Cuando vas a una clínica a practicarte un aborto, muchas veces sólo te dan una pastilla y te mandan a tu casa, ese proceso te lo puedes ahorrar, si llegas con una acompañanta de aborto, cuentan las feministas de la colectiva Crianza feminista.

“Para llegar a una clínica te piden prueba sanguínea y un ultrasonido. A veces te piden llegar a las 4 a.m., para hacerlo debes pagar un taxi. Si eres madre ¿quién va a cuidar a tus hijos? S trabajabas a las 8 en una fábrica, ya no puedes ir, te van a descontar el día”, comenta Alice, acompañanta de aborto para La Cadera de Eva.

El aborto en México es legal pero no gratuito. “Las razones que no vayan a una clínica es que el aborto es solo legal, no quiere decir que haya una clínica, hay que trabajar en la política pública para otorgar ese servicio, en Oaxaca aún no hay ese servicio. Con nosotras llegan mujeres de todo el país y de América Latina”, cuenta Alice.

“El poder practicarte un aborto en una clínica deja ver toda una serie de precariedades que te dejan en una situación vulnerable. Pero si llegas con una acompañante y te dice que con 300 pesos puedes interrumpir tu embarazo mientras estás en tu casa, mientras estás cuidado a tus hijos, es lo más adecuado y seguro; es el mismo proceso que es llevado en una clínica pero en tu casa”, comenta Alice.

Tanto Alice como Dafne, ambas integrantes de la colectiva Crianza Feminista  apelan a normalizar el aborto y dejarlo de ver como un proceso difícil.

“Cuando van a interrumpir su embarazo, les digo que se descarguen una peli antes, se preparen algo rico de comer y se acompañen de sus hijos, si así lo desean, ya que tienes movilidad y puedes ir al baño”, cuenta Alice.

Las acompañantas incluso te asesoran en qué llevar si quieres practicarte el aborto en una clínica, te dice qué procedimiento hasta te asesoran en temas burocráticos y tipos de estudios que debes realizarte, comenta Dafne.

Durante la pandemia, mujeres que habían tenido un embarazo deseado decidieron interrumpirlo que la contingencia les causó incertidumbre. Aunque los reportes de salud señalaron que los abortos en clínicas redujeron, la labor de las acompañantes aumentó.

El servicio de Interrupción legal del Embarazo en la pandemia se redujo un 22%, de acuerdo con el portal Datos Abiertos. Por lo que mujeres de diversos estados buscaron redes de acompañamiento. En el caso de la colectiva Morras Help Moras pasaron de nueve a 45 peticiones al día. La red Marías Acompañantes, de Toluca, Estado de México, creció de una solicitud diaria a 17. Y Mi Aborto atiende cerca de 70 mensajes al día, reportó el portal Corriente Alterna.

¿POR QUÉ ME CONVERTÍ EN ACOMPAÑANTE  DE ABORTO?

Crianza feminista es una colectiva de mujeres y madres que crían, surge ante una necesidad de manifestarse un 8 de marzo del 2018 junto con sus hijos. En aquel entonces, Alice pidió en un grupo de Facebook una carriola para ir a la marcha, así algunas madres se acercaron a ella y crearon el primer contingente de madres que asistían con sus hijos y después decidieron crear una colectiva.

“Uno de los objetivos del colectivo es que las mujeres puedan decidir sobre sus cuerpos y cómo quieren llevar o no sus embarazos”, apunta Dafne.

En el caso de Alice, el convertirse en acompañanta de aborto se fue dado. Todo inició por un proceso propio. “Me di cuenta de los recursos tan limitados que había pese a pertenecer en redes feministas, no había alguien que me acompañara en ese proceso. Después una amiga me pidió información, el acompañamiento se volvió presencial y así me fueron pasando a más contactas, pasé de los manuales de acceso libre a capacitaciones. Fue una semana entera de capacitación”, cuenta.

Las acompañantes de aborto coinciden en que un aborto clandestino no tiene que ser inseguro. La diferencia de acuerdo con Dafne es que las acompañantes tienen conocimiento y conocen el procedimiento. “Muchas veces en las clínicas se hacen procedimientos insalubres y se ejerce violencia psicológica”, señala.

Algunas de las acompañantes se valen de la guía para un aborto seguro que elaboró la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Alice, acompañanta de aborto, está en constante formación, el último taller lo tomó con “Aborto legal México”.

“Acompañar es amor y un acto de cuidado, como acompañantas nos convertimos en una herramienta de transformación entre un aborto inseguro, legal y mortal a uno digno, autónomo, amoroso y respetuoso. Hay ocasiones que para poder controlar una hemorragia, sabemos cómo pararla, qué mujeres no son aptas para ese procedimiento”, cuenta Alice.

Dafne quien administra la página de Crianza feminista señala que dentro de la colectiva hay varias profesionales que acompañan a las mujeres que desean practicarse un aborto.

“Hemos tenido casos de mujeres que han abortado con médicos y sus procesos han sido tortuosos y mal ejecutivos. Es sorprendente cómo los médicos no conocen el cuerpo de las mujeres”, señala Dafne.

Una de las labores de la colectiva es compartir información para que las mujeres tengan alternativas, también coinciden con las consignas de las aborteras “en que antes del aborto, la educación sexual”.