El comediante Franco Escamilla se convirtió en tendencia en redes sociales al defender el “chiste” de Platanito Show sobre el feminicidio de Debanhi Escobar. De acuerdo con Escamilla, “no es como que los comediantes provoquen las desgracias”, pero parece ser que aún no notan que la rabia colectiva no se centra en ellos, si no en el uso de los feminicidios como material para sus shows, lo que lleva a la normalización de la violencia.

Por su parte, el comediante Sergio Verduzco, mejor conocido como Platanito Show fue confrontado por el padre y la madre de Debanhi, quienes afirmaron que él sólo buscaba lucrar con el dolor que este caso ha producido y afirmaron que emprenderán acciones legales en contra del comediante debido al “chiste” que hizo sobre la muerte de Debanhi.

Después de el "chiste" realizado por Platanito y las acusaciones en redes sociales, el comediante pidió disculpas asegurando que se arrepentía por haberse burlado de un tema tan sensible para la población mexicana, asegurando que le preocupa la alza de feminicidios en el país.

Los comentarios en redes han cuestionado la posición de Franco Escamilla afirmando que no se trata de que un “chiste” incite a alguien a cometer un delito, pero sí normaliza y la ola de violencia feminicida que están pasando las mujeres mexicanas. Así mismo, distintas mujeres han afirmado que es revictimizante escuchar al comediante hablar sobre “exigir justicia” ya que todas las acciones llevadas a cabo para erradicar la violencia machista y feminicida del país son criticadas e, incluso, parte de un show de comedia.

¿Por qué nos reímos de los chistes misóginos?

La risa ante una broma misógina cierra el pacto patriarcal de acuerdo con Itzel Arcos, standupera feminista, quien dio entrevista a La Cadera de Eva cuando Mau Nieto fue tendencia tras ser acusado de abuso sexual.

Por su parte, Alejandra Collado, especialista en género, comenta que el humor de los mexicanos se ha normalizado con la idea de que “estamos jodidos y no nos queda de otra, pero se ríe de alguien que está en una posición menor”, explica.

Cuando hablamos de qué nos reímos, depende mucho de los grupos sociales, cómo cada quien se siente, las referencias…. La mayoría de los espectáculos son producidos por hombres, el elenco es de cuatro hombres y una mujer. El público es 60% hombres y el resto mujeres, explica Itzel Arcos, lo que nos deja ver quiénes están detrás de estos modos de producción.

Como bien dice Franco Escamilla, “la comedia es un reflejo dela vida”, lo que están reflejando estos comediantes es la normalización y burla sobre la violencia que viven las mujeres en México, la cual se ha perpetuado por una cultura misógina donde las mujeres son vistas como objetos y no como sujetas de derechos.

Comedia machista

En una sociedad innegablemente machista, los estereotipos, los prejuicios y la discriminación son dirigidos de manera sistemática y exacerbada en contra de las mujeres quienes, por su género, son consideradas como seres inferiores y, por ende, son objetos de burla y denigración. Así es, la cultura dominante, a lo largo de la historia, ha dado a las mujeres un papel de subordinación en una visión masculina que las deja sin derechos, poder y prestigio y, además, vulnerables a todo tipo de abusos y violencia, afirma la editora y creadora Sara Díez.

Los “chistes” machistas no son inocentes, tienen un carácter anónimo, pero son aceptados por la sociedad que comparte un sistema de creencias que refleja la batalla entre ambos sexos. Aparecen en situaciones relajadas, pero encubren una gran violencia, una violencia simbólica presente en todos ellos, sea cual sea el género que se satiriza. Indudablemente, los tradicionales "chistes sobre mujeres", no son más que otra forma de violencia sutil para denigrar al sexo femenino, la cual se acepta y se tolera socialmente al ampararse, veladamente, bajo el manto del "humor", afirma Díez.

Cuando se cuentan "chistes misóginos" en realidad se busca atacar y denigrar a las mujeres a través de la burla y la mofa. Normalmente, esa clase de "chistes" hace referencia a la falta de inteligencia de las mujeres, o bien, hacen énfasis que tienen que ver con el cuerpo femenino.  Así mismo, de forma "graciosa" se refuerza los estereotipos por medio de ideas que la sociedad patriarcal mantiene sobre las mujeres, reafirma Díez.

Pacto patriarcal en la comedia

En diversas ocasiones, mujeres feministas han señalado que existe una complicidad entre varones que muchas veces es implícita, lo que han nombrado pacto patriarcal. De acuerdo con la colectiva Brujas del Mar, el pacto patriarcal se entiende como la forma en que los hombres se reconocen entre sí sabiéndose iguales, comunicándose e interactuando entre ellos para su beneficio y sosteniendo el sistema que les pone en ventaja viendo a la mujer desde la otredad: Lo que no es hombre.

Para continuar con la estructura de poder patriarcal, es necesario asegurar la dominación de las mujeres por medio de violencia sistémica y son justamente situaciones como la comedia misógina donde se perpetúan los estereotipos de género y se refuerza la dominación de los hombres.

Posiciones como la de Franco Escamilla son un ejemplo de pacto patriarcal en donde las mujeres se convierten en un objeto de burla y son revictimizadas al usar las violencias vividas como un “chiste”. Si la comedia se burla de un sector oprimido, ¿realmente es comedia?

APVB