Las mujeres hemos avanzado en tener mejores condiciones de vida y oportunidades de desarrollo, pero hay algunas áreas en las que el rezago persiste y una de las más importantes es la de la salud, especialmente en el tema de enfermedades crónico degenerativas.
Esta semana se presentó la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2018, elaborada en conjunto por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía y la Secretaría de Salud. El dato principal es que tres de cada cuatro mexicanos mayores de 20 años tiene algún grado de obesidad o sobrepeso. La incidencia del aumento de estos problemas de salud es mayor en las mujeres que en los hombres.
Cuatro de cada 10 mujeres de 20 o más años tiene obesidad actualmente, en tanto que 30.5% de los hombres tienen esta condición. En el mismo rango de edad, 76.8% de las mujeres tiene sobrepeso u obesidad, cifra mayor a la cifra de hombres, que es de 73.0%.
En adolescentes de 12 a 19 años, el panorama no mejora, ya que 41.1% de las chicas tiene obesidad o sobrepeso, esta cifra aumentó 5.3% en los últimos seis años; asimismo, es mayor que en los hombres, que es de 35.8%. Al observar a detalle la situación, los datos de la Ensanut muestran que tres de cada 10 de las adolescentes tienen algún grado de sobrepeso, mientras que 14.1% sufre de obesidad.
Juan Ángel Rivera Dommarco, director general del Instituto Nacional de Salud Pública, destaca que “algo muy interesante y triste es que encontramos que ya en el caso de las mujeres 40% tiene obesidad, en el caso de los hombres 30% la tiene, entonces aquí hablamos también de una inequidad de género en término de los efectos que esto puede tener, que es en detrimento de las mujeres”.
Esta situación podría estar relacionada (en parte) a la cantidad de actividades que llevan a cabo las mujeres al día, que no les permiten realizar la suficiente actividad física. en la encuesta 32.5% de ellas dijo que dedica menos de 150 minutos a la semana a hacer ejercicio, por el contrario, 28.1% de los hombres dijo que destina mil 680 minutos o más a ejercitarse de alguna manera.
“La alimentación no es una decisión exclusivamente individual, lo que los individuos consumen depende de los entornos, si están saturados de una oferta alimentaria no saludable, esa es la alimentación que van a tener, a pesar de que pudieran tener la decisión individual de consumir productos saludables.
Más allá de una cuestión estética, los problemas de sobrepeso y obesidad en las mujeres tienen un impacto negativo en su salud. Por ejemplo, 11.4% padece diabetes, esto por encima del promedio nacional que es de 10.3%, y también arriba de la tasa en hombres, que es de 9.1%.
En el caso de hipertensión se presenta la misma situación, 20.9% de ellas sufre de esta enfermedad cardiovascular, en tanto que 15.3% de los hombres la padece y la media del país es de 18.4.
Al revisar las cifras de colesterol y triglicéridos sucede lo mismo, 21% de las mujeres tiene niveles altos, la incidencia es mayor que en los hombres, que es de 17.7%. Tener este tipo de padecimientos eleva el riesgo de sufrir alguna enfermedad cardiovascular.
Aunque estos problemas de salud afectan gravemente a los mexicanos en general, la información de la Ensanut 2018 muestra que las mujeres somos un grupo poblacional en el que el Sector Salud debe poner mayor atención. Las enfermedades crónico degenerativas son una epidemia en nuestro país y son multifactoriales. El subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell Ramírez explicó que uno de los factores principales es lo que comemos.
“Efectivamente llevamos 12 años de una tendencia creciente, cada vez más acelerada de los problemas de enfermedades crónicas no transmisibles asociadas a la mala nutrición. Como he dicho, la mitad de las muertes anuales de México desde hace 12 años se asocian con mala nutrición y en particular tienen que ver con consumo excesivo de calorías y azúcares, de grasas y sal”, enfatiza.