Las agresiones en el mundo digital y la violencia de género en redes sociales se puede manifestar de diversas formas como el acceso o control no autorizado; control o manipulación de la información: suplantación y robo de la identidad; monitoreo y acecho; expresiones discriminatorias; acoso; amenazas; difusión de información personal o íntima; extorsión; desprestigio; abuso sexual relacionado con la tecnología; afectaciones a canales de expresión; y, omisiones por parte de actores con poder regulatorio. 

En 2015 el Inegi registró que al menos 9 millones de mexicanas habían sufrido de un ciberacoso señalando que las mujeres más vulnerables a sufrir algún tipo de violencia o agresión digital eran de entre 20 a 29 años, seguidas por el grupo de mujeres de 12 a 19 años. 

La violencia en línea puede manifestarse de formas diversas y a pesar de ver al mundo físico y al mundo digital como algo completamente diferente la violencia de género es ejercida en ambos espacios. Recuerda que toda violencia o agresión es grave y ninguna tiene menos importancia que otra. 

¿Cómo se presenta la violencia digital? 

Así como las mujeres y niñas se enfrentan a riesgos en la calle, los hogares o la oficina las plataformas y redes sociales presentan riesgos. según la Organización Social ITIC estos actos pueden causar daños psicológicos, emocionales, pérdidas económicas, violaciones a la privacidad, traumas de revivir agresiones sexuales o abusos, entre otras consecuencias. 

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La Asociación para el Progreso de la Comunicaciones (APC) indica que las mujeres que experimentan más violencia con la tecnología son las mujeres que tiene una relación íntima cuya pareja es violenta; las sobrevivientes de una agresión física por parte de su pareja; y, profesionales con un perfil público implicadas en el sector de la comunicación (escritoras, investigadoras, activistas, artistas). 

Cifras del del Inegi indican que el 86.3% de los victimarios son desconocidos, mientras que el 5.9% amigos, el 4.5% compañeros de clase o trabajo y el 4.5%.% restante parejas, ex pareja o familiares. 

¿Qué se puede hacer para detener la violencia digital? 

Las formas más comunes de violencia contra las mujeres por medio de las plataformas digitales son los casos de acoso, intimidación, amenazas u otros tipos de violencia que involucran daño psicológico. La creación de perfiles falsos, la difamación, la difusión de fotografías o videos íntimos, y los comentarios de odio cada vez son más comunes en el entorno digital. 

Existen diversos delitos relacionados a la violencia en contra de la mujer, según la Declaración de las Naciones Unidas sobre la Eliminación de la Violencia contra la Mujer México reconoce la violencia psicológica en la ley y puede extenderse hasta la violencia ejercida con la tecnología. 

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Sin embargo las cifras demuestra que las acciones de las mujeres aún están muy lejanas a ejercer sus derechos y señalan que el 26.3% de las mujeres únicamente deciden bloquear a su agresor; el 26.3 % ignoran la situación; el 13.9% cancela su cuenta; el 11.3% informa a un tercero; el 5.6% confronta a la persona y solo el 4% denuncia ante una autoridad. 

Actualmente en México ya existe la Ley Olimpia que castiga la violencia digital y tipifica como delito el hostigamiento y difusión de contenido sexual en internet. Sin embargo aún falta un largo camino por recorrer para terminar con la violencia digital.