La artista visual mexicana Natalia Ramos ha trabajado como directora de arte, psicoterapeuta en el equipo de Esther Perel, e ilustradora llegando a publicar en The New York Times. Recientemente se ha dedicado a la escultura, desarrollando piezas para exposiciones en Guadalajara y la Ciudad de México, y ahora enfocada en el desarrollo e investigación de su proyecto Maremoto. 

Foto: Obra de Natalia Ramos 

El trabajo de Natalia se caracteriza por el uso de figuras abstractas y orgánicas que pueden representar cuerpos, flores, pájaros, o nubes. Sus procesos de creación exploran las formas, composición e interacción de los objetos, los humanos y el contexto. Su uso de materiales es diverso en su trabajo pero representativo y único como cáscaras de huevo, bolillos, tortillas, tierra de Zacatecas o cerámica. 

Su proyecto Jardín se presentó en el espacio de Ciudad de México en Guadalajara 90210, el cual se centró en crear flores futuristas, nubes, dientes, etc, provocando un contraste en sus piezas tridimensionales con los materiales que utilizó: acero y materiales orgánicos. 

Foto: Obra de Natalia Ramos 

“Específicamente como mujer a veces siento que se necesita alzar la voz aún más fuerte para lograr lo que queremos”, dijo Natalia para Cool Hunter. También describió la importancia de tener un trabajo personal sólido como artista y humano para enfrentar lo caótico, expansivo y libre que es el mundo creativo. 

Actualmente Natalia Ramos trabaja en piezas para algunas exposiciones colectivas, una de ellas se inaugurará próximamente en la plataforma de Mauricio Cadena y lleva por nombre Llano. 

Foto: Obra de Natalia Ramos

Con información de Cool Hunter