Con motivo del debate sobre la despenalización del aborto, inició este viernes la protesta feminista en la Ciudad de México que salió del Monumento a la Revolución al Zócalo.

En la explanada del Monumento a la Revolución, elementos de la policía del agrupamiento Atenea llegaron a dialogar con las manifestantes para decirles que "están para apoyarlas y aprecian el movimiento".

Otras manifestantes comentaron que hacen presión para que el gobierno "legisle en favor del derecho de las mujeres a tener un aborto legal, seguro y gratuito".

Desde el inicio de la marcha hubo un gran despliegue de policías para contenerlas, lo cual fue criticado por las feministas. Una línea de policías estuvo hasta al frente.

Al llegar al Zócalo, se reportó que una de las asistentes y una policía se lastimaron. 

Debido a la protesta, el Metro de la Ciudad de México avisó sobre el cierre de la  Línea 2.  Los policías aseguraron que no hubo uso de gas pimienta sino de extintores.

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El grupo de manifestantes estuvo rodeado de policías, siendo que en marchas anteriores, la policía sólo se mantenía haciendo una vaya a los costados del contingente. 

Además, Paramédicos del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM), atendieron a una  oficial que resultó lesionada en una mano, tras recibir golpes con un martillo por parte de las manifestantes; el diagnóstico es posible fractura de mano.

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Al llegar a la plancha, una de las manifestantes denuncia que recibió un puñetazo por un policía. Sin embargo, ERUM reportó que la joven se lesiono con "el petardo que ellas mismas aventaron".

Sus acompañantes demandan que no están representando a ni un partido político. Una de las periodistas le menciona que tienen un golpe en la cara. Sin embargo, una de las compañeras quien recibió el golpe le dice que no se descubra el rostro.

A lo largo de la marcha, las manifestantes golpearon las ventanas de un edificio del gobierno de la Ciudad de México, una parada del metrobús -a la altura del Caballito- y un puesto de periódicos, a modo de protesta por la desaprobación de la Suprema Corte, el miércoles 29 de julio, al proyecto de despenalización del aborto en Veracruz, donde los ministros no debatieron la propuesta.

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Las organizadoras de la marcha, en redes sociales, pidieron a las asistentes tomar todas las medidas sanitarias de prevención para no contagiarse de covid-19.

Al respecto, Melisa, una de las manifestantes, indicó que sí les da temor salir a protestar en medio de la pandemia de covid-19, pero  lo hacen porque el aborto legal es un derecho fundamental.

“Sí nos da miedo, claro, todas traemos nuestro cubrebocas puesto, unas traen caretas, todas queremos cuidarnos. Esto lo hacemos para ayudar a otras mujeres el día de mañana”, enfatizó.

Pese a la pandemia, las feministas señalaron que decidieron asistir para hacer presión a las autoridades y legislar a favor de los derechos de las mujeres.

Itzania Otero, jefa del agrupamiento Atenea de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México, aseguró que el grupo de policías estuvo para acompañar a las manifestantes y respetar su plan. Otero cuenta con más de 10 años de experiencia dentro de la SSC.

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La convocatoria de la marcha se hizo par apoyar a las compañeras de Veracruz, para instar a la Suprema Corte a revisar a profundidad el proyecto para despenalizar el aborto en el estado. 

 

Las manifestantes llegan al zócalo acompañadas de policías, una cadena de mujeres policías van al frente.

“Mujer escucha, esa esa es tu lucha, se escucha mientras entran por la calle de 5 de Mayo al llegar a la plancha del Centro Histórico.