Hablar del delito de violación es tomar en cuenta una enorme cifra negra que corresponde a aquellas mujeres que no pudieron hacer una denuncia ya sea por miedo, por falta de confianza en el sistema judicial, porque viven con el agresor o por que fueron asesinadas.

Las cifras del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) en 2020, colocó al Estado de México como la entidad con mayo incidencia en el delito de violación, con mil 582; seguido de la Ciudad de México con mil 262; Nuevo León con 943; Chihuahua con 931, y Baja California con 762. Muchas de estas denuncias no llegan a judicializarse siendo una estadística más del sistema.

Hace unos días en medios de comunicación impresos estipulaban que en el 2020 las cifras respecto a homicios de mujeres habían incrementado con casos históricos que rebasaban cualquier cifra desde hace tres décadas, sin embargo, sabemos que esas cifras corresponden en muchas ocasiones a feminicidios que las autoridades no han clasificado correctamente.

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Las cifras

De acuerdo con la ONU las mujeres en nuestro país 19.2 millones de mujeres fueron sometidas en algún momento de su vida a algún tipo de intimidación, hostigamiento, acoso o abuso sexual. Las mujeres seguimos siendo más vulnerables a padecer alguna de estas expresiones pues, por cada 9 delitos sexuales cometidos contra mujeres hay un delito sexual contra hombres.

Todas estamos expuestas, como sociedad hemos olvidado considerar indispensable el consentimiento y hemos fomentado una cultura imperante de impunidad, justificando las conductas de los agresores y revictimizando a quienes desafortunadamente han padecido algún episodio de violencia sexual. El gobierno sin duda tiene la obligación de hacer eficaz nuestro derecho de acceso a la justicia sin revictimización por parte de las autoridades o instituciones que intervienen en la atención y seguimiento a las denuncias.

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Para cambiar la cultura machista y que tolera la violencia sexual en todas sus expresiones necesitamos aliadas y aliados dispuestos a poner en práctica la tolerancia cero, solo así podremos aspirar a tener un futuro libre de violencia. La violencia sexual no es normal, no esta bien y no es tolerable.

Las víctimas que enfrentan este abuso lo hacen desprotegidas pues, respecto al acoso sexual el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) indicó que el 66.8 por ciento de las agresiones contra las mujeres en la calle son de tipo sexual, además el 12.6 por ciento ha sufrido tocamientos o ha sido manoseada sin su consentimiento; el 0.6 por ciento ha sido violada en la vía pública y el 8.9 por ciento ha sido obligada a ver escenas o actos exhibicionistas. La calle y el transporte público resultaron ser los espacios en donde las mujeres son más acosadas, ocho de cada diez mujeres indicaron que el agresor habría sido un desconocido.

La falta de empatía como sociedad ha silenciado a las víctimas ya que la mayoría no suelen pedir apoyo pues, además de sobre llevar el trauma son cuestionadas, culpadas y juzgadas por quienes en principio creían eran su circulo o red de apoyo. Dejemos de educar a las mujeres a defenderse de cualquier agresión, mejor eduquemos a los agresores a no reproducir o fomentar conductas violentas.

Derecho por la Universidad Anáhuac México y Maestra en Derecho Constitucional y Derechos Humanos por la Universidad Panamericana, forma parte del grupo que atiende la AVGM por Agravio Comparado para el Estado de Guerrero. Es la Directora Ejecutiva de "Repara Lumea" contra la violencia de género A.C. y es integrante del Parlamento de Mujeres del Congreso de la Ciudad de México 2020.

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