¿Qué hace algunas mujeres multiorgásmicas? Hablar sobre orgasmos aún es un tabú, que queremos hablarte sobre lo conocido del desconocido clítoris.

En pleno siglo XXI, claro que todos hemos escuchado hablar, por lo menos una vez, del clítoris. Eso que se encuentra entre las piernas de la mujer y diseñada para sentir placer.

Pero a pesar de su existencia, los estudios del sexo femenino son muy escasos, comparados con el del placer de los hombres.

Hablar de la sexualidad de la mujer es como entrar a una dimensión desconocida, incluso para las mujeres. Parte de ello es gracias a los prejuicios que limitan la educación sexual y la falsa idea de que el sexo de la mujer es exclusivamente para reproducirse y no para sentir placer. Esto es mentira.

De hecho, el clítoris es la única parte del cuerpo humano que no tiene otra función más que el placentero. Pero vamos por el principio. 

“El Clítoris”

La palabra procede del griego Kleitoris. Los griegos fueron los primeros en identificarlo. Incluso crearon un verbo para designar el acto de acariciarlo: Kleitoriázein.

Pero a pesar de que desde entonces se sabía de su existencia, jamás fue un tema de estudio. Tuvieron que pasar años para que Helen E. O’ Connell estudiará su verdadera anatomía.

Helen O'' Connell

A esta increíble mujer se le conoce incluso como La Madre del Clitorios por sus descubrimientos en el tema.

O’ Connell es una uróloga australiana, quien comenzó a cuestionar sobre la rivalidad que existe entre los sexos de ambos géneros. 

“Se tiene la idea es que el órgano masculino es sexual, mientras que el de la mujer, reproductivo”. Algo completamente falso, pues ambos son sexuales y reproductivos.

La doctora intentó entrar más a fondo sobre el conocimiento del clítoris, por lo que prefirió trabajar con imágenes de resonancia magnética.

Tras enterrar el clítoris bajo un mundo de conocimiento, la primera anatomía exacta fue definida ¡hasta 1998!. Pero gracias a las disecciones de la uróloga ahora podemos hacernos una idea mucho más aproximada gracias al prototipo en 3D.

Mide entre 8 y 10 centímetros

Helen O’Connell afirma que el clítoris puede medir de 8-10 cm de longitud. Su forma se asemeja a una “y” griega, prolongandose la parte exterior por el interior del cuerpo y bifurcándose en dos brazos que se extienden alrededor de la vagina.

Con esto, desechó la creencia de que el clítoris es un pequeño órgano del tamaño de un botón y que únicamente se encuentra en la parte externa de nuestro cuerpo.

Prototipo en tamaño real de un clítoris

De esta forma podemos conocer que éste se extiende unos 10 cm y a través de dos ejes por el interior de nuestro cuerpo situando el placer orgásmico de la mujer en una zona mucho más amplia de lo que se creía.

"Cuando la gente habla del clítoris se refiere a la glándula externa que vemos, la parte exterior más sensible, pero eso es solo la punta del iceberg", dice Rebecca Chalker, profesora de Sexología de la Pace University.

Tiene el doble de nervios que el pene

Es la parte más rica en nervios de la vulva, y contiene más de 8000 terminaciones nerviosas, que lo hacen ser el timonel del placer del cuerpo femenino. Tiene dos veces más nervios que el pene. 

Es muy similar al pene

Contrario a lo que se cree, y como resultado de los pocos estudios, el clitorís es muy semejante al pene. 

De hecho, a las dos semanas de gestación es imposible distinguir  el clítoris del pene en un feto. No es hasta la semana ocho de gestación que la testosterona aparece y hace que el pene empiece a tomar forma.

Y es importante recalcar que ambos órganos son sexuales y reproductivos.

Qué hay sobre los orgasmos

Con estos conocimientos es muy fácil descifrar por qué la mayoría de las mujeres tienen más orgasmos cuando se estimula el clítoris, que con una penetración.

Estudios han revelado que  sólo alrededor del 20 por ciento de las mujeres puede experimentar un orgasmo exclusivamente a través de la penetración.

Aunque los orgasmos a través del clítoris también varían mucho. Cada mujer necesita una estimulación diferente para sentirse satisfecha.

Algunas prefieren que se les estimule directamente en el clítoris mientras otras se excitan más si se les estimula en las zonas cercanas y no les gusta nada que se toque directamente su clítoris. Todo depende de la sensibilidad y la biología.