Antes de 1953 era impensable que una mujer votara y fuera votada para ocupar algún cargo público en el país. Luego de 66 años de lucha por los derechos políticos de la mujer, por primera vez este jueves, la Mesa Directiva de la Cámara Alta del Congreso de la Unión, coincidió al ocuparse completamente con siete mujeres. "Esto era imposible de observar en otra etapa", dijo la senadora Beatriz Paredes.

La foto donde aparece la senadora vicepresidenta, Guadalupe Munguía; la secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; la senadora presidenta, Mónica Fernández Balboa; las senadoras secretarias, Katya Ávila, Martha Fernández Sánchez y Citlalli Hernández; y la senadora Beatriz Paredes, en la tribuna, se da en el marco de la comparecencia de Sánchez Cordero, durante la sesión ordinaria en el Senado de la República.

La imagen de las mujeres refuerza el lema “LXIV Legislatura de la paridad de género”.

Desde hace varios años se han impulsado acciones para que los partidos políticos postulen más mujeres a integrar el Congreso. Según el acuerdo presentado por la Junta de Coordinación Política al inicio de la Legislatura, en 2002, se fijó una cuota obligatoria para que los partidos políticos asignaran 30 por ciento de sus candidaturas a las mujeres, posteriormente, aumentó a 40 por ciento en 2008, y en 2014 se estableció el principio de paridad de género en la Constitución Política para empezar a aplicarse en 2015. Fue hasta esta legislatura cuando se logró una paridad de género en los escaños de la Cámara de Senadores. La diferencia entre hombres y mujeres, es mínima.

Hace dos décadas, sólo Suecia, Noruega, Finlandia y Dinamarca, tenían más del 30 por ciento de representación parlamentaria femenina.

Actualmente Bolivia, Granada, Nicaragua, Costa Rica, Cuba y México, están dentro de los primeros 10 congresos con más de 40 por ciento de féminas en su integración.

La lucha por los derechos políticos de las mujeres en México ha sido histórica, y aunque en la Constitución de 1917 se negaron los derechos políticos a las mujeres (la mitad de la población), el sufragio femenino se mencionó por primera vez desde la Revolución Mexicana, en 1910, cuando un grupo de féminas que se hicieron llamar “Las Hijas de Cuauhtémoc” se opusieron a la dictadura de Porfirio Díaz y pidieron la inclusión de las mujeres en la política.

bl