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Vinculan a MP y a médico por simular suicidio en caso de feminicidio

La Fiscalía Anticorrupción informó que el MP fue cesado, en tanto que el doctor involucrado trabajaba por evento, por lo que ya no será contratado

Escrito en ESTADOS el

GUADALAJARA.- El Juez de Control, Ángel Uriel Lomelí Veloz, vinculó a proceso penal al agente del Ministerio Público, Óscar “N”, y al médico José Fernando “N”, por abuso de autoridad y delitos cometidos en la administración de justicia.

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Ambos funcionarios intentaron -después de simular una necropsia- archivar un caso de feminicidio como suicidio, de acuerdo con las investigaciones de la Fiscalía Anticorrupción.

El agente del MP fue suspendido del cargo y al médico ya no lo contratarán para peritajes en zona Norte.

La Fiscalía Anticorrupción informó que el médico involucrado era contratado por evento y hacía funciones de forense, avalado por el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses de Jalisco (IJCF).

De acuerdo con las investigaciones, rindió un peritaje en el que acreditó el suicidio de una joven residente del Rancho El Bajío, en Cuexcomatitlán, comunidad Wixárika, ubicada en Mezquitic.

Las investigaciones establecieron que la necropsia fue simulada y la mujer no se suicidó, sino que se trató de un feminicidio, y por tanto nunca se aplicó el protocolo para tal caso, por lo que la mujer fue revictimizada.

Los hechos ocurrieron el 3 de marzo de 2020; al día siguiente, el médico ya había emitido un reporte de la necropsia. Tras realizar la exhumación del cuerpo de la víctima, debido a las irregularidades que presentaba el procedimiento forense, se comprobó que sólo se habían hecho cortes superficiales en tórax y abdomen.

Por su parte, el agente del Ministerio Público, Óscar “N” archivó el caso como suicidio sin tomar en cuenta diversos hechos señalados por familiares de la víctima, por ejemplo, que padecía violencia por parte de su pareja.

El Juez Ángel Uriel Lomelí fijó como medidas cautelares para Oscar “N”: la suspensión del cargo, no salir del municipio de Zapopan ni de Jalisco y presentarse ante el juez cada 15 días, durante seis meses.

En tanto, José Fernando “N” tendrá que presentarse cada 15 días ante el juzgado de Paz de Huejuquilla el Alto, no podrá salir del país y en su caso no aplicó la suspensión debido a que no labora para el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses ni para el Ayuntamiento, pero sí dejará de ser contratado para realizar las necropsias.

LA HISTORIA

Liliana, una mujer indígena de la comunidad Wixárika, fue asesinada a manos de su esposo, quien para ocultar sus actos arrastró el cuerpo hasta un árbol en donde la colgó para después denunciar que se había suicidado.

La declaración de su esposo señala que la tarde del 2 de marzo discutió con ella, luego salió de su casa para comprar comida y a su regreso ella ya no se encontraba.

Aseguró que no supo nada de su esposa hasta la mañana siguiente, cuando supuestamente la encontró colgada de un árbol. Posteriormente dio aviso a las autoridades señalando que su esposa se había suicidado.

Mara Muñoz, defensora de la familia de Liliana, dijo que ninguna de las autoridades que llegaron al lugar de los hechos, desde policías municipales, estatales, agentes del Ministerio Público y hasta el personal del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, tomaron en cuenta una mancha de vómito y saliva en la recámara, un collar roto, los destrozos al interior del domicilio o las marcas del piso de arrastre que culminaban en el árbol en donde fue encontrada.

“Ni siquiera hubo cadena de custodia de la bufanda con la que presuntamente Liliana se había ahorcado”, dijo.

Según los reportes, el cuerpo de Liliana permaneció colgado más de doce horas desde su hallazgo. Personal de la Fiscalía tardó nueve horas en llegar, más otras tres horas que tardaron en tomar las diligencias correspondientes.

Después, el cadáver fue llevado a Huejuquilla, donde le realizaron la necropsia para determinar las causas de la muerte, asentando que fue un suicidio pese a las marcas de navaja en su abdomen así como otros indicadores de haber sufrido violencia antes de fallecer.

Cabe señalar que en el estado de Jalisco es obligatorio en todos los casos de muerte en mujeres, incluso suicidios, se siga el protocolo de feminicidio.

Por ello, familiares de Liliana presentaron ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos una denuncia apuntando las violaciones al debido proceso, pues además, señalan que en el dictamen de la necropsia no hay registros de raspado de uñas, muestras vaginales y bucales.