Una nueva pugna entre grupos de narcomenudistas se desató en CDMX.
Es protagonizada por “El Fabián” y Los Villafán, una familia relacionada con la venta de droga en Tepito desde hace tres décadas.
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De acuerdo con informes de la Procuraduría capitalina (PGJ) y de la Secretaría de Seguridad Pública (SSC), todo comenzó con el atentado que sufrió Carlos Raúl Villafán hace quince días en Circuito Interior.
Acorde con el expediente FAZ/AZ-4/UI-2S/D/01328/02-2019. Villafán sobrevivió, pero su esposa fue asesinada.
El domingo pasado, a quien se le atribuyó la agresión, “El Fabián”, fue baleado en la Gustavo A. Madero e internado en un hospital, de donde se reportó fuera de peligro.
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Según las pesquisas, él encabeza un nuevo grupo delictivo autodenominado La Ronda 88, que hace referencia a una calle en la colonia Peralvillo.
El miércoles pasado, agentes de Inteligencia de la SSC implementaron un operativo en el Calzada de la Ronda, luego de que observaron a cuatro sospechosos manipulando droga.
Allí fue detenido José Óscar T., de 39 años de edad, quien tenía puesto un chaleco antibalas y un rifle de asalto calibre .223 como el que usan los policías.
Asimismo, se le encontraron 500 gramos de cocaína y 50 dosis de cristal. Fue arrestado también David israel M., de 31 y Omar Alejandro R., a quien se le incautaron 46 bolsas de cristal y mil 600 pesos en efectivo.
La última persona detenida fue Valeria Estefan M., hermana de David Israel, a la cual se le decomisaron 50 bolsas de mariguana, consta en el expediente FCI/ACI/UI-3C/D/00127/04-2019.
Todos presuntamente forman parte de la banda de “El Fabián”, un ex convicto de entre 35 y 45 años de edad, que solía vivir en La Ronda.
Este supuesto narcomenudista presumía nexos con La Unión y ahora está enemistado con Los Villafán por el control de la venta de droga en la calle Peralvillo, en Tepito.
Las indagatorias refieren que tres jóvenes baleados antes del atentado a Villafán fue la “gota que derramó el vaso”, aunque no fue sino hasta la agresión contra Carlos Raúl Villafán que la pelea escaló.
Según los que informantes refirieron a agentes de la Procuraduría y la SSC, los Villafán se unieron a Óscar “El Lunares”, otro cabecilla de dealers asentado en el Barrio Bravo.
A él se le ha acusado no solo de distribuir estupefacientes, sino de ordenar varios homicidios y extorsionar a comerciantes.
Por ello, las autoridades capitalinas están en alerta para evitar una seguidilla de vendettas como ocurrió hace algunos meses con La Unión y Fuerza AntiUnión.
Cifras de la PGJ indican que en marzo se registraron 10 asesinatos relacionados con bandas delictivas en la Cuauhtémoc, 4 más que en febrero.