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Violencia imparable deja estela de muerte en siete estados

Puebla, Veracruz, Guerrero, Quintana Roo, Morelos, NL y Tabasco registraron una ola de asesinatos y secuestros en las últimas 48 horas; no hay ningún detenido

Escrito en ESTADOS el

En las últimas 48 horas, al menos siete estados registraron una serie de asesinatos, cuya marca fue la violencia extrema utilizada por los homicidas, y lo peor es que en ninguno de los casos hay detenidos.

La estela de sangre comenzó la noche del martes 11. A las 21:30 horas, sujetos armados le dispararon a Norma Sarabia, reportera del diario Tabasco Hoy, a las puertas de su casa, en el municipio de Huimanguillo.

Este martes, por la mañana, el periodista Marcos Miranda Cogco fue secuestrado en Veracruz. De acuerdo con la hija del comunicador, dos camionetas habrían interceptado a Marmiko a media cuadra de su domicilio, para privarlo de su libertad. La esposa del periodista exigió su libertad y clamó a los plagiarios que Miranda Cogco no se convierta en una estadística más sobre homicidios de comunicadores.

Entre lunes y martes el centro de Puebla registró una jornada violenta protagonizada por el crimen organizado, ya que en menos de 24 horas aparecieron cuatro embolsados: uno en la capital y tres en San Matías Talancaleca. Hasta el momento los cuerpos no han sido identificados.

En Taxco, Guerrero, al menos a tres elementos de la Policía Preventiva murieron en una emboscada sobre la Avenida de Los Plateros, cuando un grupo de desconocidos les disparó. De acuerdo con el reporte de la Fiscalía General del Estado, los uniformados identificados como Erick "N", Juan "N" y Everardo "N", se encontraban al interior de la patrulla con número 57026, cuando fueron agredidos.

En Cancún, Quintana Roo, en menos de 24 horas se produjeron dos ataques contra policías con saldo de por lo menos dos muertos. El ataque de este miércoles se registró alrededor de la una de la tarde en la súper manzana 99, dejando dos muertos.

Este ataque ocurrió horas después de que cinco personas resultaran lesionadas tras un ataque en el cruce de las avenidas La Luna y Cancún. En los primeros reportes se mencionó que elementos de la Secretaría estatal de Seguridad Pública resultaron heridos, pero hasta el momento no se han identificado.

Y en Morelos fueron halladas seis bolsas de plástico con restos humanos de personas que fueron descuartizadas. A las 08:48 horas de este miércoles, elementos de la Coordinación General de Servicios Periciales acudieron a la colonia Lázaro Cárdenas, de Cuernavaca, en donde se realizó el levantamiento de tres bolsas plásticas conteniendo restos humanos. A las 09:02 horas, se levantaron otras dos bolsas plásticas con restos humanos casi en el mismo lugar, y a las 09:53 horas se halló en la Unidad Habitacional El Capiri una bolsa de plástico con una extremidad cefálica.

En las últimas 24 horas, Nuevo León tuvo una jornada violenta con 10 muertos, al menos cuatro de ellos relacionados con el crimen organizado.

IMPUNIDAD ESTRUCTURAL

Gerardo Rodríguez Sánchez Lara, coordinador académico del Centro de Estudios sobre Impunidad y Justicia de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP), considero que los hechos de violencia que se han presentado en los últimos meses, no son atípicos porque es el reflejo de la violencia que vive el país.

Es normal porque la impunidad es estructural. En este país los asesinatos no se investigan, los aparatos de seguridad y procuración de justicia siguen colapsados. Son extraordinarios los hechos de violencia reciente por el tipo de objetivos que han tenido los criminales, pero no es atípico, ni está fuera de las tendencias porque el país está colapsando en materia de seguridad y procuración de justicia, se van a seguir cometiendo este tipo de violencia

El especialista comento que otro de los factores que origina la violencia y la inseguridad es la ineficacia de instituciones de seguridad y procuración de justicia de los tres niveles de gobierno.

La Guardia Nacional es solamente un eslabón de muchos que no están funcionando, los gobiernos, las secretarías, las procuradurías y fiscalías estatales no lo hacen, la Fiscalía General de la República no termina por consolidarse. Los jueces y magistrados siguen estando rebasados por las carpetas de investigación

Agregó “mientras que la impunidad siga siendo rampante seguiremos viendo estos casos altamente mediáticos de secuestros y homicidio”.

Hace dos años, Andrés Manuel López Obrador escribió en sus redes sociales que el aumento a la violencia se debe a un mal gobierno.

LOS SECUESTROS

La noche del martes fue liberado, con vida, el doctor Alfredo Labourdette Melche, figura reconocida de la Universidad Veracruzana (UV), quien había sido secuestrado el lunes, en el puerto veracruzano.

Además, en Veracruz, por segundo mes consecutivo la organización Alto al Secuestro señaló a la entidad como la de mayor número de secuestros a nivel nacional, siendo Xalapa y Coatzacoalcos los municipios con el más alto índice de estos hechos delictivos en el país.

A través de la cuenta oficial de Twitter, la organización indicó que conforme al reporte generado de diciembre a mayo de 2019 en Veracruz se han cometido 258 secuestros.

CADA 24 HORAS ASESINAN A 96

Durante los cuatro primeros meses de 2019, cada 24 horas, 96 niños, mujeres y hombres fueron asesinados en alguna de las 32 entidades del país, la cifra más alta registrada en un cuatrimestre desde 1997.

El último reporte del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), muestra que entre los meses de enero y abril de 2019, se iniciaron nueve mil 843 carpetas de investigación por el homicidio doloso y feminicidio de 11 mil 532 personas.

9 mil 549 expedientes se abrieron por el asesinato de 11 mil 221 personas, mientras que 294 carpetas son por el feminicidio de 311 mujeres.

GUANAJUATO, LA MÁS VIOLENTA

Los registros del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Pública muestran que Guanajuato es la entidad con el mayor número de asesinatos (homicidios dolosos y feminicidios) durante el primer cuatrimestre de 2019.

De acuerdo con el último reporte de la incidencia delictiva del país, entre los meses de enero y abril de este año en esa entidad mil 242 personas han muerto de forma violenta. De ellas mil 237 son por homicidio doloso y cinco por feminicidio.

El Estado de México es la segunda entidad con más víctimas.  De acuerdo con los datos en ese estado se han registrado mil 53 personas. De ellas, mil 25 son por homicidio doloso y 28 por feminicidio.

La tercera entidad con más muertes es Baja California con 860. De ellas, 858 son por homicidio doloso y dos por feminicidio.

¿BAJAR DELITOS?

El Plan Nacional de Desarrollo (PND) del presidente Andrés Manuel López Obrador se compromete reducir en 50% los delitos de alto impacto que más afectan a los habitantes, así como a otorgar “amnistía o indulto” a los infractores.

El documento de 225 páginas entregado a la Cámara de Diputados asegura que al finalizar el sexenio México, también dejará de ser un referente internacional de la violencia, desapariciones y violaciones a derechos humanos.

“Los índices –de homicidios doloso, secuestros, robo de vehículo, robo a casa habitación, asalto en las calles y en el transporte público y otros- se habrán reducido en 50 por ciento en comparación con los de 2018 y México habrá dejado de ser la dolorosa y vergonzosa referencia internacional como tierra de violencia, desaparecidos y violaciones a los derechos humanos”.

Sin embargo, estos seis meses del gobierno de la Cuarta Transformación han roto todas las marcas de homicidios.

AMNISTÍA E INDULTO A LOS INFRACTORES

El apartado de seguridad, el documento también reconoce que es imposible disminuir la violencia a través del despliegue de policías y fuerzas armadas, por lo que propone el desarme y la entrega de las personas que cometan un delito.

“Ante la imposibilidad de derrotar las diversas expresiones delictivas por medios exclusiva o preponderadamente policiales y militares y frente al absurdo de querer pacificar con métodos violentos, resulta imperativo considerar la adopción e modelo de justicia transicional que garanticen los derechos de las víctimas y que, al mismo tiempo, hagan posible el desarme y la entrega de los infractores, a quienes se les respetará sus derechos legales y se les propondrá un cambio de vida”.