Javier Jiménez Espriú, futuro secretario de Comunicaciones y Transportes recorrió varias localidades afectadas por la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), donde estudios previos detectaron el impacto ambiental que les espera.
Es en Santo Tomás Apipilhuasco, Tezoyuca y Atenco donde la gente se acercó al próximo funcionario del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, para que atestiguara los caminos de polvo con que conviven todos los días tras el paso de camiones con material de construcción.
El impacto ambiental que advierten por la nueva terminal
Aparte fueron las denuncias que ya se conocían: enlodamiento de calles, pozos descuidados, tiraderos en áreas naturales protegidas (como es el caso del Sistema Tetcutzingo) y suelos sin impermeabilizar que prevendrían de contaminación a las tierras.
Los vecinos de Tezoyuca viven con miedo a que las lluvias y la erosión por la explotación de una mina de tezontle (uno de los principales materiales utilizados en la construcción de la terminal aérea), provoquen una catástrofe que los deje sin viviendas.
La polémica escaló a que los responsables del aeropuerto aseguraron que dejarían de comprar material de esa mina y evitar afectaciones que colapsara a la hilera de casas en esa comunidad.
Previamente, un Análisis de Impacto Urbano del especialista Román Meyer Falcón especificó sobre el impacto urbano de la construcción que el proyecto afectará al crecimiento poblacional precisamente en Atenco y Tezoyuca, así como otros municipios aledaños.
Ello parte de información que proporcionaron en conjunto la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), donde refirieron que la tasa de crecimiento medio anual de la población en la región pasará de 1.65 a 5 por ciento.
Además, Meyer Falcón –quien se perfila a encabezar en el sexenio de AMLO la Sedatu- consideró que hoy en día no se tiene un programa de desarrollo regional, en el cual el aeropuerto y todo el impacto urbano aledaño a éste por los próximos 20 ó 30 años, sea tomado como punto central “para poder determinar si tenemos todas las capacidades de agua, luz, infraestructura básica, o si los municipios tienen los cuerpos técnicos para poder lidiar de repente con cuestiones de alumbrado público, agua, policías, todo la infraestructura que se requieren”.
ATENCO, DESDE HACE 17 AÑOS
En Atenco, el problema que más resienten es la escasez de agua. A finales de agosto pasado, Javier Ramírez Espinoza, integrante del Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra, dijo a La Silla Rota que antes tenían abasto del líquido todos los días.
"Ahora Conagua es quien está racionando con el argumento que es para tener en temporada de seca, pero nosotros sabemos que se la están llevando para el Nuevo Aeropuerto. La mitad del pueblo tiene agua dos veces por semana y la otra mitad no, y luego viceversa", aseguró.
Su lucha data de octubre de 2001 cuando el gobierno federal emitió 19 decretos expropiatorios con el propósito de construir un nuevo aeropuerto en la zona de Texcoco. Es 17 años más tarde que vuelve a estar vigente.
Alicia Galicia, habitante de San Francisco Acuexcomac del municipio de Atenco, tiene 79 años y se dedica al campo. Siembra maíz, frijol, haba, calabaza y lechuga en un terreno que le heredó su suegra.
Con esa parcela sacó a sus hijos adelante, luego que su esposo falleciera cuando ellos estaban pequeños. Ahora, asegura, su patrimonio está en riesgo por la construcción del NAICM.
"Este Aeropuerto ha cambiado nuestras vidas. Primero en 2001 cuando nos dijeron del proyecto y que nos quitarían nuestras tierras, salimos a defenderlas. En ese momento y tampoco ahora no nos tomaron en cuenta, por eso seguimos luchando", declaró a LSR con machete en mano.
En la comunidad de Alicia también están racionando el agua. "A veces hay en un lugar y al día siguiente no y así es como empieza el despojo. Nos han querido privatizar el agua. El presidente municipal se la quiere adueñar para después venderla. No nos vamos a dejar", afirmó.
También relató que para hacer la primera parte del Aeropuerto extrajeron lodo y tierra que al parecer está contaminada, la vertieron cerca del río que pasa por su comunidad.
"Vienen a tirar el desperdicio que sacan de los socavones para hacer el aeropuerto y llueve, entonces ese lodo se está yendo para los acuíferos y el río. Están contaminando esa parte y luego se van a seguir con nuestros campos y tierras. El coraje que tenemos es que será un negocio para extranjeros y no es justo que sigan entregando nuestras tierras".
Varios estudios ambientales sustentan que el terreno donde estará el Nuevo Aeropuerto es inadecuado e inviable por el tipo de suelo salino sódico, ya que es el lecho del ex Lago de Texcoco, y que la construcción generará un alto impacto ambiental que incluso ya se observa con la sobreexplotación de minas para la extracción de material de construcción; cerros de 10 municipios han sido devastados.
ESPERANZA EN LA CONSULTA
Este miércoles los pobladores mostraron a Jiménez Espriú los "daños" provocados por las obras como deforestación en lo que llaman áreas naturales y sus acuíferos desecados, por lo que exigen poner fin a la construcción.
El próximo secretario explicó que su cancelación o continuidad dependerá de los resultados de la consulta popular como “ha dicho el presidente electo que lo someterá a la opinión de la comunidad nacional, que debe estar plenamente informada".
Alertan de inundaciones en la CDMX por NAICM
Ésta se llevará a cabo del jueves 25 de octubre al domingo 28 del mismo mes en 538 municipios del país y preguntará si debe mantenerse la construcción del NAICM o adaptar como aeropuerto civil la base militar de Santa Lucía, opción favorita de López Obrador.
Según una encuesta difundida este martes, 4% de los mexicanos defienden la construcción de la terminal aérea en Texcoco, 20% apoyan acondicionar la base militar y 20% quieren mantener el actual aeropuerto de la capital mexicana.
Con información de EFE, El País y Sharenii Guzmán, reportera.
ams