El ahora expresidente de España Mariano Rajoy, quien fue removido del poder por una moción de censura encabezada por el socialista Pedro Sánchez, se despide también del Partido Popular dejando una cicatriz en la situación sociopolítica española.
Durante su gobierno al frente del ejecutivo español, Rajoy enfrentó un movimiento separatista, una crisis económica y se coronó con un escándalo de sobornos que culminaron en su dimisión.
MOVIMIENTO SEPARATISTA
Al tiempo que lidiaba con una crisis económica, Rajoy tuvo que encarar una problemática que llegaba desde Cataluña, un movimiento separatista encabezado por Carles Puigdemont.
En 2017, el entonces presidente del gobierno regional de Cataluña presentó un referéndum en donde anunciaba su separación de España.
Con la propuesta de separación de Cataluña, la policía española allanó las oficinas centrales de la Generalitat, el gobierno regional en Barcelona, y arrestó a 14 personas.
La repuesta del gobierno español desató una ola de protesta que fueron reprimidas con violencia por parte de la policía española.
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Mientras, los líderes catalanes, entre ellos Puigdemont, denunciaban a Rajoy de adentrar a España de vuelta a los días de del fascismo español encabezados por Franco.
Además, fue señalado por la falta de liderazgo para lidiar con Cataluña, debido a que perdió oportunidades de negociación con los catalanes.
CRISIS ECONÓMICA
En su último discurso, Mariano Rajoy declaró que dejaba una España mejor que la que había encontrado, sin embargo, la historia lo contradice.
Cuando asumió el cargo en 2001, Rajoy tuvo como tarea principal lidiar con la crisis económica que no solo había en España, sino en toda Europa.
Se encontró con una deuda pública del 69 por ciento del PIB, cifra que se elevó al 87 por ciento durante su primer año de gestión.
Para 2014, la deuda llegó a su máximo con un endeudamiento del 100 por ciento, y fue la deuda llegó a siete cifras, por encima del billón de euros.
Los años venideros para la presidencia de Rajoy tuvieron un descenso en extremo paulatino, pero básicamente se quedó atascado en el 100 por ciento.
Sin embargo, en 2017, España volvió a ser el país con más déficit público.
El lado luminoso del gobierno de Rajoy se reflejas en la tasa de empleos, pues España pasó de tener casi 16 millones de asalariados en 2012 a más de 17 millones en 2016.
En contraste con la cifras de empleos, el año pasado cayó por primera vez el salario y los empleos con contratos precarios.
CASO GÜRTEL
La corrupción fue otra situación que desquebrajó al gobierno de Rajoy, con escándalos de sobornos y financiamiento ilegal del Partido Popular en la llamada trama Gürtel.
Esta trama, que comenzó en 1995 con Francisco Correa, señala a diversas empresas que se hicieron de concesiones públicas sobornando al gobierno español.
La justicia española señaló al Partido Popular, donde hasta hoy era miembro Rajoy, de recibir dinero a cambio de entregar contratos y de usar los recursos ilícitos para financiar campañas y otros actos del partido.
A su vez, Rajoy se empeñó en exponer que se trataba de casos aislados, sin embargo, la trama Gürtel llevó al socialista Pedro Sánchez a promover una moción de censura para removerlo del cargo y suplantarlo.
Con información de Crónica y El Confidencial
cbl