Main logo

Ellos son los otros Kumamoto que quieren cambiar el país

Son universitarios, jóvenes recién graduados o profesionistas que tienen un historial en el apoyo a luchas sociales y con ONG’s alejados de los partidos políticos

Escrito en ESPECIALES LSR el

En 2015, Pedro Kumamoto fue el primer diputado independiente electo en México. Ahora, su figura surge como un fenómeno que se ha extendido por todo el país: cientos de jóvenes, como él buscan abrirse lugar en la política mexicana.

Se trata de universitarios, jóvenes recién graduados o profesionistas que tienen un historial en el apoyo a las luchas sociales y con organizaciones no gubernamentales, alejados completamente de todos los partidos políticos.

Sin embargo, ellos buscan que más ciudadanos tengan participación en la toma de decisiones. No derrochar dinero público y escuchar las voces olvidadas.

Pedro Kumamoto resultó electo en el proceso de 2015 como diputado del distrito 10 con sede en Zapopan, Jalisco. Su campaña destacó por ser un joven de 25 años que usó las redes sociales para promocionar sus propuestas y gastar sólo 18 mil 500 pesos.

Ahora, el joven de 28 años busca un escaño en el Senado de la República, pero esta vez no está solo. Lo respalda todo un movimiento juvenil en distintos puntos del país que trabajan en el proyecto y que también se han postulado a diferentes cargos.

La Silla Rota entrevistó a candidatos independientes de Yucatán, Morelos y Nuevo León. Una diseñadora gráfica, un ingeniero industrial y un estudiante de doctorado en Desarrollo Científico y Tecnológico.

Algunos forman parte de la organización Wikipolítica, con Pedro Kumamoto en la plataforma “Vamos a Reemplazarles”, en donde participan 16 candidatos independientes en todo el país; y otros han abierto su propio camino.

Los otros Kumamoto pelearán el próximo 1º de julio por diputaciones locales, federales, senadurías y alcaldías. Quieren despertar a los ciudadanos.

“Las luchas se dan donde es necesario, no donde es fácil”: Carlos Brito

Con 30 años de edad, Carlos Brito Ocampo, estudiante del Doctorado en Desarrollo Científico y Tecnológico y aspirante a competir por la vía independiente por la Alcaldía de Jojutla, Morelos, se define como un optimista práctico que cree en las transformaciones.

“Me puedo definir como una persona optimista, en el buen sentido, no un optimista ingenuo, un optimista en términos de que yo sí creo que las transformaciones sociales, políticas, no ocurren si no te las imaginas, entonces necesitas ser optimista para eso, decir que sí se pueden cambiar las cosas.

“No es un optimista ingenuo, sino un optimista práctico en el sentido de qué haces tú, generas los caminos para poder obtener eso que quieres, no solamente esperas a que las cosas pasen bien”, dijo en entrevista.

Estudiante, maestro de la UNAM, activista y defensor de derechos humanos, Brito sabe que el reto de gobernar Jojutla, uno de los municipios más violentos de Morelos y el más afectado por el terremoto del 19 de septiembre no será fácil.

“Sabemos el tamaño del reto, no es que no lo sepamos, en materia de justicia nada más el año pasado estuvimos hablando de las fosas, las tres fosas de decenas de cadáveres exhumados ahí y son autoridades las que han estado involucradas, sí, son autoridades a las que hay que hacer rendir cuentas.

“Sabemos el tamaño del reto, pero somos gente que cuando ve el tamaño del reto, mientras más grande, pues más ganas nos da de darle montón, no somos salvadores ni mucho menos, pero sí somos gente que no huye, sino que vemos que las luchas se dan donde es necesario, no donde es fácil, y aquí es más que necesario”, dijo.

Brito tiene claros los dos principales retos que enfrenta Jojutla: la reconstrucción de cientos de viviendas de las familias afectadas por el sismo y la recuperación de la seguridad pública.

“El tema de violencia, el tema de inseguridad, el tema del involucramiento del crimen organizado en las instituciones son cosas que hay que atacar de manera distinta a como se ha venido haciendo; el modelo de seguridad que se ha implantado y el modelo de procuración de justicia, son una política fracasada de décadas, no son de construcción de paz, ni reconstrucción del tejido social, sino lo contrario y creo que quienes vivimos en Morelos hemos pagado las consecuencias de esa política de seguridad, en varios eventos que lejos de calmar y darnos perspectivas de tranquilidad, pues lo que ha hecho es incendiar la pradera y es un tema que desde luego tenemos que involucrarnos.

“Yo creo que desde la Presidencia municipal también se pueden hacer muchas cosas en materia de policías, en materia de prevención de la violencia, en materia de rescate de jóvenes, en materia de rescate de combate a la desigualdad, en materia del ejercicio de derechos de las personas, lo que le toca fundamentalmente a los municipios es prevención, fundamental en Morelos bajo el contexto de Mando Único, pero también podemos tomar acciones en cuanto a mejorar las condiciones de quienes están o inician la cadena de procuración de justicia, en eso sí hay obligaciones por parte el municipio y es un tema estrictamente de voluntad política”, dijo.

Y es que el tema de la inseguridad y la violencia es uno de los que más preocupa a los habitantes de la zona sur de Morelos, principalmente a los de Jojutla, pues tan solo el año pasado este municipio ocupó las tasas más altas en la comisión de delitos de secuestro y violación.

Incluso Brito narra cómo el secuestro de su hermana lo llevó a involucrarse más fuerte en el tema de derechos humanos.

“Yo fui víctima de la violencia de manera directa, a mi hermana la secuestraron, toda la gente de la planilla, a pesar de que tenemos 28 años en promedio, todos hemos sido víctimas directas de la violencia, hay a quien le secuestraron un hermano, un intento de secuestro de manera directa, conocidos desaparecidos, no es que nos sea ajeno, ni mucho menos.

“Mi hermana fue liberada, pero eso no quita el daño a la familia, fue en 2011, por eso fue cuando decidí acercarme al movimiento de derechos humanos”, expresó.

Sin embargo, lejos de buscar venganza,  desde entonces él y su familia decidieron involucrare en acciones sociales encaminadas a revertir este delito en su municipio.

“Una cosa que sí te digo, la reacción natural es que alguien busque venganza y eso es lo que nos ha llevado a este ciclo de violencia sin fin, pero nosotros como familia no queremos venganza, ni mucho menos, lo que buscamos es intentar que esto no le ocurra a nadie, lo que nos propusimos como familia fue pensar de qué manera como sociedad podemos incidir para que la gente no se sienta obligada ni orillada ni en la desesperación de dedicarse a estas cosas, que es una industria de hacerle daño a otros.

“Entonces pues de ahí que decidiera sumarme al movimiento de derechos humanos, primero como algo sin mucho conocimiento y ya después de manera profesional”, dijo.

Su principal objetivo, asegura, es poner los reflectores nacionales sobre Jojutla y revertir entre la población la sensación de abandono.

“Yo creo que precisamente parte de lo que necesitamos hacer, y es algo de lo que estoy intentando hacer también, una misión, es quitar la sensación de abandono, porque Jojutla se siete abandonada y se siete abandonada… pues se sintió sobre todo abandonada a finales de año, pero comenzando el año pues ya conforme regresa el calor y conforme se empieza a sentir que las cosas no avanzan, el abandono se convierte en enojo, entonces a mí una misión central es poner a Jojutla en el mapa como un reto, nosotros decimos que Jojutla es un reto para el País por combinar todas estas tragedias.

“Nosotros tenemos una situación que nos remite a Guerrero, a Michoacán, a Tamaulipas, a Coahuila, a algunos estados de Jalisco en materia de violencia y al mismo tiempo lo que nos ocurrió a estados de Oaxaca, Puebla, Chiapas, a algunas colonias de la Ciudad de México, somos un reto como municipio para el País frente a nuestra capacidad de respuesta y por eso me interesa a mí, y lo hemos intentado hacer, echarle reflectores, echarle luz de este lado

Para lograr su registro como candidato Carlos Brito tuvo que recabar el 3 por ciento de firmas de los ciudadanos inscritos en el padrón electoral de Jojutla,  lo que representaba 1 mil 400 firmas.

En el proceso él y su equipo sumaron 5 por ciento más de los apoyos necesarios, con lo que lograron el registro como candidato independiente.

ADRIÁN GOROCICA, EL REBELDE QUE BUSCA LUGAR PARA LOS JÓVENES

 “Que no compren el discurso de la derrota. El discurso que le ha hecho muchísimo daño a este país, el que nos dice que nada puede cambiar, que todos somos iguales, que la política es sinónimo de corrupción; ese es el discurso que le conviene hoy a la clase política en nuestro país. Decidimos no aceptarlo y ser rebeldes”.

Ese es el mensaje de Adrián Gorocica Rojas para los jóvenes. Ignorar a quienes les dicen que no pueden, que la política es corrupción y en cambio tomar sus propios caminos para hacer espacios y que los jóvenes puedan ser tomados en cuenta.

El joven de 29 años, ingeniero industrial por el Instituto Tecnológico de Mérida es uno de los seis candidatos independientes que aparecerán en las boletas el próximo 1º de julio para competir por un puesto público en Yucatán. Es el único en buscar una diputación en el congreso local.

Forma parte de la plataforma de Wikipolítica, a la que pertenece Pedro Kumamoto y con la que se sumaron cientos de jóvenes en el país bajo el lema “Vamos a reemplazarles”.

Adrián, al igual que el primer diputado independiente en Jalisco, quiere quitar los espacios políticos que tienen personajes que sólo ven por sus intereses personales y el de ciertos grupos, para darlos a quienes escucharán a los ciudadanos, sin gastar su dinero.

“Consideramos que debemos crear espacios porque los cambios que se proponían, las personas quedaban a los intereses de los partidos políticos y no al de la gran mayoría”, dice en entrevista con La Silla Rota.

El joven busca ganar la curul del distrito 4 de Yucatán, una demarcación donde ha vivido toda su vida y ha trabajado en los últimos años con los vecinos para buscar mejores condiciones y más espacios de recreación.

Adrián es conocido por su activismo en temas ciudadanos, en especial en el del transporte público, problema que llevará al Congreso de Yucatán si resulta electo.

“Tengo 13 años participando activismo local, en el tema del transporte público, el tema de la ciudad. En el transporte público hay una deuda enorme, no es una cuestión de una mejor calidad en el servicio, sino de algo que está vulnerando derechos como a la educación, salud, trabajo, una vida digna”, explica.

Otro de los temas que impulsará desde lo legislativo es la participación ciudadana y la transparencia en los gobiernos, con el fin de que estén más vigilados y se preste a menos corrupción.

Con estas propuestas, Gorocica Rojas obtuvo 5 mil 961 firmas, 334 más de las que solicitaba el Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Yucatán.

Sin embargo, Adrián se enfrentó a algunos obstáculos en el camino. El más importante de ellos, la desinformación de los ciudadanos sobre la figura de candidato independiente. Además de que las personas no confiaban para prestar sus credenciales de elector.

“A la desinformación. A pesar de que en 2015 fue el auge de los independientes, mucha gente aquí desconoce de la figura, no les quedaba claro que es el candidato independiente. El segundo reto era el tema de la credencial, donde pedirle la credencial a una persona para capturarla en la aplicación, que tuviera la firma, y dada la situación en el país generaba muchísima desconfianza”, señala.

Aun sí, él y su equipo continuaron tocando puertas en el distrito 4 de Yucatán para lograr el umbral del apoyo ciudadano requerido.

Sobre Pedro Kumamoto, Adrián Gorocica ve en él un ejemplo a seguir. Una persona humilde que ve por los intereses de los ciudadanos y busca espacios para que sean escuchados.

“Pedro es una persona maravillosa. De verdad que es alguien que te inspira a seguir luchando. De manera personal, creo que es un referente de cómo debemos ser quienes aspiremos estar en un espacio de representación: cercano a las personas, abiertos y siempre con los pies sobre la tierra. Con Pedro es así”, describe.

Adrián siguió el ejemplo de Kumamoto en su campaña a diputado por Jalisco y sólo gastó el 24% del tope permitido por la instancia electoral.

ALEJANDRA DEL TORO, CÓMO LUCHAR CONTRA EL FANTASMA DE EL BRONCO 

 “Además de la decepción de la clase política, pues también nos enfrentamos a que hace tres años las personas votaron por alguien que les prometió hacer las cosas diferentes; no cumplió con las expectativas que las personas tenían con él y entonces enfrentarnos con esa doble decepción”.

Alejandra del Toro busca una diputación en el Congreso de Nuevo León por el distrito 6, en el corazón de Monterrey. Pero, además de las batallas de una campaña electoral, la antipatía de los ciudadanos y el hartazgo en la política, la joven debe enfrentar la desilusión que ha dejado Jaime Rodríguez Calderón en los neoloneses.

La diseñadora gráfica de 27 años, graduada de la Universidad Autónoma de Nuevo León se dedicó, además de juntar firmas, a explicarles a las personas que ser ‘independiente’ no es un partido y que no milita con El Bronco.

Sin embargo, estas razones la han movido a luchar aún más porque la ciudadanía conozca que hay otras opciones, otros personajes  y otros representantes populares que no los defraudarán y que defenderán las causas que los mismos vecinos.

“Sabemos que hay esfuerzos vecinales muy valiosos, que era importante visibilizar, recuperar lo que está pasando en el centro de Monterrey, qué podemos hacer para crecer, que las personas sean primero. Tratar de ganar la empatía y la confianza de las personas ha sido de los mayores retos”, explica a La Silla Rota.

Alejandra del Toro forma parte también de Wikipolítica, la plataforma creada por jóvenes profesionistas que, como ella buscan espacios donde ser escuchados y ser agentes de cambio para mejorar su estado, su ciudad, su distrito.

Entre sus propuestas destacan la lucha a favor de las mujeres, un grupo vulnerable en Nuevo León que por la violencia que enfrentan se tuvo que activar la alerta de género.

La diseñadora también plantea un proyecto en el que los ciudadanos serán la voz en el Congreso local, una vez que gane la diputación. Crearán agendas y llevarán temas al poder legislativo, que es finalmente donde se pueden hacer cambios para el bien común.

“Yo vengo de activismo y trabajos por los derechos de las mujeres, veo la necesidad y la urgencia en avanzar en lo que no estamos haciendo. Tenemos una alerta de género activa, pero seguimos viendo más casos. Desde lo legislativo buscaremos construir una ciudad para todas y todos, realizaremos consultas con vecinos y trabajaremos con ellos de la mano”, asegura.

Acerca de los partidos políticos, Ale del Toro, como es conocida, dice que como tal, no son los malos, sino las personas que los han utilizado para corrupción, cacicazgo y amiguismo, y que quitan los espacios a quienes realmente quieren hacer algo por su comunidad.

Alejandra admira el proyecto que ha emprendido Pedro Kumamoto y a todos los jóvenes que se están uniendo con el fin de extenderse por todo el país y concientizar a las personas de que también pueden participar en la política.

“Nuestra generación tiene una mayor oportunidad de participar. Antes quienes querían hacer política se veían mucho más limitados. Nosotros tenemos la oportunidad de hacerlo, tenemos los medios para participar y hay esfuerzos, hay espacios para proponer, si no nos gusta ninguno, hagamos nuestros espacios. Tenemos la oportunidad de definir el futuro que queremos, hagámoslo, tomémoslo en nuestras manos y seamos valientes, porque para esto se necesita valentía”.

EL AMBIENTALISTA QUE QUIERE REPRESENTAR A JALISCO EN LA CÁMARA DE DIPUTADOS

Pablo Montaño tiene 29 años. A su edad, ya cuenta con una licenciatura en Ciencias Políticas y una maestría en Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable.

Al igual que Pedro Kumamoto y otros jóvenes de la plataforma Wikipolítica, quiere reemplazar a los políticos comunes y dar voz a los ciudadanos, pero desde la Cámara de Diputados: es candidato independiente por el distrito 8, con cabecera en Guadalajara.

Sin embargo, su activismo y su interés por el bien común no comenzó con esta candidatura. Desde que estudiaba en el Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente (ITESO) fue parte de movimientos estudiantiles y organizaciones.

Una de ellas fue “Ciudad para Todos” desde donde buscaban mejorar la movilidad de la capital jalisciense con propuestas y proyectos. También participó en la organización FM4 Paso Libre, para la defensa y atención de migrantes.

De igual manera, se ha dado paso en el análisis político con un blog propio y columnas editoriales en diferentes medios de comunicación.

Ahora busca ser parte de la toma de decisiones para apoyar estas causas desde una curul federal en el Congreso de la Unión.

“He trabajado como activista desde hace casi 10 años. Soy un creyente de la idea de que, si no hacemos política nosotros, alguien más lo va a hacer por nosotros. Siguiendo esa línea fue que me animé a tomar este paso y ahora estoy parado de este lado político”, expresa en entrevista con La Silla Rota.

Pablo quiere seguir el ejemplo de su compañero, Pedro Kumamoto, a quien considera una persona que ha roto esquemas y ha sido congruente como diputado local, tras ser electo en junio del 2015.

A diferencia de los partidos políticos que han perdido su funcionalidad y se han convertido en negocios familiares y en rutas de acceso rápido al poder.

“La parte teórica de un partido se ha desdibujado. La realidad aquí en México es que se ha pervertido mucho el uso de los partidos políticos y se han convertido en negocios familiares o vías rápidas de acceso al poder. Por otra parte, Pedro Kumamoto ha logrado cumplir con una parte importante que era no defraudar la esperanza y no defraudar un momento histórico que se le otorgó de ingresar sin colores y de manera independiente. Lo ha hecho muy bien, tanto en lo personal como en lo profesional. Fue ejemplar en su diputación”, explica.

Esos han sido los principales retos a los que se ha enfrentado al salir a las calles para pedir el apoyo ciudadano: recuperar la confianza de la gente en los políticos, en especial en los diputados.

Cuando tocaba las puertas, a Pablo le cuestionaban sobre las diputaciones y cómo les garantizaría que no se robaría el dinero del pueblo “como todos lo hacen”.

En este sentido, el joven candidato considera que hay una desesperanza en los ciudadanos en que algo mejor puede pasar si emiten su voto este 1º de julio.

“El hablar de política en un país donde la política ha sido algo históricamente sucio, algo de lo que no se habla, algo desagradable, que trae mucha desesperanza, mucha desilusión. Llegábamos a pedir las firmas y era muy común encontrar enojo, antipatía a lo que pudiéramos decir, porque representábamos eso que a la gente le disgusta tanto. Y, aún más para una diputación federal. La gente dice: ¿para qué quiero un diputado federal? No nos sirve de nada, no quiero nada de ti, nada más vas a ir a robar”, lamenta.

Para contrarrestar las dudas, Pedro les daba a conocer su plan de trabajo, sus propuestas y los principales ejes rectores de su campaña a la diputación federal del distrito 8, en Guadalajara.

Entre sus compromisos está acabar con la compra de votos; terminar con la basura electora, como espectaculares y pendones. Reducir el tope de campaña a la mitad; es decir, usar menos de 700 mil pesos de un millón 400 mil que le otorgará el Instituto Nacional Electoral (INE).

Además, promete no participar en guerra sucia, fake news o utilizar bots, para engañar a la gente.

De ser electo en la próxima jornada electoral, Pablo Montaño impulsará desde la Cámara de Diputados la iniciativa “Sin voto no hay dinero” para reducir el presupuesto a partidos; plantear una discusión serie sobre el aumento al salario mínimo y vigilar la asignación de recursos para las áreas de educación y salud.

“Tenemos tres ejes de propuestas: impulsar sin voto no hay dinero, que se redujo dinero partidos un 60%, en Jalisco y queremos hacerlo a nivel nacional. Plantear una discusión seria y abierta con el salario mínimo. No es legal mantener a un trabajador en la pobreza. El tercero, lo público es sinónimo de excelencia. Se trata de hablar de los servicios que estamos recibiendo como ciudadanos, vigilar la manera en que asignan los recursos en temas de salud, de educación”, detalla.

El activista busca que mucho más jóvenes se interesen en la política y en generar un cambio en la democracia, así como ser parte de las tomas de decisiones en el país.

En especial, que la generación millennial ignore a quienes dicen que son ignorantes de su entorno y apáticos de los problemas que conciernen a la sociedad.

“Que se involucren, que no compremos una narrativa de que tenemos que ser espectadores y que otros van a venir a hacer la política por nosotros y que nos toca únicamente tachar una boleta. Mucho se habla de la generación millennial y de lo que representan y lo que son y las fallas que tenemos, y creo que los jóvenes tenemos que demostrar que no somos el futuro, sino que somos protagonistas actuales de lo que va a suceder en estas elecciones. Hay mucho que podemos hacer”.

AJ