Marco Antonio Sánchez Flores, el joven de 17 años que desapareció el 23 de enero durante 5 días, luego de ser detenido por el Metro Rosario por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública, ya está en un 70 por ciento recuperado, a dos meses de que fue ingresado al Instituto de Neurología. Así lo dijo Marco Antonio Sánchez Chávez, padre del adolescente.
“Ha ido mejorando, le presto el celular y lo agarra y se pone a cantar canciones de los jóvenes de mi tiempo y a todos les dice `hermosa, bella` y así, les habla muy bien”, expresó en entrevista.
Incluso su hijo ya aumentó de peso, pues llegó con 55 kilogramos y ahora pesa 80 y luce una barriga. Sin embargo, aún tiene episodios de doble personalidad, y cuando le ocurren dice que él es adinerado e incluso sobrino de Carlos Slim, añadió su padre.
“Oye, házmela buena”, compartió que le responde de buen humor.
LEE TAMBIÉN: Claves de la desaparición de Marco Antonio Sánchez Flores
“Luego estamos platicando y cambia. Platica que tiene recursos, que tiene dinero, '¿de dónde?', le digo. Ya es menos, antes estaba muy mal, gritaba. No usaba ropa interior, dejaba las cosas por donde fuera, ahora ya las guarda. Pidió unos libros, mi hija se los llevó, se los empezó a leer, está contento por los libros, ya está más concentrado”, dijo.
Recordó que en los primeros días de estar internado, Marco Antonio estaba enojado con él y su esposa Edith Flores Rojas, porque los responsabilizaba de tenerlo encerrado, pero ahora ya cuando los ve los besa, convive con otros pacientes internados, y hasta postea cosas por la red social Instagram.
Los papás del estudiante de la Prepa 8 también estaban enojados, pero con los elementos de la SSP que detuvieron a su hijo, y luego con autoridades del gobierno capitalino, ya que creían que habría un trato especial para su hijo, luego de estar cinco días desaparecido.
“Nos sentimos abandonados, enojados, porque decían una cosa, nosotros otra, les contestábamos y les echábamos abajo lo que decían, su verdad histórica”, expresó.
Aparte de la detención sin cumplir los protocolos de custodia para un adolescente, y que algunos expertos consideran como desaparición forzada -ya que luego de liberarlo el estudiante estuvo cinco días desaparecido- al encontrar al joven, este presentaba trastornos mentales.
Los padres también se quejaron de maltrato en el Instituto de Neurología, y presentaron una solicitud de medidas cautelares ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que accedió a pedirlas al Estado mexicano el 2 de abril pasado.
Además, pidieron que la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) ya no los acompañara en el caso, y a cambio lo hiciera la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH). Sánchez Chávez afirmó que no estaban nada conformes con la forma en que los acompañó la CDHDF.
A más de dos meses de que su hijo fue detenido por policías y les cambió la vida, el papá de Marco dijo que él conducía de día un taxi para sostener a su familia, ahora debe hacerlo de noche porque en el día ve a su hijo.
Su esposa también tiene un trabajo, pero pidió un permiso también para atender a Marco Antonio.
Pero se mostró confiado en que su hijo se recuperará e incluso adelantó que podría salir en unas cuatro o seis semanas.
“Yo digo que su juventud y fortaleza lo van sacar adelante”, concluyó.
fmma