Este domingo la selección nacional de Francia se convirtió en nuevo monarca del futbol mundial, pero durante el juego por el título y en la posterior ceremonia de premiación, una de las figuras que más lució y cuyo nombre hoy da la vuelta al mundo ha sido la de la presidente de Croacia, Kolinda Grabar-Kitarovic.
La responsable de dirigir al país acompañó durante todo el certamen a su equipo nacional y esa acción se hizo noticia mundial, al saberse que para ello había pedido un permiso especial a su nación, además de que los gastos generados por ello serían absorbidos de su propio ingreso. La presidente exigió que le fueran descontados del sueldo los días que permaneció en Rusia.
Pero este día la figura de Kolinda creció mucho más a nivel mundial, al mostrar ante la derrota sufrida ante Francia, por 4-2, una cara jovial y de pleno apoyo para su equipo nacional.
Antes de llegar a la cancha, a través de las redes sociales, Kolinda pidió a los rusos que apoyan a los jugadores croatas.
Ustedes son grandes anfitriones. Apoyen hoy a Croacia. Seamos felices juntos", pidió Grabar-Kitarovich, vestida con los colores rojo y blanco de su país. Luego, comenzó a corear: "¡Croacia!".
Conoce a Kolinda Grabar-Kitarovic, la presidente de Croacia que ha enamorada al mundo del futbol
La primera mandataria de Croacia compartió el palco con su par francés, Emanuel Macron, y con el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, a quienes se les pudo ver plenamente relajados y sumidos en un ambiente de verdadera fiesta.
Kolinda Grabar también estuvo en el palco con su marido, Jakov Kitarovic, al igual que Macron junto lo hizo con su esposa, Brigitte Marie-Claude. Junto a ellos también estuvo el presidente ruso, Vladimir Putin.
Al momento de la ceremonia inaugural la figura de la mandataria croata creció aún mucho más al mantenerse alegre y festiva a pesar de la derrota y de que justo en ese momento se soltó una torrencial lluvia.
En diversas imágenes se puede ver a Grabar-Kitarovic junto a Macron abrazando jugadores y felicitándolos por el juego y el resultado, sin importar la cantidad de agua que caía sobre sus cuerpos, lo que contrastó con el hecho de que, en ese mismo momento, una persona sostenía un paraguas para tapar de la lluvia al presidente Putin.
La actitud asumida por Kolinda es festejada ampliamente en redes sociales y hoy, esta mujer es un ejemplo mundial, por el deportivismo con el que aceptó la derrota y la manera de apoyar e impulsar a su selección nacional.
