VALLE DE CHALCO, Estado de México (La Silla Rota).- Abajo de las escalinatas de la ex Hacienda de Xico, que fue propiedad de Íñigo Noriega en la época del presidente Porfirio Díaz, fueron encontrados cuatro esqueletos al parecer de una población prehispánica que habitó el Cerro de Xico 700 años después de Cristo.
La ex Hacienda actualmente es remodelada con una inversión de 55 millones de pesos, que el alcalde Ramón Montalvo Hernández gestionó en la Cámara de Diputados cuando era legislador por el distrito de .
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El arqueólogo Salvador Pulido está a cargo de un equipo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) para rescatar los restos óseos y hacer los estudios correspondientes, para confirmar si pertenecen a una tribu o población que se desarrolló en las orillas del Cerro de Xico en la época Teotihuacana.
De acuerdo al cronista comunitario municipal de Valle de Chalco, Genaro Amaro Altamirano, en este hallazgo se encontraron cuatro osamentas, aunque los arqueólogos siguen haciendo excavaciones para ver sí se encuentran más.
Los esqueletos estaban en posición decúbito lateral y no son los primeros que se encuentran alrededor de la ex Hacienda de Xico, ya que se han localizado antes otras osamentas de épocas diferentes, desde la teotihuacana hasta la azteca.
A su vez, el Cerro de Xico es un antiguo volcán que se ubica en el paralelo 19 en la cordillera Neovolcánica. Antes de la conquista de México-Tenochtitlán, el cerro era una isla habitada por los pueblos antiguos.
Ahí llegó a vivir el conquistador español Hernán Cortés, de acuerdo a las crónicas del museo de Valle de Chalco. Tenía en el Cerro de Xico una casa de campo, pues el rey de España Carlos V le otorgó por cédula real el Peñol de Xico, en la primera etapa del siglo XVI.
La casa de Hernán Cortés perduró hasta el siglo XIX, cuando otro español de nombre Íñigo Noriega en 1889 adquirió el rancho, y sobre los cimientos originales de la casa de Hernán Cortés mandó a erigir una construcción de tipo francés, lo que formó la hacienda en la que se producía maíz, remolacha y leche.
Fue Íñigo Noriega quien mandó a desecar el Lago de Chalco para tener más tierras para sembrar y, posteriormente, Porfirio Díaz mandó construir una vía de ferrocarril para llegar a la hacienda en sus días de descanso.
Posterior a la Revolución de 1910, los terrenos de la Hacienda fueron repartidos entre los pueblos de la zona con la finalidad de crear ejidos.
La ex Hacienda de Xico estuvo abandonada durante décadas después de los conflictos armados de la Revolución, pero en su entorno se formó una población campesina que mantuvo los cultivos en las hectáreas que formaron parte del patrimonio de Íñigo Noriega.
Ahora, abajo de esas escalinatas del edificio tipo francés que construyó Íñigo Noriega, se encontraron los restos humanos prehispánicos.
"Era común que los pobladores sepultaran a sus muertos a un lado de sus casas para que siempre los acompañaran, ya que no existían panteones. En otros puntos del cerro de Xico se han localizado más esqueletos en años anteriores", explicó el cronista municipal.
El ayuntamiento de Valle de Chalco, junto con el INAH, resguardó el lugar del hallazgo para que los arqueólogos realicen las excavaciones y estudios correspondientes.
fmma