Main logo

Victoria buscaba mejor vida para sus hijas y fue asesinada por policías en Tulum

La salvadoreña había llegado hace unos años a México como refugiada, con el fin de tener una mejor vida para ella y para sus dos hijas que hoy deja en orfandad

Escrito en ESTADOS el

Victoria Salazar llegó a este país hace unos años con la intención de tener una mejor calidad de vida para ella y sus dos hijas, sin embargo, su destino cambio luego de que fuera asesinada por cuatro policías en el paraíso mexicano, Tulum, en Quintana Roo. 

Victoria era una mujer salvadoreña de 36 años, originaria de Sonsonate, un municipio que tiene un desarrollo por debajo de Guatemala y Nicaragua, según un informe sobre el desarrollo humano de El Salvador. 

En este municipio donde vivía Victoria antes de llegar a México, los niveles de pobreza eran de 43%, como señala la Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiples (EHPM).

Su madre contó a medios locales que, para Victoria era difícil encontrar un trabajo estable y siendo madre soltera se volvía más complicado. Sonsonate es un municipio también donde domina el comercio informal.

Estas condiciones quizá fueron las que orillaron a Victoria a dejar su país y migrar a México, instalándose en Tulum, gracias a una visa humanitaria permanente que le dieron en México hace cinco años como condición de refugiada. 

“Ella solo buscaba una mejor vida para sus dos hijas menores”, según contó su hermano al medio salvadoreño El Mundo. Sin embargo, dijo desconocer si había migrado por alguna amenaza en su país.

Victoria quería cuidar a sus hijas y darle los estudios que, quizá, no hubiera podido darles en Sonsonate. Ella formaba parte de los miles de salvadoreños que logran llegar a México. Su plan era permanecer en este país, según dijo su hermano. Ella nunca tuvo la intención de llegar hasta Estados Unidos.

El pasado sábado 27 de marzo, Victoria se encontraba en una tienda de convivencia sobre la avenida La Selva de este lugar turístico donde vivía y donde trabajaba como empleada de un hotel. 

Según las primeras declaraciones del fiscal del estado de Quintana Roo, Oscar Montes de Oca, la policía municipal recibió una llamada de denuncia donde supuestamente había una mujer alterando el orden público.

La mujer de la que hablaban era Victoria. Se encontraba en el mismo lugar y minutos después la policía llegó a detenerla.

Según las declaraciones de los policías, la mujer “se estaba manifestando de forma agresiva”, por lo que tuvieron que someterla contra el piso. 

Pero los oficiales utilizaron una maniobra de sometimiento mal aplicada rompiéndole la primera y la segunda vértebra, causándole la muerte.

 

El momento fue retratado por personas que se encontraban en el lugar. Las fotografías y videos que circularon en medios y redes sociales mostraban como Victoria se encontraba boca abajo contra el piso. 

Sometida por una policía quien mantenía todo su peso sobre ella, y con la rodilla en el cuello, la salvadoreña intentaba moverse mientras se quejaba del dolor. 

No pasaron muchos minutos para que Victoria se desvaneciera por completo, quedando acostada sobre esa avenida turística que caracteriza el paraíso de las playas caribeñas. 

René Olivares, hermano de Victoria, ha pedido un juicio y condena contra estos policías que terminaron con la vida de su hermana. 

René, quien aún vive en El Salvador, vio el video a través de redes sociales. 

“(Siento) indignación, impotencia por no haber estado en el lugar y ayudarle, se siente mucha tristeza”, dijo al portal Elsalvador.com

Este lunes Rene asistió al Ministerio de Relaciones Exteriores en El Salvador para pedir justicia por Victoria, quien ha dejado ahora a sus dos sobrinas en orfandad.

Victoria Salazar era una salvadoreña que vivía en México, desde hace unos años, con una “visa humanitaria”. Fue...Publicado por Nayib Bukele en Domingo, 28 de marzo de 2021

También pide ayuda al gobierno salvadoreño para poder viajar a Tulum, Quintana Roo, para poder repatriar los restos de Victoria y además para traer a sus dos hijas que han quedado bajo el cuidado de las autoridades mexicanas.

El acto fue condenado por el presidente de El Salvador Nayib Bukele, quien pidió justicia y dijo que su gobierno se haría cargo de la manutención y estudios de las dos hijas de victoria.

El periodista nicaragüense, Gerall Chávez escribió en redes sociales que esta es una historia como la de los miles de centroamericanos que huyen de sus países por la violencia, la inseguridad y desempleo. 


bl