El alcalde de Nueva York, Eric Adams anunció que la ciudad comenzará a donar pastillas abortivas en distintas clínicas de salud sexual ubicadas en el Bronx, esto debido a que la ciudad será un “refugio” para todas aquellas mujeres y personas con la capacidad de gestar que busquen interrumpir un embarazo ya que muchos estados del país están restringiendo el derecho a la libre interrupción del embarazo.

Las cuatro clínicas que recibirán la donación no exigen a las pacientes un seguro médico, lo que hace que las mujeres y personas con capacidad de gestar que se encuentran en situaciones vulnerables y no pueden pagar un seguro médico tengan acceso a un aborto seguro y, de acuerdo con fuentes municipales, estas clínicas tienen la capacidad de brindar hasta 10 mil píldoras anuales bajo estas condiciones.

Por otra parte, la Agencia de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) publicó el pasado 3 de enero una nueva normativa sobre la mifepristona (uno de los medicamentos usados para abortar de manera segura) que permitiría a las cadenas de farmacias, como CVS o Walgreens, venderlas en sus establecimientos.

Si bien estas farmacias sólo venderán el medicamento con receta médica que cumpla ciertos requisitos, la venta en estos lugares permitirá expandir el acceso al aborto con medicamentos en los estados donde aún no se ha eliminado la protección constitucional del aborto.

¿Por qué se hizo ilegal el aborto?

El pasado 24 de junio del año 2022, la Corte Suprema de Estados Unidos anuló la histórica sentencia conocida como Roe vs Wade, que desde 1973 garantizaba el derecho al aborto en el país. Con esta decisión, respaldada por la mayoría de jueces conservadores del tribunal por 5 votos contra 4, se abrió el camino para que el aborto pueda ser ilegalizado en los estados que así lo decidan.

Debido a esto, las mujeres y personas con la capacidad de gestar que tomen la decisión de abortar tendrán que viajar a los estados donde no sea ilegal este procedimiento, pero la situación económica de muchas de ellas no lo permitirá, es por ello que la población comenzó a donar dinero a asociaciones y clínicas independientes para poder financiar este procedimiento.

Si bien esta decisión de la Corte Suprema coarta la libertad para decidir de las mujeres y personas con la capacidad de gestar, aún existen distintas clínicas independientes que continuarán acompañando en los procedimientos. Las clínicas independientes han realizado cerca del 60% de los abortos realizados en los EE.UU., estados como Mississippi, Dakota del Norte, Virginia Occidental y Wyoming, y aparentemente, Alabama, aún cuentan con estos servicios.