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Señalan a organización por secuestro de líderes indígenas

Este sábado liberaron a los defensores de derechos humanos quienes estuvieron privados de su libertad desde el martes

Escrito en ESTADOS el

Chilpancingo, Guerrero (La Silla Rota). A las nueve de la noche del viernes, Obtilia Eugenio Manuel llamó desde su teléfono celular a Cuauhtémoc Ramírez Rodríguez, otro líder de la Organización del Pueblo Indígena Me’phaa (OPIM), para decirle que la liberarían junto a su compañero Hilario Cornelio Castro a las seis de la mañana de hoy en el zócalo de Tierra Colorada (Juan R Escudero).

Cuauhtémoc Ramírez, llegó solo hasta ese lugar poco antes de la hora que le indicó. Ahí estaban los dos defensores de derechos humanos desaparecidos desde el martes pasado. Era cierto, los habían liberado después de cuatro días de cautiverio.

Ahora, los tres miembros de la OPIM reunidos en el zócalo de Tierra Colorada, salieron de la cabecera municipal en busca de un refugio.

Cuando se acercaban a la caseta de Palo Blanco en la autopista del Sol, en dirección a Chilpancingo, fue que personal de gobierno los alcanzó y acompañó. Los defensores que aparecieron en el mismo lugar del que se los llevaron, siguieron hasta la ciudad; se refugiaron en las instalaciones de la Fiscalía General de la República (FGR).

Esta información la proporcionó Cuauhtémoc Ramírez en una conferencia de prensa este sábado por la tarde, después de que el gobierno del estado difundió la liberación de los defensores como resultado de operaciones de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), de la FGR, de la Fiscalía General del Estado (FGE) y de la Policía del Estado.

Cuauhtémoc Ramírez dijo que Obtilia e Hilario están golpeados. A la dirigente de la OPIM se le dificulta caminar por los golpes. Todavía no le explica qué pasó en su cautiverio de cuatro días, porque tuvo los ojos vendados y tiene un agotamiento físico.

En Tierra Colorada fue el último lugar en el que Obtilia Eugenio se comunicó por teléfono celular con Cuauhtémoc Ramírez el martes que desapareció. Ahí subió a un taxi colectivo con dirección hacia Chilpancingo y ya no se supo de ellos.

Las autoridades no han explicado que pasó en ese trayecto y con ese taxi.

Tierra Colorada se une por la misma carretera hacia el Valle de El Ocotito, zona rural de Chilpancingo. En este tramo hay dos grupos de autodefensas, uno es de la Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) y el otro del Frente Unido para la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (FUSDEG).

El líder de la OPIM señaló a la UPOEG de una posible implicación.

Obtilia Eugenio es integrante del Concejo Municipal de Autoridades Comunitarias de Ayutla, un órgano de gobierno elegido por usos y costumbres. La UPOEG fue gestora de ese método de elección en Ayutla.

Las tareas de la defensora en ese Concejo son transparentar la asignación de obras públicas que se dieron en Ayutla, lo que le acarreó las últimas amenazas, de acuerdo con activistas de Guerrero.

En la segunda parte de la información oficial sobre la liberación de los defensores, el gobierno del estado difundió una fotografía en la que aparece el gobernador Héctor Astudillo Flores con Obtilia Eugenio e Hilario Cornelio, y un breve texto donde dice que buscaría, junto con el gobierno federal, reforzarle sus medidas cautelares.

Los defensores de la OPIM tienen medidas dictadas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) desde 2009, es decir, esas garantías de seguridad es una responsabilidad de gobierno con la OPIM desde hace casi 10 años.