Los influencers han cambiado la manera en la que entendemos el uso de las plataformas digitales y el entretenimiento. A través de la creación de contenidos, muchas de estas influencers han logrado destacar como personas con poder mediático y que pueden influir al momento de hacer una denuncia, sobre todo si se trata de violencia de género. 

Tal es el caso de la influencer conocida como Maire Wink, famosa por sus videos en YouTube de comedia, quien a través de una iniciativa por Instagram de preguntas titulada “Confesión turbia de psicólogos”, la influencer comenzó a leer las respuestas de muchos de sus seguidores.

El resultado fue caótico, pues dejó leer muchas historias de terror por las que atravesaron los y las consultantes con quienes se dicen psicólogos. Pero lo que llamó la atención es que, quienes eran mayormente acusados eran varones que hicieron insinuaciones sexuales a sus pacientes mujeres; además, también señalaron ser juzgadas por su orientación sexual, de acuerdo con el video. 

En uno de los testimonios se relató la experiencia de una persona bisexual, a quien su psicólogo le dijo que las personas bisexuales no existían, porque “o te gustan las mujeres o los hombres, que ambos no se podían”. 

¿Psicólogos ejercen violencia sexual?

Uno de los testimonios que evidenció la violencia sexual que psicólogos han ejercido fue la de una persona a la que, el supuesto profesional de la salud mental le dijo que “me daba un masaje relajante y que me puede tomar fotos para trabajar en mis límites”. 

“A una amiga le dijeron que ‘quizá la vida no es para todos’ aún cuando ella había intentado acabar con su vida y él lo sabía”, dice otro de los testimonios. Mientras que en otro, donde la consultante estaba hablando sobre el abuso sexual del que sobrevivió, quien la atendía no respondió adecuadamente:“Le hablé sobre mi abuso llorando en crisis y me preguntó: ‘¿segura que tú no querías?’”, exhibió la influencer Maire Wink. 

“La violencia sexual abarca actos que van desde el acoso verbal a la penetración forzada y una variedad de tipos de coacción, desde la presión social y la intimidación a la fuerza física”, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud. 

La violencia sexual incluye pero no se limita a lo siguiente:

  • violación en el matrimonio o en citas amorosas;
  • violación por desconocidos o conocidos;
  • insinuaciones sexuales no deseadas o acoso sexual (en la escuela, el lugar de
  • trabajo, etc.);
  • violación sistemática, esclavitud sexual y otras formas de violencia
  • particularmente comunes en situaciones de conflicto armado (por ejemplo
  • fecundación forzada);
  • abuso sexual de personas física o mentalmente discapacitadas;
  • violación y abuso sexual de niños; y
  • formas “tradicionales” de violencia sexual, como matrimonio o cohabitación
  • forzados y “herencia de viuda”

“Esto le pasó a mi ex”, compartió otro de los usuarios o usuarias en la dinámica de Maire Wink, quien relató que su ex pareja también vivió insinuaciones sexuales por parte de un psicólogo hombre que le mostraba contenido pornográfico: “El ‘psicólogo’ le mostraba videos xxx que él mismo grababa de sus parejas”. 

Ante esta “confesión”, Maire Wink se cuestionó el por qué no hay denuncias sobre este tipo de conductas violentas por parte de los “psicólogos”. A lo que también respondió que “el sistema está podrido y nunca pasa nada con los agresores”, afirmó la influencer. En su perfil de instagram pueden consultarse estas denuncias junto a otras que sí señalan a otros psicólogos con sus datos.