Culturalmente, la sociedad nos ha enseñado a través de la literatura y el cine que las mujeres debemos buscar el amor, porque antes era mal visto quedarse soltera a cierta edad y por la errónea idea de que necesitamos a nuestra “otra mitad”, como si no estuviéramos completas.

En las películas una trama clásica es la historia tipo “Cenicienta”, que busca ser salvada por un hombre y con él es feliz para siempre, pero hay otros personajes que de alguna manera rompieron esquemas porque no querían enamorarse de alguien, en parte para defender su independencia y también por todo lo que habían vivido en su familia.

“No existe el amor, sólo es una fantasía”, esas fueron las palabras que Summer le dijo a Tom en la película 500 días con ella. Esta chica causa controversia, hay quienes la odian porque creen que fue cruel con él, aunque en realidad ella siempre le dejó claro que no quería una relación.

Summer es uno de los personajes de la pantalla grande que no quería enamorarse. En la escena en la que están en un karaoke, ella le comentó a Tom y a su amigo que no tenía pareja y que no está buscando ser la novia de alguien. 

Foto de la película 500 días con ella

“Las relaciones son desastrosas, los sentimientos de la gente se lastiman, ¿quién las necesita?”, enfatizó Summer, ante la mirada atónita del amigo de Tom, quien la criticó al comentar: “Eres un chico”, como si todas las mujeres tuvieran que desear el tipo de amor que nos han enseñado a reproducir.

Otro caso emblemático es Holly Golightly, la chica Desayuno en Tiffany´s, quien desayunaba frente a esta tienda sólo para admirar las joyas. Audrey Hepburn dio vida en la pantalla grande al personaje creado por el periodista y escritor Truman Capote en el libro del mismo nombre.

Casi al final de la historia, Paul le declara su amor a Holly, a lo que ella responde: “Y qué”.  La escena llega a su clímax cuando él le dice que la ama y que le pertenece, lo que exalta a la joven que le dice tajantemente:  “No, la gente no le pertenece a otros. No voy a permitir que nadie me ponga en una jaula… No le pertenecemos a nadie y nadie nos pertenece. Ni siquiera nos pertenecemos a nosotros”.

Audrey Hepburn, la inolvidable Holly de ''Desayuno con diamantes

Qué tienen en común Holly y Summer, a primera vista podría pensarse que no mucho porque son personajes que se desarrollan en épocas distintas; sin embargo, ambas representan a mujeres independientes que temían perderse a sí mismas si se enamoraban y que al mismo tiempo tenían miedo de ser lastimadas.

Otro aspecto importante es que ambas eran mujeres que habían sufrido y que buscaban algo que le diera sentido a sus vidas. Ellas tuvieron pasados complicados, en los que vieron los problemas que se pueden tener en una relación. Los padres de Summer eran divorciados, mientras que Holly se casó muy joven con un hombre que le doblaba fácilmente la edad.

¿Por qué en algunas ocasiones las mujeres prefieren no enamorarse? Las chicas que están acostumbradas a su independencia como Holly y Summer disfrutan el estilo de vida que llevan, por eso uno de los temores es que tener una pareja resulte invasivo.

Ellas no creen en el apego, les cuesta trabajo abrir sus emociones y están acostumbradas a su soledad, por lo que tener un hombre en su vida no es una necesidad. Para hacerlas cambiar de opinión se necesita alguien que les brinde más estabilidad y seguridad a sus vidas, algo que no tenía Tom de 500 días con ella.

Aunque ambas le huían al enamoramiento, al final todo cambió. Summer sintió lo que no había tenido en sus relaciones anteriores, mientras que Holly decidió abrirse a la posibilidad de tener una relación con Paul. ¿Qué las hizo cambiar de opinión? Ambas encontraron a alguien con quien disfrutar el amor.

¿Te ha pasado?