Durante el Mundial de Atletismo de Qatar, Allyson Felix pasó a la historia del deporte. La corredora estadounidense superó el récord de medallas que ostentaba Usain Bolt (con 11 oros mundiales) y se hizo con su duodécimo medalla de dorada para convertirse en la atleta más ganadora en la historia de estas competencias. 

Felix de 33 años ganó una nueva medalla de oro en la competencia 4x400 mixto, instaurando un récord mundial de 3:09:34. 

Esta es su primera competencia desde la llegada de su primera hija, Camryn, que nació en noviembre pasado. En mayo, la atleta oriunda de Los Ángeles, California, se unió a las denuncias de discriminación de más compañeras y en una columna publicada en The New York Times, contó que Nike le había ofrecido un nuevo contrato a la baja (un 70 por ciento inferior al anterior, que terminó a finales de 2017) tras decidir ser madre en 2018. 

Pidió garantías de que no sería penalizada si rendía por debajo de su nivel en los meses anteriores y posteriores al parto. La respuesta fue negativa. Así, Allyson, tras competir por primera vez en 13 meses, puso fin a las negociaciones con Nike para firmar con la marca Athleta.

Sin embargo, en junio ganó la batalla, y en una publicación compartió que Nike le anunció una nueva política contractual no discriminatoria a las deportistas por ser madres. 

“Si la atleta queda embarazada, Nike no puede aplicar ninguna reducción relacionada con el rendimiento (si se diera el caso) por un período consecutivo de año y medio, comenzando ocho meses antes de la fecha del parto. Durante dicho periodo, Nike no puede rescindir ningún contrato si el atleta no compite debido al embarazo”, se lee en la carta que la empresa le mandó a la corredora. 

Discriminación en atletas embarazadas

Las deportistas se enfrentan a la discriminación cuando deciden ser madres, corren el riesgo de que los patrocinadores les recorten el salario durante el embarazo y después. Un claro ejemplo de que las reglas en la industria deportiva están hechas y aprobadas por hombres. 

Al nombre de Allyson Felix se unen otras dos mujeres que han hecho historia en el Mundial de Atletismo 2019 que se celebra en Doha, Qatar. Se trata de la jamaicana Shelly-Ann Fraser-Pryce (oro en los 100 metros planos) y la china Hong Liu (oro en 20 kilómetros marcha). 

Tres deportistas de elite, tres atletas, tres mujeres que demuestran que ser madre y tener una carrera de éxitos es compatible. 

Shelly-Ann Fraser-Pryce 

La jamaicana de 32 años se convirtió en la mujer más rápida del mundo después de ganar la prueba de los 100 metros planos con un tiempo de 10.71. Con esta marca, Shelly-Ann firmó el segundo mejor tiempo en la historia de los campeonatos. Una estrella que comenzó a ganar con 21 años y ahora va acompañada de su pequeño Zyon, que nació en 2017. 

La también conocida como “Pocket Rocket” firmó sus éxitos al conseguir el oro en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008. Después llegó el oro en Londres 2012 y en los Mundiales de Berlín 2009, Moscú 2013 y Pekín 2015. 

Tras ser la reina de la velocidad, decidió parar para ser madre y a finales de 2017 nació su hijo Zyon, quien ahora le acompaña en el Campeonato del Mundo en Doha. 

Hong Liu 

La china de 32 años confirmó que es la marchadora número uno de todos los tiempos al subirse a lo más alto del podio tras ganar los 20 kilómetros marcha en el Mundial de Atletismo. Su especialidad, ya que se hizo del metal dorado también en 2011 y 2015. 

Hong Liu paró el cronometro en un tiempo de 1:32:53. Este oro es el primero que gana después de ser madre. La atleta no sólo ostenta el récord del mundo en distancia corta (1:24:38), además logró el de distancia larga de 50 kilómetros con un tiempo de 3:59:15. 

Liu se convirtió en la primera mujer de la historia en romper la barrera de las cuatro horas.