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Esta es la contracara del progresista Robert Kennedy

Mujeres, depresión y un rol secundario permearon en la vida del senador Kennedy

Escrito en MUNDO el

Considerado como uno de los políticos más progresistas estadounidenses en la década de los 60s, Robert Kennedy fue la mente brillante detrás del éxito de su hermano, el expresidente estadounidense John F. Kennedy.

Tras el asesinato de su hermano, Robert emprendió su candidatura con el Partido Demócrata para la presidencia, pero la suerte de los Kennedy estaba echada.

Al igual que John, Robert murió asesinado de un tiro. A 50 años de su muerte te contamos la contracara de quien fuera reconocido por su preocupación a las minorías.

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LA MUERTE DE MARILYN MONROE

En los archivos de John F. Kennedy se encontró una carta de su hermano Robert que señala que había tenido encuentros sexuales con la famosa actriz Marilyn Monroe.

También, señala que Robert delineó un plan para matar a Monroe, de manera que pareciera un suicidio.

Sin embargo, las investigaciones demuestran que Robert se encontraba en San Francisco cuando la actriz falleció, por lo que era imposible que pudiera hacerlo.

LA SOMBRA DE SU HERMANO

Al morir Robert se inclinó hacia su amigo Kenny O’Donnell, que por primera vez sentía que se había quitado la sombra de su hermano.

Robert vivió como personaje secundario, primero detrás de las campañas campañas políticas de John y después, como fiscal general.

UN HOMBRE INFIEL

Robert Kennedy era un hombre infiel. Según el periodista Larry Tye, en una entrevista que le hizo a su esposa, Ethel Skakel, esta confesó que sabía de las múltiples infidelidades de su marido, sin embargo, lo único que le interesaba es que volviera a casa.

Además, confesó al periodista que siempre supo en donde se estaba metiendo al unirse a la familia Kennedy, motivo por el cual decidió guardar silencio en relación a las relaciones amorosas de Robert con las actrices Kim Novak y Lee Remick o con la cantante Claudine Longet.

TRÍO AMOROSO

Durante muchos años se habló de una relación amorosa entre él, su hermano John y  la famosa  actriz  Marilyn Monroe.

La versión que corría es que los hermanos tenían un romance con Monroe de manera simultánea.

LA DEPRESIÓN

Larry Tye logró documentar que después del asesinato de su hermano John, Robert Kennedy se hundió en una enorme depresión.

Debido a su estado de ánimo, con frecuencia acudía al cementerio en donde estaba sepultado su hermano y adoptó el hábito de vestir la ropa de John.

JACKIE KENNEDY

Robert Kennedy entabló un estrecho vínculo con la viuda de John, Jacqueline Kennedy.

El FBI afirmaba que entre Robert y Jackie había algo más que una simple amistad, mientras que Ethel Skakel decidió guardar silencio en relación al tema, según relata Tye.

PREMONICIÓN

Parece que Robert sabía su destino. Dos años antes de su muerte dijo a un periodista de la revista Life que no sabía si estaría vivo para entonces las elecciones presidenciales de 1972.

LAS DUDAS SOBRE SU MUERTE

La versión oficial fue que Robert Kennedy, de 42 años, paseaba por un pasillo del Hotel Ambassador de California, tras haber dado un discurso, cuando un hombre salió de entre la multitud  y disparó.

De las cuatro balas disparadas, tres impactaron en el cuerpo de Robert y una de ellas terminó alojada en su cerebro apagando la vida del candidato del pueblo.

 El estudio de las autoridades señaló a un posible asesino solitario: Sirhan Bishara Sirhan, un joven árabe de 24 años.

El árabe  traía una pistola modelo Iver Johnson, Calibre 22, Serie, de ocho proyectiles, sin embargo no se ha podido explicar  por qué los impactos vinieron de atrás, cundo el supuesto asesino encaro a Robert Kennedy.

Asimismo, no se pudo explicar cómo es que el joven árabe disparó a 60 centímetros de Robert cuando la bala le quitó la vida fue disparado entre 2 y 7 centímetros de su cabeza, según registraron las pruebas de pólvora.

También se ha manejado la teoría de dos pistolas la noche del asesinato del senador.

Este dato señala que hubo dos armas similares en modelo y calibre, una de ellas desapareció antes de que la Policía de Los Ángeles iniciara la investigación.

Sin embargo, las balas extraídas del cuerpo de Kennedy no coinciden con las huellas de los proyectiles del arma del árabe.

Según investigaciones alternas, se trató de una conspiración y  la noche del asesinato de Robert se dispararon dos pistolas al mismo tiempo desde la cocina del Hotel Ambassador.

cbl