La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum asistió a la develación de cuatro estatuas de mujeres revolucionarias que aún no tenían una presencia física por las calles de la ciudad. 

Para la mandataria capitalina contar con una referencia visual de mujeres que formaron parte de los movimientos sociales en México es fuente de inspiración para las niñas, jóvenes y mujeres que transiten por la metrópoli. 

"Lo mejor que puede ocurrir es que las niñas pasen y se reconozcan entre las heroínas", aseguró durante la primera develación. 

Ahora es turno de Carmen Serdán, Juana Belén Gutiérrez, Matilde Montoya y Sara Pérez.

¿PERO QUIÉNES SON ESTAS CUATRO REVOLUCIONARIAS?

Carmen Serdán fue una colaboradora importante durante la campaña antirreeleccionista maderista que se llevó a cabo en Puebla, en donde fundó la Junta Revolucionaria de dicho estado. Serdán Alatriste fue enfermera de vocación.

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(Fotografía: Especial)

Juana Belén Gutiérrez fue colaboradora de "El Hijo del Ahuizote" un periódico-revista satírica que a través de su ejercicio se oponía al régimen de Porfirio Díaz.

Durante la época porfirista muchos periodistas y medios de comunicación fueron víctimas de censura por el desagrado que le provocaba a Díaz la crítica; a Belén le tocó ser encarcelada un sinfín de veces por su lucha a favor de los mineros.

La Dra. Matilde Montoya fue la primera médica en México que logró graduarse en tiempos adversos para las mujeres, quienes no tenían los mismos derechos y acceso a la educación que los hombres. La doctora logró que la aceptaran en la escuela de Medicina a pesar de que eso no estaba permitido.

"Se enfrentó al régimen de Porfirio Díaz para graduarse, pues los estatutos de la Escuela Nacional de Medicina impedían que las mujeres realizaran el Examen Profesional para titularse", comentó la secretaria de Salud de la CDMX, Olivia López Arellano.

Sara Pérez Romero organizaba clubes antirreeleccionistas en el territorio nacional y a pesar de que ha sido nombrada como "la esposa de" Francisco I. Madero, su labor a la par de Madero fue de ayuda social. Presidió un club llamado Caridad y Progreso.

En 1911 fundó junto con Elena Arizmendi la "Cruz Blanca Neutral por la Humanidad", una organización destinada a prestar auxilio a los heridos en batallas y víctimas de accidentes.

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