales: Unión Tepito y su rival Fuerza Anti Unión, que además ha sido utilizada para que ambas organizaciones realicen ejecuciones entre integrantes rivales en su lucha por quedarse como líderes de narcomenudeo de la Ciudad de México, principalmente del Centro Histórico.
Esta calle forma parte de las nueve manzanas que ahora son un lugar de botín de la delincuencia organizada donde las víctimas son los vecinos y vendedores, como a inicios de este mes dijo a La Silla Rota un vocero de los comerciantes establecidos.
En entrevista, refirió que con la llegada del ambulantaje en 2014, el norponiente del Centro Histórico pasó del comercio formal junto con el ambulantaje a sufrir extorsión, secuestros, agresiones, tortura, violaciones y homicidios.
Es así que la calle Manuel de la Peña y Peña, ubicada en la colonia Morelos, es utilizada para que ambas organizaciones realicen ejecuciones de cuerpos de integrantes rivales, en su lucha por quedarse con el mercado de narcomenudeo de la zona, como sostuvo el columnista Héctor de Mauleón en su texto de este lunes.
Distintas notas periodísticas de balaceras ocurridas en la zona, y testimonios de personas que viven por ahí refuerzan por separado la teoría de De Mauleón. También varios reportajes de La Silla Rota dan cuenta del poderío de ambos grupos criminales.
ASÍ SE RECONFIGURA EL CRIMEN ORGANIZADO EN TEPITO
Es la misma zona donde comerciantes establecidos se han quejado de que ha aumentado la extorsión y las amenazas. Incluso, funcionarios de la delegación Cuauhtémoc han recibido intimidaciones en su intento de buscar contener el aumento de puestos de ambulantes, afirmó el 31 de agosto el jefe delegacional de esa demarcación, Rodolfo González, de acuerdo con una nota de Reforma.
“Los nuevos puestos los están poniendo grupos que dicen pertenecer a La Unión Tepito, afirman que ahora van a ser ellos quienes van a manejar esas calles. Nosotros como primera autoridad nos presentamos y les pedimos que se levanten, pero han amenazado a nuestra gente”, le dijo el jefe delegacional al diario.
EJECUCIONES TEPITEÑAS
Héctor de Mauleón retomó el homicidio contra dos personas ocurrido este lunes en la calle Manuel de la Peña y Peña, con el cruce de Manuel Doblado. Los cuerpos estaban tendidos sobre el arroyo vehicular de la calle, cercana a la estación Morelos de la Línea B del Metro.
Recordó que la misma calle en su cruce con Vidal Alcocer fue escenario, el 25 de agosto, de otra balacera cuyo saldo dejó dos hombres muertos y una mujer herida. Según información difundida en medios de comunicación, la agresión ocurrió después de que los hombres discutieron con otros tres hombres, quienes sacaron un arma de entre sus ropas y les dispararon.
La mujer no iba con los hombres atacados, pero fue herida por un balazo que se le fue sin querer a un agresor, relató un testigo citado por prensa de nota roja. De acuerdo con dicho testimonio, los atacantes huyeron por las azoteas de las construcciones aledañas.
Una semana antes, el 18 de agosto, sobre la misma Manuel de la Peña y Peña, (a la altura de Ferrocarril de Cintura), un sujeto disparó sobre un grupo de hombres que matinalmente consumía unas cervezas. La agresión dejó dos personas muertas y tres heridas.
De acuerdo con De Mauleón, ese día las cámaras de seguridad siguieron al hombre, que huyó hacia una vecindad ubicada en la calle Héroes de Nacozari, y hasta ahí llegaron las autoridades, quienes descubrieron que en donde se refugió el agresor había armas, básculas y fajos ordenados de billetes.
A su vez encontraron una libreta, que además de registrar gastos domésticos de la casa incluía datos sobre sobornos a la Policía.
Según portales informativos, aquel día el secretario de Seguridad Pública capitalino, Raymundo Collins, dijo que como resultado del seguimiento por las cámaras se detuvo a cinco personas, y que el lugar era un puesto de drogas. En el lugar se encontraron 30 envoltorios con polvo blanco y 500 bolsas con hierba, dos pistolas, dos subametralladoras, un rifle y dinero en efectivo.
ZONA CONFLICTIVA
La calle de Manuel de la Peña y Peña se encuentra en una zona donde hay reportes de aumento de extorsiones y secuestros contra dueños de negocios. El diario La Razón reportó el 30 de agosto que en esa calle, como República de Costa Rica, Nacional y Berriozábal, los comerciantes pagan entre 5 mil y hasta 50 mil pesos como parte de la extorsión a la que son obligados para poder mantener sus locales abiertos.
Un testimonio recogido por el diario indicó que los que cobran llegan en motoneta y se presentan como de la Unión, Fuerza Anti Unión o hasta de un grupo llamado La Esperanza –pero dicho testimonio dijo que son los mismos-, y aunque han denunciado, las autoridades no han hecho nada.
También se corrió la voz que los asesinatos del 25 de agosto sobre Manuel de la Peña y Peña significaba que un nuevo grupo se haría cargo del cobro de piso en la zona, luego de un mensaje de WhatsApp que se difundió por personas desconocidas que se atribuían la ejecución, y expresaba que eso le iba a pasar a quienes “anden robando, extorsionando y secuestrando en la zona centro. Ya nos tienen hasta la puta madre de que hagan lo que quieran y nadie les ponga un alto”.
El propio jefe de Gobierno local, José Ramón Amieva, ha dicho que la irrupción de estos grupos debía leerse como una reorganización de los grupos criminales de la zona.
El 25 de mayo se reportó que dos hombres ingresaron a un domicilio ubicado en Manuel de la Peña y Peña le dispararon a un sujeto y huyeron a bordo de una motoneta.
Otro antecedente de la violencia en la calle ocurrió el 17 de enero de este año, cuando de acuerdo con información de El Universal, un comerciante fue asesinado por un hombre que llegó en motoneta, en la esquina de Torres Quintero y Manuel de la Peña y Peña.
ams