Sonora (La Silla Rota).- “Estaba en la preparatoria y dije que iba a ser policía. Mis compañeros no me creyeron”, recuerda Janneth Pérez Morales, hoy jefa de Tránsito de Hermosillo.
En entrevista con La Silla Rota, la primera mujer en ocupar este cargo en la capital de Sonora recapitula los pasos que dio hasta llegar a tener la responsabilidad del tránsito de la ciudad más caótica –de vialidad- del estado.
Hermosillo, con un padrón vehicular de 400 mil, el más grande del estado y con 39 accidentes viales, en promedio a la semana debe ser resguardado por una mujer de 37 años, madre de un adolecente de 16 años.
Todos los días Janneth se despierta a las 5:00 de la mañana, prepara el desayuno y los alimentos para la hora de la comida, se alista y lleva a su hijo a la escuela.
Sus jornadas pueden ser de 12 horas o más, con hora de salida a las 10:00 de la noche o, en ocasiones, hasta las 3:00 de la madrugada.
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La pasión de Janeth por la educación vial y el tránsito de la ciudad comenzó a los 17 años cuando un grupo de oficiales llevaban un programa educativo a su preparatoria.
“Había un grupo que se llamaba escuadrón juvenil de educación vial. Participé y me interesó el trabajo de la policía y todo el tema de tránsito, fue ahí que decidí ingresar al ISPE”, relata.
Se inscribió en el Instituto Superior de Seguridad Pública del Estado (ISSPE) en agosto de 1998. En su generación, de 150 cadetes ingresaron con ella 22 mujeres, pero sólo se graduaron nueve.
Después, ya en la corporación de la Policía Municipal de Hermosillo, el número de mujeres se redujo aún más.
A pesar de que Janneth era una de las pocas féminas oficiales de Tránsito, nunca se enfrentó a algún tipo de discriminación o presión por el hecho de ser mujer.
Sus méritos y esfuerzos la llevaron a tal grado que el ocho de noviembre del 2016, el entonces alcalde Manuel Ignacio Acosta la nombró Jefa del departamento de Tránsito Municipal.
“Nunca he sentido algún tipo de discriminación por ser mujer, o que me hicieran menor, en mis 18 años de servicio, pero el reto ahora para mis compañeros es el acostumbrarse a que una mujer los regañe, que esté al mando”, resalta.
Una vez al frente del departamento de Tránsito de Hermosillo se dio a la tarea de reclutar a más mujeres en la corporación, por lo que de once que había cuando tomó las riendas, el número aumentó a 50.
Cada día, Janett Pérez Morales acude a reuniones con sus 14 directores de área –todos hombres-, da rondines en su patrulla por los eventos que deben resguardar los oficiales, por los accidentes automovilísticos en la vía pública y visita las seis zonas de tránsito en las que se divide la ciudad.
Además, todas las tardes acude al gimnasio para ejercitarse y mantenerse en forma. Es una mujer que cuida su apariencia, viste con su uniforme perfectamente planchado (camisa blanca y pantalón negro), el cabello recogido en una coleta y el rostro maquillado. La joven de 37 años no es el típico estereotipo de un jefe de departamento policiaco.
Por esta razón, llama a las mujeres mexicanas a nunca pronunciar las palabras “no puedo” cuando se trate de cubrir un cargo catalogado para los hombres. Afirma que las mujeres son igual de preparadas y capaces para cumplir cualquier responsabilidad.
“Toda mujer podemos realizar cualquier puesto que está catalogado para un hombre. Todas las mujeres podemos, tenemos la fortaleza para hacerlo, nomás hay que creerlo porque el mayor obstáculo lo ponemos nosotras mismas al decir: no puedo. Para nosotros no deben existir esas palabras, nosotras sí podemos. Aquí estoy yo, ya tengo un año y tres meses en el cargo. Tenemos la suficiente capacidad”, pronuncia con seguridad en sus palabras.
Actualmente, Sonora y Hermosillo son gobernados por mujeres: la primera, Claudia Pavlovich Arellano, electa en 2015; y la segunda, Angelina Muñoz, quien tomó posesión en enero de este año por la licencia que tomó Manuel Ignacio Acosta.