La única limitante en la imaginación de nuestras infancias es la sociedad adultocentrista y, uno de los antídotos se encuentra en la lectura. Una lectura que empuje, alimente, sane y permita la construcción de una mejor realidad futura. La importancia de que las niñas posean libros feministas es fundamental para crecer con libertad, rebeldía y con un fuerte sentido de qué es lo que desean ser: personajes principales de su historia, guerreras, independientes y labradoras de su camino a través del amor propio, el conocimiento y la autonomía.
Los libros que poseen un pensamiento feminista y reivindicador de lo que considerado como femenino, son una herramienta poderosa que podemos brindar a las niñas y niños para enfrentarse a un mundo que coloca a las mujeres en una posición de vulnerabilidad y feminidad, de princesas que necesitan ser rescatadas. Es así que estos cinco libros infantiles y feministas no son sólo entretención, sino también, resistencia.
Desde una niña pequeña con pájaros en la cabeza hasta los mandatos de género que nos dictan lo que representa ser una buena niña que no comete errores, estos son 5 cuentos feministas que rompen con todo paradigma, que ofrecen ilustraciones y aprendizajes maravillosos para recordarle a las niñas que ellas también son rebeldes, poderosas y amadas.
Malas Mujeres de María Hesse
Personas adultas y adolescentes conocen un repertorio de “Malas mujeres”, ya que en la historia de la humanidad así se nos ha contado que fueron, sin embargo, este libro reivindicará todo lo que se conoce sobre estas mujeres que fueron icónicas y les explicará a las infancias que en realidad, las mujeres ni están tan locas ni fueron perversas.
¿Qué tal una Yoko Ono que no es la peor persona por separar a The Beatles?, sino más bien, una mujer fuerte, independiente, una grandiosa artista y una de las creadoras que le dieron identidad a los míticos Beatles. O tal vez, una “Juana la loca” que de “loca”, no tenía nada.
Todos estos cuentos, permiten a las infancias a no crecer con una idea androcéntrica de las mujeres que, históricamente, han sido olvidadas y castigadas socialmente por su rebeldía y talento.
En un mundo que ha sido contado por el hombre, “Malas Mujeres” hace frente y nos cuenta historias reales de quiénes fueron estos personajes, sus aportaciones al mundo y que también, se convierten en inspiración para millones de niñas que buscan en quién creer o en quién convertirse. La representación es tan importante en esta clase de obras que permite a las infancias saber que pueden ser una Frida Kahlo rebelde o una Medusa valiente; no más mujeres estancadas en su rol de género de pasividad y afabilidad, pero sí, más niñas que también pueden son talentosas en cualquier rubro, que pueden levantar la voz, luchar, ser decididas y alcanzar sus sueños.
“No estaban locas, ni eran perversas ni malos ejemplos para otras. Si acaso fueron mujeres valientes, fuertes, atrevidas, decididas. Rompedoras. Y si las llaman malas mujeres que se lo llamen; las paredes han caído y nosotras ya no estaremos ahí para oírlo”
El futuro es femenino de Sara Cano
¿Alguna vez te diste cuenta de que, en los recreos, los niños ocupaban todo el patio para jugar y las niñas apenas se mantenían en un rinconcito?, al igual que esta pregunta, surgen ocho más que dan inicio a “El futuro es femenino”, una recopilación de cuentos cotidianos que nos hace preguntarnos cómo funcionan los roles de género y porqué actuamos de cierta manera.
A través de un trabajo impecable de ocho ilustradoras para cada cuento, esta obra es divertida pero también, pone sobre la mesa algunos cuestionamientos interesantes para chicos y grandes. Aborda desde la identidad con un niño que no sabe cómo explicarle a sus padres que su corazón es de una niña, hasta una pequeña reflexionando porqué no pudo decidir sobre las perforaciones en sus orejas.
Todos los cuentos si bien, son aleccionadores, también abren mucho la oportunidad a la imaginación y acercan a las infancias a conocer más de diversidad, paridad de género, el respeto a los cuerpos ajenos y sobretodo, las invita a preguntarse, ¿cómo sería el futuro si fuera femenino?
Yo voy conmigo de Raquel Díaz Reguera
Este cuento infantil toca puntos importantes de la identidad, el ser fiel a nuestra personalidad y a luchar contra todo precepto de la feminidad que se nos instaura desde la infancia.
Sol es una niña que siempre trae nidos de aves en la cabeza, su cabello está desaliñado y no utiliza grandes moños rosas en su cabeza, su secreto más íntimo es el amor que esconde por Martín, un niño que parece nunca notarla.
Es así, que la pequeña Sol decide hacer algunos cambios en su aspecto y en su personalidad para poder acercarse a Martín, sin embargo, estas acciones sólo la harán sentir una profunda tristeza porque ya no escucha a los pajaritos que se posaban en su cabello.
¿Se enfrentará a su salón de clases que la volvió invisible?, ¿qué pensará Martín?, tal vez, son preguntas que poco a poco, a Sol le dejarán de importar.
“Yo voy conmigo”, está escrito e ilustrado por Raquel Díaz Reguera y si existe una línea de sus cuentos, es que en la mayoría, sus protagonistas son chicas valientes en busca de su identidad y la amistad femenina, por lo que cualquiera de sus obras, se convierte en una excelente opción para añadir a la biblioteca de los infantes… y los no tan infantes.
La niña que nunca cometía errores de Mark Pett
Beatriz tiene sus calcetines acomodados por colores en su cajón, se pone siempre los zapatos en orden y sí, antes de salir de casa, siempre limpia su habitación y deja la cama impecable; Beatriz es perfecta.
Sus padres, maestros, amigos y toda la ciudad, la reconoce porque jamás comete errores, todo lo que hace siempre sale bien y la premian por ello: “así es como una niña debe comportarse”.
En comparación, su hermano Carlos es todo lo contrario, toca el piano con los pies, pinta con los dedos, brinca de un lado a otro y sus calcetines son desiguales pero a él, no le importa mucho porque es un niño travieso al que se le permite hacer cualquier locura.
“La niña que cometía errores” es un cuento que posee ilustraciones enormes del tamaño de la hoja, entretenido y que permite a las niñas acercarse a la historia de Beatriz y cómo, todos podemos tener un mal día donde cometemos errores, que las niñas no siempre deben ser perfectas y que a veces, necesitan tocar el piano con los pies, tropezarse y lidiar con el fracaso con amor, paciencia y entereza.