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Tierra Caliente: estudiantes cumplen una semana sin clase por la violencia

Los estudiantes de la mayoría de los planteles de la cabecera municipal y algunos de la zona rural sólo asistieron a clases el lunes 26 de agosto, pero ya el martes no regresaron

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Chilpancingo, Guerrero (La Silla Rota).- En la cabecera municipal y parte serrana de Coyuca de Catalán, uno de los nueve municipios de la Tierra Caliente, el ciclo escolar sólo fue inaugurado y de ahí no ha pasado, porque la violencia no ha devuelto a los niños a las escuelas.

Los estudiantes de la mayoría de los planteles de la cabecera municipal y algunos de la zona rural sólo asistieron a clases el lunes 26 de agosto, pero ya el martes no volvieron. La razón es que el lunes por la noche ocurrieron balaceras en diferentes puntos de la cabecera municipal, sobre todo en la zona de la periferia y en el rumbo que enfila hacia la parte de la Sierra de ese municipio.

El secretario de Educación en Guerrero, Arturo Salgado Urióstegui, aceptó que la situación en Coyuca de Catalán aún no se restablece. “Las fuerzas de seguridad llevaron a acabo un operativo, el cual se está llevando a cabo estas zonas y yo creo que eso va a permitir que esas escuelas regresen a la normalidad”, comentó.

La balacera ocurrida la noche de ese mismo día que inició el ciclo escolar generó la suspensión de clases, o más bien, que los niños y jóvenes no asistieran a la escuela. Las autoridades estatales manejaron que alrededor de 40 planteles estaban cerrados como secuela de la balacera.

El gobierno del Guerrero informó que ese mismo día aplicaron operaciones policiacas especiales en Tierra Caliente para contrarrestar el panorama, pero al parecer no ha surtido efecto porque los niños y jóvenes no han vuelto a clases. 

Este lunes, a una semana de distancia de ese episodio violento, la mayoría de los planteles contabilizados en un principio siguen cerrados. De acuerdo con el gobernador Héctor Astudillo Flores 27 planteles, entre primarias y secundarias, de la zona urbana y serrana de Coyuca de Catalán todavía están sin clases.

Hay un conflicto similar en la Costa Grande de Guerrero, es decir, también hay escuelas sin clases porque contextos violentos. El secretario de Educación aceptó la suspensión en algunas lugares de esa región, pero sin precisar en cuántos planteles y lugares. Habitantes de la zona informaron que en las localidades de Galeana, ubicada en el municipio Coahuayutla; El Mameyal, perteneciente a Petatlán, y Las Ollas, del municipio de José Azueta, es dónde detectaron las escuelas sin clases.

En ese ciclo escolar, según la Secretaría de Educación Guerrero (SEG), debieron iniciar clases en este ciclo un millón 162 mil estudiantes y casi 63 mil maestros en más de 12 mil planteles, pero en las cifras no están contempladas esta eventualidades por la violencia.

A la Tierra Caliente y la Costa Grande les unen condiciones parecidas de inseguridad, sobre todo en sus poblados de las partes serranas, que es donde está focalizada la suspensión de clases.


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