¿Alguna vez has sentido miedo? ¿Cómo se siente? El miedo es uno de los sentimientos desagradables que muchas veces se busca sentir, por ello el cine de terror continúa buscando nuevas propuestas para así asombrar y atemorizar a las personas fanáticas del miedo, desde aquellas que son capaces de no cerrar los ojos mientras la oscuridad de la escena contagia la atmósfera de afuera y aquellos otros que, a pesar de ver media película con las manos en la cara, se dejan llevar por el miedo que poco a poco invade su ser hasta apoderarse del temblor que aqueja sus cuerpos.

El cine de terror se ha convertido en uno de los géneros favoritos de las y los mexicanos debido a que en las películas se muestra un “miedo seguro” donde se pueden ver monstruos, demonios y sangre sin necesidad de poner en peligro la integridad física del espectador, por lo que sólo queda el miedo puro, afirma Sandra Becerril, directora de cine de terror y escritora.

Dentro del mundo de las películas de terror existen también una serie de estereotipos en donde las mujeres son las protagonistas de las historias: mujeres poseídas, niñas con camisones blancos, madres que lastiman a sus hijos o las mujeres que son tentadas por las fuerzas oscuras son quienes normalmente aterrorizan a los espectadores y se convierten en las víctimas del mal. El cine de terror dirigido por hombres continúa reproduciendo estereotipos machistas que se justifican con las distintas creencias donde, normalmente, la mujer es considerada un ser inferior y quien es tentada de manera automática por su falta de fuerza de voluntad ante el mal.

Las convenciones de género se encuentran tan arraigadas en la sociedad que estas se ven reflejadas en el cine, tanto en las películas que se proyectan como en la producción que se encuentra detrás de ellas. En México, la mayoría de las directoras de cine se encuentran dirigidas hacia el área de los cortometrajes y documentales, esto no quiere decir que no existan mujeres capaces de dirigir películas de terror (en todas sus variantes) sino que, por los estereotipos de género, la industria cinematográfica no destina el presupuesto necesario para que las mujeres creen películas de terror, afirma Luz Jaimes, académica, docente y especialista en cine.

Si tú te fijas, los cineastas más reconocidos en México son hombres y los tres o cuatro grandes que están en Hollywood son hombres y eso no quiere decir que no haya mujeres capaces de hacer este tipo de películas, pero se necesita presupuesto, entonces sucede que la industria no se está teniendo la suficiente confianza en las cineastas mujeres para asignarle esos mayores presupuestos, entonces eso te da como resultado películas más comerciales narradas con una mirada masculina y por ello se tienen personajes femeninos estereotipados, afirma Luz Jaimes en entrevista para La Cadera de Eva.

Cine de terror machista

Las consecuencias de esta única mirada en el cine y en especial en el cine de terror, es la reproducción de estereotipos misóginos donde las mujeres se convierten en víctimas. Luz afirma que esta es una cuestión cultural y al estar tan normalizada la misoginia en la sociedad, estas ideas se retoman como inspiración para reflejar la “realidad” dentro del cine, lo que a su vez limita la participación de las cineastas y continúa reproduciendo estos estereotipos.

En la actualidad, distintas mujeres cineastas han comenzado a abrirse camino dentro de las producciones del terror y desde su perspectiva están cambiando las narrativas que existen en torno al papel de las mujeres en las películas de terror; un ejemplo de ello es Sandra Becerril, escritora y directora que disfruta el asustar a las personas con las películas y libros de terror que ha creado. Sandra afirma que la incursión de las mujeres en los géneros de terror ha creado una especie de liberación femenina ya que ellas mismas están creado nuevos papeles e historias donde las mujeres ya no son las víctimas del mal, sino que se reapropian de su ser para construir historias diferentes que revolucionan lo que ya se ha visto en el cine.

Sandra lleva 25 años dentro de la industria cinematográfica y afirma que el abrirse camino en este “mundo de hombres” ha sido complicado, pero a su vez está segura de que la comunidad en México la ha arropado debido a las personas jóvenes que están comenzando a dominar el mercado, es por ello que en el cine de terror se han encontrado grandes películas que manejan el miedo desde otras perspectivas y, del mismo modo, cada vez hay más mujeres haciendo gore, falso documental y otros subgéneros que dentro del terror se pensaba que eran “sólo para hombres”.

Cuando recién entré (a la industria del cine), me robaron un crédito y a partir de ahí me dijeron que si peleaba por eso no me darían trabajo y sí me lo dieron, es bueno pelear por lo que quieres, recuerda Sandra Becerril en entrevista con La Cadera de Eva.

Sandra le tiene amor al terror, afirma que le gusta asustar a las personas con imágenes y textos ya que, en su opinión, el miedo es un sentimiento que permanece con la persona que lo siente ya que la sensación no termina cuando se cierra el libro o cuando salen los créditos finales de la película, se queda dando vueltas en la mente del espectador de tal manera que cualquier indicio de algo fuera de lo normal, hace que la sensación de miedo regrese, no importa qué hora del día sea.

Sin el miedo no sobreviviríamos, es un instinto que nos mantiene a salvo y por eso es necesario sentirlo; con las películas de terror podemos sentir un miedo seguro y es el morbo de ese miedo lo que nos mantiene viendo una película, afirma Sandra Becerril.

El cine de terror en México

Del mismo modo, Sandra Becerril y Luz Jaimes concuerdan en que existe una sobreexplotación del cine de terror en México y en el mundo, lo que ha ocasionado que los directores caigan los estereotipos de género para argumentar sus películas.

Creo que hace falta mucha investigación en las narrativas y en el cine, resulta mucho más fácil irte con los estereotipos, con lo que ya está establecido en el cine que darte la tarea de investigar un poquito más y decir “¿desde dónde lo puedo ver?” “¿desde dónde puedo darle la vuelta?”, afirma Luz Jaimes.

En el caso particular de México, Luz afirma que los presupuestos monetarios destinados al cine de terror son demasiado escasos y las ambiciones de las directoras y directores son más grandes que ello ya que están buscando llegar a las expectativas de Hollywood, esto termina en crear un humor involuntario dentro de las producciones de terror mexicanas y, a su vez, no logran concretar una estructura adecuada para el público mexicano.

En opinión de Luz, el cine mexicano cuenta con gran potencial para crear producciones llenas de terror y son las nuevas directoras quienes están creando estas narrativas diferentes y para ello es necesario crear redes de apoyo entre las mujeres que se encuentran detrás de las producciones.

O sea, tú no buscas un director, buscas una directora. Entonces no buscas un sonidista, buscas una sonidista; no buscas a un guionista, vas a buscar una guionista. No vas a buscar un productor, vas a buscar una productora, afirma Luz Jaimes.

Aunque no lo parezca, el patriarcado se encuentra inmerso en cada uno de los espacios que existen, pero son cada vez más mujeres quienes están abriendo caminos para contar su propia versión de las cosas y cambiar las realidades. Está claro que la representación importa y el hecho de saber que hay cada vez más mujeres incursionando en espacios que hasta hace algunos años estaban hechos “para hombres” crea nuevas realidades donde el terror ya no es sólo cosa de hombres.