En México las niñas y adolescentes no están seguras en casa, tampoco en las calles, ni en las escuelas. El machismo les ha robado el derecho a una infancia libre de violencias.

El Estado tiene responsabilidades con la infancia, debido que firmó un acuerdo para proteger los derechos fundamentales de las niñas y los niños: derecho a la alimentación, derecho a la educación, derecho al agua, derecho a la salud, derecho a la identidad, derecho a la protección; sin embargo, el compromiso no se ha visto reflejado en las calles.

México ha sido un país que ha criado a sus niñas y niños en un contexto misógino y patriarcal. Por años hemos atendido la educación y la crianza a partir de roles de género, este panorama ha dejado a las niñas sumidas en contextos de pobreza, marginación y violencia.

De acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en México habitaban más de 8 millones 260 mil 881 niñas menores de 14 años. Según estos datos, el 26% viven en zonas rurales y el 74% en zonas urbanas, el 42.8% de las mujeres de 15 a 17 años son analfabetas, mientras que al menos 102 mil 575 niñas de entre 6 y 11 años realizan algún tipo de trabajo.

Las cifras son aterradoras, pero aún existe un sector de la población infantil que sufre discriminación, violencia y segregación, como lo son las niñas y adolescentes que tienen como hogar las calles, cifras de 2018 revelan que  poco más de 40 mil niñas viven en situación de calle, invisibilizandolas de cualquier estadística e incrementando el nivel de vulnerabilidad en problemas de salud, educación, violencia, etc., es decir; marginándolas radicalmente de una vida de “derechos plenos”.

 

La Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH, 2019), 9 de cada 10 mujeres de 15 años o más han experimentado violencia emocional, seis han sufrido violencia económica, cuatro han sufrido violencia física y dos violencia sexual; el 18% dijo haber sufrido violencia en su infancia, el 32.1% violencia física en la niñez y el 9.4% violencia sexual.

El Gobierno de México señaló que una de cada cinco niñas se casa antes de los 18 años, mientras que el 46% de las niñas y adolescentes inician su vida sexual sin anticonceptivos ni información, llegando a registrar hasta 34 casos de embarazo infantil y juvenil diariamente, representando un problema de salud pública que no ha sido atendido.

El feminicidio infantil ha sido una de las realidades más duras en los últimos años, se estima que al menos uno de los 10 feminicidios ocurridos en el país, corresponde a una niña.

Ser niña en un país como el nuestro no es fácil, las estadísticas señalan que la probabilidad de convertirte en víctima es más alta, hoy nos preguntamos ¿cuántas niñas están encerradas con sus agresores? Pero la pandemia más grave es la que enfrentamos las mujeres en todas las etapas de nuestras vidas, el machismo.

Depende de todas las personas que esta realidad sea diferente, que las guías de comportamiento y las estructuras sociales sean replanteadas para heredar un mundo futuro mejor, una realidad más justa para niñas y niños por igual.

*Xóchitl Arzola, activista y presidenta de Mujeres en Cadena AC.

@Xochitl_Arzola