El movimiento feminista se ha vuelto mediático por la energía mostrada en las manifestaciones. Pinta de vayas, intervenciones en murales, performances y tendederos han visibilizado esta cuarta ola del feminismo que ha tomado como suyos ciertas aportaciones artísticas, explicó en entrevista la artista y activista Lorena Wolffer.

El feminismo se ha articulado desde diferentes territorios, la academia, la calle, el arte, la música, los colectivos, que no necesariamente han trabajado de manera conjunta pero han aportado a la misma causa. Por ello, el Cieg antes Pueg ha lanzado el coloquio “GRRRRR Genero, Rabia, Ritmo, Rima, Ruido y Responsabilidad” que se llevará a cabo del 10 al 12 de noviembre de forma virtual.

Con este coloquio se busca responder “por qué lo hacemos con rabia, cómo generamos ruido, cómo somos responsables que son puntos de partida para hacernos preguntas y ver cómo trabajamos juntas”, apuntó Wolffer.

“Me parece importante hacernos estos cuestionamientos para que esta energía increíble que hay en las chavas y que es una respuesta a su entorno inmediato porque es algo que todas estamos viviendo, quizás ellas no conozcan esa genealogía pero sí son receptoras pero en ese sentido es importante que conozcan qué ha pasado antes para pensar en todas estas estrategias. No estamos en el mismo lugar en 1985 o en 1992 cuando se empezaron a perpetrar los primeros feminicidios en Ciudad Juárez es indispensable reconocerlo”, dijo la activista.

El movimiento feminista no es nuevo, uno de los primeros eventos de esta índole que se tienen registrado es el  Congreso Feminista en Mérida, Yucatán en 1916.

TENDEDERO FEMINISTA

Hablar en las esferas públicas de la violencia es un territorio ganando con un trabajo inmenso, apuntó Lorena Wolffer, ya que nombrar las violencias fuera de las esferas privadas era algo insólito. La artista hace un reconocimiento a los espacios ganados, “sí hemos conquistado el territorio ya no es algo necesario sino efectivo.

Wolffer apela a que el respeto por los derechos humanos no se puede pedir por favor ahora, por tal razón se hace estos planteamientos. La pregunta es “cuáles son las formas no es decir en este tiempo de lucha han pasado muchas cosas que han ido reconfigurando, o sea que necesariamente nos reconfiguran a nosotras y reconfiguran también, cómo responder al estado actual”.

“No podemos hablar de los feminismos en México sin el tendedero, y no necesariamente cada vez que se hace un tendedero hay una línea que lleva a la artista Mónica Mayer quien lo propuso, de donde emanan todos los tendederos”, explica Wolffer.

“El feminismo de calle donde las chavas todas juntas, donde nos unimos, tomando espacio que es fabuloso pero también es importante pensar de dónde viene, quiénes han estado antes, hay hablar del trabajo de Mónica”, apuntó Lorena.

El tendedero fue una propuesta artística de Mónica Mayer en 1978, donde invitó a 800 mujeres a completar la frase “lo que más me disgusta de la ciudad es..”. Es una de las primeras artistas feministas en México, cuando el arte feminista se miraba como “incorrecto”.

Con este coloquio se busca mostrar “cómo el arte ha logrado unir diversos enunciados y articulaciones para los feminismos pero no se le reconoce y se toma como el cierre de los eventos como cabaret feminista”, señaló Wolffer.

En el evento participara Mónica Mayer, junto con la activista feminista Cerrucha que ha documentado con fotografías el movimiento feminista, el grupo español O.R.G.IA. junto con Lorena Wolffer como comentarista en la mesa “Constitutivas: maquinarias feministas desde el arte” el 11 de noviembre a las 11:40 horas.

El coloquio trata de unir las diferentes luchas en la virtualidad, la diversidad a detalle se puede revisar en el cartel. Una de las favoritas de Lorena es la mesa 4 que deriva de la “R” de ruido y lleva el nombre “Desvíos y apropiaciones inapropiadas de la academia”, será el 11 de noviembre a las 15:20 horas.

Aquí puedes revisar el programa