Hace cuatro meses, Christina Koch demostró la capacidad de las mujeres en la ciencia, al hacer la primera caminata femenina en el espacio.

Pero ahora, la astronauta de la NASA sumó otro récord a su carrera. Logró hacer el vuelo espacial más largo realizado por una mujer.

El pasado jueves, la nave espacial rusa Soyuz, que transportaba a Koch de vuelta a la Tierra, aterrizó en las praderas de Kazajistán.

Con esto se cumplieron 328 días en la Estación Espacial Internacional (EEI), superando el récord anterior, de la estadounidense Peggy Whitson, quien pasó 289 días en el espacio, regresando el pasado 28 de diciembre del año pasado.

A Christina sólo le faltaron 12 días para superar también el récord del estadounidense Scott Kelly, quien estuvo en la EEI entre 2015 y 2016.

"Estoy tan abrumada y feliz en este momento", dijo la astronauta a los periodistas mientras se sentaba fuera de la cápsula, poco después de que esta cayera sobre la nieve.

Durante su misión, Koch completó 5.248 órbitas de la Tierra y viajó 223 millones de kilómetros, el equivalente a 291 viajes de ida y vuelta a la Luna desde la Tierra.

Junto a ella, en el Soyuz volvieron el astronauta italiano de la Agencia Espacial Europea Luca Parmitano y el cosmonauta ruso Aleksandr Skvortsov. El aterrizaje fue cerca de Zhezkazgan, en la parte central de Kazajistán.

"Para mí, se trata del honor que siento de seguir los pasos de mis héroes", dijo la astronauta.

"Cuando era chica e imaginaba qué podía hacer con mi vida y cuáles podían ser mis sueños, para mí era importante ver a gente en quien me podía ver reflejada. Ser quizá esa fuente de inspiración para otra persona es un gran honor", aseguró.

Su primer récord

Koch marcó su primer récord durante los casi 11 meses que estuvo en la EEI. El 18 de octubre del año pasado, junto a su compatriota Jessica Meir, emprendió la primera caminata espacial en la que solo participaban mujeres.

Ambas pasaron siete horas fuera de la EEI reemplazando una unidad de control de energía que fallaba.

Recordando este momento histórico con Meir, Koch le dijo a NBC News: "Al principio, cuando nos dieron la aprobación para salir de la esclusa y acabamos haciéndolo, estábamos agarradas a una barandilla y nos miramos a los ojos".

"Sabíamos lo especial que era ese momento y nunca lo olvidaré".

 

Con información de la BBC