La palabra madre proviene del latín mater y hace referencia a la mujer que ha tenido hijos o hijas. En México, desde 1990 hasta 2019 se han registrado más de 56 mil asesinatos de mujeres y durante 2020 se registró un promedio de 11 muertes diarias violentas de mujeres en el país. 

La violencia de género es la segunda pandemia que vive México. Durante años colectivos feministas, activistas, organizaciones de la sociedad civil, mujeres y madres buscan justicia por las mujeres víctimas de feminicidio en el país. Con mantas, fotos de sus hijas desaparecidas y  asesinadas las madres recuerdan la deuda histórica que tiene el gobierno federal en todos los espacios que les es posible. 

Marisela Escobedo 

En 2008, Rubí Marisol Frayre Escobedo fue asesinada a los 16 años. Su feminicida fue su ex pareja, Sergio Rafael Barraza Bocanegra quien fue detenido en Zacatecas y trasladado a Ciudad Juárez, donde confesó el crimen y señaló el lugar donde enterró los restos de Rubí. 

A pesar de su confesión fue liberado, sin embargo, Marisela Escobedo, madre de Rubí,  interpuso amparos y finalmente fue hallado culpable. Barraza Bocanegra fue prófugo de la justicia hasta que en 2012, el gobernador César Duarte dio carpetazo al caso. 

Marisela Escobedo fue asesinada frente al Palacio de Gobierno de Chihuahua, cuando exigía justicia por el feminicidio de su hija Rubí. 

Araceli Osorio 

Lesvy Berlín Rivera Osorio fue estrangulada en una caseta telefónica en Ciudad Universitaria a los 22 años el 3 de mayo de 2017. Su caso fue tratado por la procuraduría capitalina como suicidio, sin embargo, su madre, Araceli Osorio no lo acepto. 

Araceli demostró que su hija fue víctima de feminicidio y el 10 de abril, casi un año después del crimen, un juez vinculó a proceso a Jorge Hernández Gonzáles, novio de Lesvy, por el delito de feminicidio agravado, con el que recibiría una pena de 20 años en cárcel. 

Araceli, junto con organizaciones civiles impulsó la creación de la primera Fiscalía Especializada para la Investigación del Delito de Feminicidio en la capital. 

Irinea Buendía 

Mariana Lima fue asesinada en 2010 por su esposo Julio César Hernández Ballina, un policía judicial del Estado de México. Las autoridades habían afirmado que Mariana se había suicidado, pero su madre Irinea rechazó esa versión, pues el cuerpo de su hija tenía golpes. 

Irina acudió por cinco años a cada Ministerio Público en busca de alguien que investigara el caso de su hija como feminicidio y hasta 2015 la Suprema Corte de Justicia de la Nación ordenó reabrir su caso. 

Mirna Covarrubias 

Daniela fue asesinada a los 15 años en Montemorelos, Nuevo León, el 6 de octubre de 2016. Diego, un ex compañero de clases la atacó con un cúter y abandonó su cuerpo en la vía pública haciendo pasar el crimen como un asalto. 

“Él se declaró culpable y sí lo sentencian por feminicidio”, dijo Mirna para ADNPolítico, pero Diego fue trasladado a la Ciudad de México y terminó su condena. 

Miran creó la organización Quiero Vivir sin Violencia Dany Jimenéz, AC. y busca la manera de honrar la memoria de su hija previniendo que más mujeres sufran lo que sufrió Dany. La asociación da pláticas entre adolescentes sobre violencia en contra de la mujer. 

"Mientras existan la impunidad y la corrupción, va a seguir pasando y cada día está peor. Pasa porque lo haces y no te atrapan o no te juzgan, y si te juzgan pues nada más te dan dos años", advirtió Mirna.  

Con información de Expansión Política