ZEMPOALA, HIDALGO. - En Santo Tomás, una localidad con apenas 2 mil habitantes, perteneciente a Zempoala, Hidalgo, un grupo de jóvenes, adolescentes y niños buscan preservar una tradición ancestral de la religión católica que data de hace 400 años aproximadamente, conocida como Los Judas, que se celebra cada año durante la cuaresma previa a la Semana Santa, la cual, aunque hay otros poblados que también la conmemoran, cada vez es menos común en México.
Los Judas desfilan por las calles de Santo Tomás durante la cuaresma, a partir del Miércoles de Ceniza, vestidos con túnicas de colores, máscaras, matracas, tambores, flautas y otros elementos, con el objetivo de llevar un mensaje: “son la representación de un demonio, simbolizando los cuarenta días cuando el diablo tienta a Jesús y trata de seducirlo, como se dice coloquialmente es el tiempo en el que el diablo anda suelto”, señala Antonio Ramírez Reyes, líder de la agrupación, quien ha participado desde que era un niño.
Esta actividad tiene sus inicios tras la conquista, en el proceso de la evangelización de la nueva España, entre los años 1560 a 1650, cuando llegan los Franciscanos a la región y posteriormente arriba Fray Bernardino de Sahagún al convento de Tepeapulco, cerca de Santo Tomás. Este misionero español comienza a estudiar la cultura azteca y sus tradiciones; se percata que los pobladores no respetan los días de guarda durante la cuaresma como lo dicta la religión católica como preparación a la Semana Santa.
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“Los Judas surgen como una necesidad de control a la población, porque no obedecen al padre, ya se les dijo que esos 40 días antes de la Semana Santa no se debía comer carne, tomar alcohol, ni andar de parranda. A la gente que andaba afuera después de las 7 de la noche se les metía a chicotazos a su casa, todos los demás judas que iban formados eran personas detenidas por desobedecer”, menciona Antonio Ramírez, originario de Santo Tomás, que conoce la historia de esta tradición.
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Significado de Los Judas
El grupo que desfila es liderado por el Judas Mayor, la representación del mal, quien lleva puesto un hábito o túnica en color negro, simbolizando la contraparte del bien. Su función es hostigar, amedrentar y ser una tentación para los hombres de fe. Usa un chicote o látigo como arma para provocar miedo entre la población.
“El hábito que porta el Judas Mayor es similar al de un sacerdote, color negro, simbolizando el mal, los cuernos representan un demonio, un chicote, el cual hace muchos años si lo utilizaba para pegarles a las personas que se portaban mal, ocasionando temor en la población. La gente más veterana del pueblo cuenta que se escuchaban los gritos “escóndete que te llevan Los Judas”.
El tambor y la flauta tienen una gran influencia de la chirimía (flauta de madera rudimentaria). La función original de la flauta fue tener un control y sumisión de la serpiente La función del tambor es marcar un compás de 72 tiempos por minuto para una marcha a paso redoblado.
“Como para la religión católica el diablo es representado como una serpiente del mal, se adopta la costumbre de usar una flauta para controlarla, así como en la cultura oriental, se usa la flauta y el tambor para hacer un compás y que vayan marchando”.
Los Judas que llevan matraca marchan en calidad de esclavos y detenidos por no respetar la cuaresma, “ellos no pueden andar bailando como el Judas Mayor. El Judas solo sale a la calle a ver a quien se jala, lo forma, le da su matraca para que marche por las principales avenidas del pueblo y así era como cumplía su penitencia”.
La cruz es la principal insignia de la religión católica, simboliza la victoria de Jesús sobre la muerte. Además, se utiliza un estandarte de color rojo que simboliza el combate, la guerra, la violencia y la sangre.
Entre Los Judas existe el capitán, que tiene la responsabilidad de llevar el control de los presos que van formados, mantiene el orden utilizando una espada para imponer su autoridad.
Las máscaras
De acuerdo con Antonio Ramírez, “las máscaras de Los Judas se utilizaban para no identificar a los que se portaron mal, originalmente los castigados cumplían con marchar por las calles, les colocaban máscaras de madera para cubrir su identidad, se aplicaba el dicho ‘queda en tu conciencia’”.
Debido al deterioro de la madera y los altos costos de la materia prima, en la actualidad se utilizan máscaras de plástico.
“Los Judas surgen como una necesidad que al paso de los años se convirtió en una tradición. Los Judas también se encargan de dar acompañamiento durante el viacrucis, son los encargados de ir interpretando la melodía de duelo de la pasión de Jesús”.
Sábado de Gloria
La culminación de las actividades de esta tradición se da el Sábado de Gloria que pone fin a la Semana Santa con la quema de Judas, elaborado de cartón y pirotecnia, que simboliza el triunfo del bien sobre el mal y la resurrección de Jesús.
“Se comparte con los asistentes los tradicionales cocoles elaborados en horno de piedra y café”.