TUXTLA GUTIÉRREZ.- Desde que comenzaron una serie de protestas por abuso y acoso, a finales de enero pasado, la Universidad Autónoma de Chiapas (Unach) solo ha atendido 77 de las 627 denuncias por acoso sexual, sobre todo de maestros hacia alumnas de varias facultades.
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Así lo evidenciaron integrantes de la Red de Colectivas Feministas Universitarias de Chiapas (Recofuch), quienes lamentaron que los avances en cuanto a las mesas de trabajo han sido pocos, “no se han hecho las cosas como se dicen, y solo han simulado”, refutaron.
Aclararon que se han establecido varias reuniones con el propio rector de esa casa de estudios, Carlos Faustino Natarén Nandayapa, pero lo único que observan es “burocratismo” para solucionar todos los puntos del pliego petitorio, principalmente el del tema de acoso y abuso sexual.
Lo que ellas sienten, dijeron, es que las autoridades universitarias solo han hecho dilatorio este proceso, pero con el fin –coincidieron—de respaldar a académicos de base que están acusados de ese tipo de ilícitos, por lo que lamentaron que no haya disposición para solucionar la problemática.
Como se informó, decenas de estudiantes que integran esa Red efectuaron un plantón entre febrero y marzo pasados para exigir que se atendieran sus quejas; como la Unach se comprometió a escucharlas, esa protesta culminó.
Sin embargo, las inconformes amagaron con iniciar manifestaciones similares, e inclusive acudir a otras instancias para que se les haga justicia a quienes han sufrido algún tipo de abuso por parte de algunos profesores.
Hasta ahora tenemos activas cuatro mesas de trabajo, pero vemos lo mismo, las mismas omisiones, y así cómo le podemos dar visto bueno, entonces no sabemos hasta dónde quedaremos
Entre otras cuestiones, evidenciaron que, desde que se manifestaron por el feminicidio de Mariana Sánchez, estudiante de la Facultad de Medicina de la Unach, ellas han sido hostigadas y amenazadas por diversas vías, a fin de intimidarlas y que abandonen el movimiento.
De hecho, agregaron, hay compañeras a las que siguen hasta sus domicilios, “se han tenido que meter a negocios para buscar ayuda, y eso es parte de nuestras demandas, que no haya represalias”.
En cuanto al funcionamiento del Departamento de la Defensoría Universitaria de la Unach, evidenciaron que, hasta el momento, no han visto avances significativos con esa área, “y ahora según se pretende echar andar una comisión de género en cada una de las facultades, pero creemos que no funcionarán; solo es desviar dinero, presupuesto”, refirieron.
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