La segunda audiencia pública en la investigación de la Cámara baja para abrir un juicio político al presidente estadounidense, Donald Trump, arrancó  con la comparecencia de la exembajadora en Ucrania, Marie Yovanovitch, que ha acusado al mandatario de abuso de poder.

Durante la comparecencia de la diplomática, el presidente estadounidense Donald Trump no se limitó en agredirla a través de Twitter.

El testimonio de la ex embajadora de Ucrania podría convertirse en pieza clave de las críticas al carácter de Trump. A los demócratas les interesa que explique a qué se refería cuando dijo que se sentía amenazada por el presidente, luego de que éste dijera que ella “no traería nada bueno” y “que iba a pasar por algunas cosas”.

Ante los comentarios de Trump, Yovanovitch los tomó como un efecto de intimidación, sus mensajes significan “una intimidación en tiempo real”.

El estilo narrativo de Trump yace en las amenazas. Al parecer se tomarán como un recurso para el proceso del impeachment. Adam Schiff, presidente del Comité de Inteligencia del Congreso, señaló “algunos de nosotros aquí nos tomamos muy, muy en serio la intimidación de testigos”.

Acusaciones contra Trump

Donald Trump ha sido acusado 25 veces por acoso sexual. Y él ha negado cada una de las acusaciones.

Las agresiones sexuales de Donald Trump van desde acosos como besos inapropiados hasta abuso sexual. La primera acusación se registra desde 1970.

 

El republicano ha negado estas acusaciones diciendo que “no es su tipo”, “no sería su primera opción”.

El último caso fue la acusación de la columnista de la revista Elle, Jean Carroll, quien mencionó que tal vez jurídicamente no pueda culpar a Trump por haberla violado, pero sí puede acusarlo de difamación sobre lo que la hizo sufrir desde que lo acusó públicamente.

Expresiones misóginas

No solo ha cometido acoso y abuso sexual, también ha ejercido violencia verbal hacia las mujeres. Se ha referido a ellas como objetos, carentes de cualquiera capacidad de expresión.

Donald Trump ejerció la violencia verbal para agredir a Clinton durante campaña, sobajándose a hacer referencia a su vida sexual. El valor que Trump le da a las mujeres radica en su belleza “¡Mira esa cara”, le dijo a Carly Fiorina, una empresaria estadounidense.

Las agresiones también han alcanzado a las periodistas y actrices, a quienes sobaja con su dinero y poder. Para el mandatario, ser dueño de Miss Universo lo legitima para calificar a las mujeres.

Sin embargo, sus agresiones no han limitado a Nancy Pelosi, quien encabeza el impeachment ni a limitará a Yovanovitch, cuya declaración logrará fortalecer el proceso de destitución de Trump.