CIUDAD DE MÉXICO (La Silla Rota).- La reciente detención de Javier Guerrero Covarrubias, El Javi, reveló la alianza de la familia Guerrero con el Cártel Jalisco Nueva Generación, a quienes se les atribuye haber desatado el enfrentamiento en Tanhuato donde perdieron la vida 42 personas, planear el asesinato de Enrique Hernández, candidato de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y ex líder de las autodefensas de Yurécuaro; y ejecutar la emboscada contra la fuerzas federales en Ocotlán, Jalisco.
El Javi es compadre de Nemesio Oseguera Cervantes, alias El Mencho, líder del CJNG, ambos trabajaron para evitar la expansión de Los Caballeros Templarios en los límites de Michoacán y Jalisco, principalmente en los municipios de Tanhuato y Ecuandureo.
En Michoacán, la familia Guerrero tiene un historial delictivo de más de 30 años, donde comenzaron con el abigeato –robo de ganado-, después diversificaron sus operaciones y ahora pesan sobre ellos denuncias de extorsión, secuestro, asesinato, despojo de tierras, robo a ductos de Pemex y narcotráfico.
Javier Guerrero, el patriarca de la familia, tuvo que enfrentar los embates de otros grupos criminales que comenzaron a disputarles “las plazas” (Zamora, La Piedad, Vista Hermosa, Yurecuaro, Ecuandureo y Tanhuato), primero al cártel de Sinaloa y luego a Los Caballeros Templarios que lideraba Servando Gómez, La Tuta.
En la defensa de “su territorio”, Javier Guerrero no iría solo, lo acompañaría su compadre Nemesio Oseguera Cervantes, líder del CJNG -nacido en el municipio de Aguililla-, que tenía planes de expansión en territorio michoacano. Forjaron una alianza.
En un enfrentamiento entre “Los Guerrero” y “Los Caballeros Templarios” en diciembre de 2011, murió Javier Guerrero en un camino de terracería que está entre el poblado Tinaja de Vargas (Tanhuato) y la Autopista de Occidente.
Las operaciones recayeron en sus hijos Adrián Alonso y Javier Guerrero Covarrubias.
El 19 de marzo de 2015, elementos de la Gendarmería Nacional fueron emboscados por un comando del CJNG en Ocotlán, Jalisco. Las investigaciones apuntaron hacia integrantes de la familia Guerrero.
Dos meses después, el 15 de mayo, fue asesinado Enrique Hernández, candidato de Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y ex líder de las autodefensas de Yurécuaro. Adrián Alonso Guerrero Covarrubias y Heraclio Guerrero Martínez, integrantes de “Los Guerrero”, fueron detenidos y señalados por el procurador de Michoacán, Martín Godoy Castro, de ser los autores intelectuales del crimen.
Enrique Hernández mantenía diferencias con “Los Guerrero” por la administración ilegal de un banco de arena, ubicado en las inmediaciones de la comunidad de Tinaja de Vargas.
Los detenidos habrían dado información para llegar al rancho El Sol en la comunidad de Tinajas de Vargas en Tanhuato-Ecuandureo, que derivó en el operativo del 22 de mayo donde perdieron la vida 43 personas, de ellos 42 eran civiles y un policía federal. Iban por Javier Guerrero Covarrubias.
El 31 de agosto, el comisionado Nacional de Seguridad, Renato Sales Heredia, informó de la detención de Javier Guerrero Covarrubias, El Javi, el arresto se llevó a cabo sin disparos en el fraccionamiento Las Américas ubicado en el municipio de Zapotlán, Jalisco.
El Javi es considerado jefe de sicarios del CJNG, señalado como quien ordenó la emboscada contra agentes federales en marzo pasado en Ocotlán, en la cual fallecieron cinco agentes de la División de Gendarmería de la Policía Federal y dos civiles.
La detención de Adrián Alonso y Javier Guerrero Covarrubias, es un fuerte golpe a las operaciones del CJNG en los límites de Michoacán y Jalisco.
lrc