Los pezones son parte de las zonas erógenas que las mujeres pueden estimular para tener sensaciones placenteras e incluso, lograr orgasmos. Lo anterior es posible ya que los pezones cuentan con cientos de terminales nerviosas que al ser tocadas suavemente por las manos, labios o lengua, provocan sensaciones de éxtasis.
Como cualquier otra estimulación para lograr un orgasmo, se requiere práctica y experimentación. Tal vez para tu cuerpo, los pezones sean la clave para lograr sensaciones orgásmicas. Lo mejor es que puedes llevar a cabo este método con tu pareja o en solitario.
Primero necesitas estar relajada. Establece un ambiente que te parezca calmado; tal vez una habitación con iluminación tenue, velas aromáticas y música lenta, pueda ayudar. También, la posición es algo muy importante, recuéstate en un sitio cómodo, donde los músculos no se tensen.
Después viene la parte más importante: imaginación y experimentación. Visualiza situaciones excitantes, es momento de dejar volar tu imaginación. Como cada cuerpo es diferente, puede que las caricias lentas no sean lo tuyo y necesites más fuerza, o al contrario, por eso, la clave para llegar al éxito es aprender a diferenciar qué te gusta y qué te causa incomodidad.
Existen diversos productos que, se cree, ayudan a crear nuevas sensaciones: aceites, lociones, pinzas o vibradores realmente pueden aumentar el placer.
Deja que sus manos exploren toda la zona hasta encontrar los movimientos indicados que te lleven al orgasmo.